En la colina ubicada en la zona antigua de la ciudad de Zunyi, en la provincia de Guizhou, en el suroeste del país, se encuentra una escultura de una enfermera del Ejército Rojo sosteniendo un niño. Dicen que las tropas del Guomindang la mataron, después que ella salvara la vida del pequeño. Para difundir su virtud, se construyó este monumento.

La guerra civil es una memoria cada vez más remota para los lugareños, quienes, siguen sintiendo admiración por el Ejército Rojo, pero este sentido está sellado con cierto carácter de la nueva era. Hoy día, la escultura de bronce se ve como una diosa protectora de la salud y algunos le atribuyen el poder milagroso de aliviar el dolor y la enfermedad con solo tocarla. Es por ello que en las partes más accesibles para los visitantes, como los pies y los codos, el bronce brilla como si fuera nuevo, por el roce de las manos.

Entre los años 20 y 40 del siglo pasado, el Partido Comunista de China y su ejército dejaron las huellas de la revolución en algunos lugares, los que fueron llamados antiguas bases revolucionarias. Al igual que en el resto del país, en estos enclaves se aplicó la reforma y apertura de los años 80 y 90. Pero Zunyi, antigua base revolucionaria ubicada en parajes montañosos aislados, no obtuvo un desarrollo económico tan alto como se esperaba, debido, sobre todo, a las limitaciones que representaban algunas condiciones desventajosas. “El monto global de la economía no se compara con el de las regiones costeras ni con algunas zonas en la provincia”, destacó Mu Degui, teniente alcalde de la ciudad, en entrevista concedida a China hoy. No obstante, reveló su esperanza de ver el éxito de la localidad en la oleada de reforma urbana de los próximos años.

Zunyi se ubica en el norte de Guizhou. De acuerdo con la planificación del municipio, la ciudad se esforzará para convertirse en el 2020 en centro de la economía, el comercio, la cultura y el turismo en el norte de la provincia. “En el sur está Guiyang, capital provincial, y en el norte Chongqing, una fuerte ciudad económica. Nuestra localización geográfica, entre ambas urbes, ha sido durante años una presión para nosotros, pero también puede resultar una nueva oportunidad para el desarrollo económico”, comentó Mu.

Turismo rural, un punto brillante

“Los chongqineses son cada vez más ricos y desde hace dos o tres años han empezado a venir de vacaciones hasta aquí, para disfrutar del buen paisaje, las bondades del clima y el aire puro, alejándose de la aglomeración de la ciudad y el insoportable calor del verano”, señaló Peng Deliang, responsable del Departamento de Propaganda del Distrito de Meitan, en Zunyi.

En China escapar de la ciudad y pasar el fin de semana en los suburbios se ha convertido en un nuevo modo de vida para las personas que se han enriquecido en los últimos años. Esa tendencia ha impulsado al gobierno de Zunyi a respaldar el desarrollo del turismo rural y la construcción de varios alojamientos en las aldeas.

Meitan es uno de los pocos distritos que poseen la mayor extensión de terrenos planos y montuosos. Su clima suave, apropiada humedad, suficiente nivel de precipitaciones y muchos ríos entrecruzados son las principales razones por las que se le denomina “Aldea acuática” de Guizhou.

“Hace tres años más de la mitad de los aldeanos salieron a trabajar en las ciudades, pero la mayoría de ellos han regresado a casa”, manifestó Yang Chengshu, aldeana de 39 años, quien empezó a dedicarse al turismo rural hace cuatro meses. Su casa tiene dos pisos, techo de tejas grises y un muro blanco y está rodeada por montañas y arroyos. “Tenemos nueve habitaciones para albergar a casi cien turistas al mismo tiempo”, precisó Yang. Una morada tan grande como la suya no es común en la aldea, de ahí que a su familia se le tenga como rica entre sus coterráneos. “Yo ganaba anualmente de 20.000 a 30.000 yuanes al cultivar la tierra. Desde hace dos años empecé a trabajar en la decoración de interiores en la ciudad y llegué a tener un ingreso anual de 100.000 yuanes. Pero ahora ya no se gana tanto con el mismo empleo”, dijo Deng Kuanhong, esposo de Yang, sin dejar de reparar su minibús. Desde mayo ha empezado la temporada alta del turismo y cada fin de semana reciben nuevos clientes, que en dos meses dejan a su negocio una ganancia mensual de 40.000 yuanes. A veces, Deng conduce dos horas para recibir a los huéspedes en Chongqing y trasladarlos a su alojamiento.

