Con la inauguración el pasado 26 de octubre de la línea de alta velocidad entre Shanghai y Hangzhou, ahora la distancia de 202 km entre Hongqiao, en Shanghai, y la capital de Zhejiang, se puede recorrer en tan sólo 39 minutos. Con éste, son ya 10 trenes de alta velocidad en funcionamiento en China, siendo el primero de ellos fue el ferrocarril entre Beijing y Tianjin, que entró en servicio el 1 de agosto de 2008.
La línea Shanghai-Hangzhou es la sexta que se pone en funcionamiento en 2010. La velocidad programada para el trayecto es de 350 km/h, y el ferrocarril recorre los distritos de Minhang, Songjiang y Jinshan, en Shanghai, antes de entrar a las ciudades de Jiaxing y Hangzhou, ya en la provincia de Zhejiang. Siete de las nueve estaciones a lo largo de la línea son totalmente nuevas: Songjiang Sur, Jinshan Norte, Jiashan Sur, Jiaxing Sur, Tongxiang, Haining Oeste y Yuhang.
¿Qué impacto tendrá en la vida de los habitantes de la zona esta nueva vía de comunicación? Para tratar de averiguarlo, hemos recorrido varias de las ciudades a lo largo de la línea, antes y después de que el tren entrase en funcionamiento, tomándole el pulso al desarrollo en el delta del río Yangtsé.