El pabellón de México: “Vivir mejor”

“La idea del papalote es la visión de altura, poder ver mas allá, elevar los sueños de la sociedad mexicana y la china” nos cuenta Miguel Barrio, cónsul general de México en Shanghai, con quien tuvimos el placer de charlar sobre la destacada presencia de México en la Expo Shanghai 2010. Una presencia que “será un despliegue de colores y experiencias”, nos dice Barrio, y que se centra en un magnífico pabellón, fruto de un concurso convocado en México al que concurrieron más de 500 firmas y ganado por un grupo de jóvenes arquitectos mexicanos, que, como enfatiza Barrio, se distingue claramente de los demás ya que “a diferencia del resto de pabellones, va a ser subterráneo, y, en su parte superior, cuenta, además, con un espacio verde cubierto para todo el público, lo cual es otro de sus rasgos distintivos”. Con él, se quiere trasladar a Shanghai la idea de la plaza pública tan característica de las ciudades y pueblos mexicanos: el visitante puede sentirse transportado a México y, al mismo tiempo, sentir, gracias a los papalotes, cómo las dos culturas comparten visiones comunes a pesar de la gran distancia geográfica que las separa.

Lo que México quiere proponer con su presencia en la Expo es “una mirada al futuro, en donde las ciudades dispongan de la tecnología más moderna, pero que ésta surja de un profundo respeto a la ecología, tratando de buscar un sano equilibrio entre urbe, sociedad y medio ambiente, donde las nuevas generaciones puedan desarrollarse en un ambiente más saludable”, nos dice Barrio. “Esta Expo representa una ocasión histórica para dar a conocer a los amigos chinos de todas las provincias y, en general, a los más de 70 millones de visitantes que se esperan, las capacidades de México destinadas a encontrar soluciones a estos problemas y a la relación con el medio ambiente”, enfatiza. Algo que se ajusta perfectamente al tema de la Expo, “Mejor ciudad, mejor vida”, un tema que, además, viene como anillo al dedo para trasladar a Shanghai uno de los leitmotiv del presidente Calderón, “Vivir mejor”, que se ha convertido en el lema del pabellón de México y que, en palabras de Barrio, lo que quiere transmitir es que “México es un país de oportunidades, una puerta de entrada a América, y también un país estratégico que cuenta con 12 Tratados de Libre Comercio con acceso a 44 mercados, además de ser un país joven donde la edad media es de 27 años: todo ello está sintetizado en el lema de ‘Vivir mejor’”.

El pabellón de México promete, además, traernos muchas sorpresas, que nos anticipa, sin acabar de desvelar, Barrio: “Los visitantes van a poder experimentar diferentes visiones de distintos actores en la plaza pública mexicana a través de una experiencia en tecnología de cuatro dimensiones. Vamos a traer también piezas museográficas de gran valor histórico y arte mexicano contemporáneo muy –remarca- popular, pero no puedo adelantar más detalles de todo ello para no estropear las sorpresas que, estamos seguros, van a ser muy agradables”. Todo ello, además de contar con un centro de negocios abierto durante los seis meses que dura la Expo y que se espera sea un espacio de interacción y de diálogo comercial entre México y China y entre México y otros países.

Pero la oferta de México no se acaba aquí, ya que, coincidiendo con la Expo, tendrá lugar el 16 de septiembre la celebración del bicentenario de la independencia mexicana y el centenario de la revolución, por lo que para ese día, designado en la Expo como Día Nacional de México, se prepara un programa muy especial: aprovechando la diferencia horaria, Shanghai tendrá el privilegio de abrir las celebraciones del Día Nacional de México en todo el mundo. “En México se empezará a retransmitir un día antes lo que está sucediendo en Shanghai, y luego, el Día de la Fiesta Nacional, se retransmitirá en China lo que está sucediendo en México; o sea que tendremos enlaces en vivo desde Shanghai a México -nos revela Barrio-. La idea es compartir esta magna celebración con el pueblo chino: tendremos un programa muy importante para esta fecha, con el Ballet Folclórico de México, mariachis, un grupo tradicional de música mexicana llamado Mono Blanco, un grupo muy famoso de música electrónica norteña llamado Nortec, y también los grupos de teatro EsCaSon y Punto de Fuga, entre otros actos”, dice.

Los retos de la Expo

La Expo será no sólo un escaparate para China y para Shanghai ante los ojos del mundo en el que mostrar el dinamismo en sus zonas urbanas, sino también, piensa el cónsul, “un espacio de reflexión imprescindible para discutir el papel que desempeñan las ciudades en este nuevo milenio”.

“Según el Fondo de Población de las Naciones Unidas –prosigue Barrio-, de los 6.750 millones de habitantes del mundo en el 2008, el 50% vive en zonas urbanas, y la tendencia es que esta tasa siga creciendo. El reto fundamental de este siglo será –dice- conciliar el avance urbano con la protección del medio ambiente y la adecuada administración de los recursos naturales. En cuanto a México, que cuenta con ciudades de gran magnitud, como la Ciudad de México, una de las más grandes del mundo, Monterrey o Guadalajara, ciudades jóvenes de un país vital y en continuo crecimiento, nuestro gobierno está tratando de lograr un equilibrio entre la modernización y el medio ambiente; la administración del presidente Calderón está haciendo esfuerzos muy importantes en el fomento del uso de energías renovables y en el diseño y construcción de ciudades sustentables para evitar, en la medida de lo posible, que el progreso afecte a los vastos recursos naturales de México”, destaca.

La Expo en el marco de las relaciones bilaterales

China es actualmente el segundo socio comercial de México, con el que mantiene una relación diplomática que comenzó en 1972 y que ha seguido desarrollándose de forma satisfactoria, como lo prueba, por ejemplo, el hecho de que todos los presidentes mexicanos hayan visitado China desde ese año.

La importancia que ambos países le han otorgado al pabellón de México se sitúa en el marco de unas relaciones bilaterales en continuo crecimiento: “Está claro que esta Expo es un espacio privilegiado para reforzar los lazos de amistad, los lazos comerciales y los lazos culturales que ya tenemos con nuestros amigos chinos -confirma el diplomático-. Esta Exposición Universal fortalecerá estos lazos de amistad y de comercio en ambos sentidos”.

Sin duda, con el esfuerzo tan importante que ha realizado en su pabellón, distinguiéndose del resto y mostrando aquellos rasgos que estas dos culturas milenarias comparten, México recibirá un nuevo impulso en China. Como concluye Barrio “queremos aprovechar esa afinidad y esos lazos para estrechar la relación económica y política de nuestras naciones”. Apostamos por que así será.

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