Hacer turismo rural se ha convertido en una nueva oportunidad de negocios para los aldeanos de la región. En las aldeas de Zunyi se pueden ver típicas casas, como la de Yang, entre la profundidad de las montañas. En respaldo a este floreciente sector, el gobierno local ha establecido oficinas representativas en Chongqing y algunas ciudades de la provincia, que se encargan de promover los encantos turísticos de Meitan y atraer a los clientes.

“Además del aire limpio y un paisaje pintoresco, en este entorno se puede disfrutar de comidas libres de contaminación, a base de productos agrícolas cultivados sin el empleo de fertilizantes ni pesticidas. El arrozal, por ejemplo, sirve también como criadero de peces. Es un proyecto de cooperación con la Universidad de Zhejiang”, dijo Peng Deliang.

Este programa, denominado “Sistema de coexistencia en el arrozal”, fue aplicado en 2008. “El pez que se cría en el arrozal es de la especie de la carpa Qingtian de Zhejiang, que sólo puede vivir en agua de manantial natural. Así, si se utiliza pesticida en el arrozal, el pez se extinguirá. Los insectos y gusanos son su alimento natural y su estiércol sirve para fertilizar el arrozal. En la época de cosecha se recoge tanto el pez como el cereal. “En 2008 mi familia obtuvo ingresos ascendentes a los 60.000 yuanes, duplicando los del año anterior”, expresó con satisfacción Tang Shubin, agricultor de la aldea de Lianglupin.

Es sorprendente también la alta calidad del té que se produce en esta región. “El 85 por ciento del té de Longjing se cultiva en estos campos y desde hace años los comerciantes de la lejana provincia de Zhejiang vienen hasta aquí a comprarlo”, añadió Peng. En la actualidad los campos de té del distrito ocupan 220.000 mu (15 mu = 1 ha) y la producción supera las 8.000 toneladas. Como base productora del Ministerio de la Agricultura y único distrito que ha obtenido el título de “Pueblo del Té Renombrado de China” en el suroeste del país, Meitan intenta crear su propia marca, el té “Meitan Cuiya”, que logra ya cierta fama en la región.

Enriquecimiento por la producción de bambú

La ciudad de Chishui se ubica entre las montañas del extremo noroeste de Zunyi, en los límites de la provincia de Sichuan. De los 630 km2 de superficie de la localidad sólo 8 km2 de las áreas urbanas corresponden a terrenos planos. En el pasado no había allí ninguna empresa digna ni nadie que quisiera invertir. Así, los índices de desarrollo económico del lugar no son comparables con los de otras ciudades y distritos vecinos.

Sólo en 1998, cuando el Gobierno Central empezó a poner en marcha el proyecto para la protección de las selvas naturales con el propósito de preservar los recursos acuáticos del río Yangtsé, apareció una nueva esperanza. El porvenir de Chishui estaba en el bambú, considerado el mejor reemplazo de la madera.

El bambú crece muy rápido, en un período de tres a cuatro años y se suele cortar cuando está maduro, para facilitar el crecimiento de los hijos a su alrededor. De esta manera, la producción de bambú se vislumbra como una buena perspectiva de negocios.

El clima local es favorable para el crecimiento de esta planta. La variedad que se cultiva aquí pertenece a la especie de la altiplanicie, caracterizada por su tronco grueso, alta densidad y durabilidad y elevado nivel de brillo después de ser pulida. A partir del año 2000, los aldeanos comenzaron a expandir el cultivo del bambú. “En aquel entonces la plantación de bambú abarcaba apenas los 570.000 mu, pero ahora, alcanza los 1,2 millones de mu, cifra que representa el segundo puesto entre las 30 mayores plantaciones de bambú en el país, después de la de la provincia de Fujian”, señaló Zeng Qiang, subdirector del Departamento de Propaganda de Chishui.

Alentados por la política preferencial, los aldeanos tienen mucho entusiasmo en el trabajo. Muchos se han enriquecido y, por lo general, la mitad de sus ingresos proviene justamente del cultivo y procesamiento del bambú, así como la artesanía a base de la planta.

Chen Wenlan, de 40 años de edad, es una genial artesana de bambú. A partir de las habilidades heredadas de sus antepasados, ha logrado un nuevo entendimiento en la creación artística. Ella puede esculpir figuras de personajes, animales y plantas en la corteza de la caña sin dañar el cuerpo de la misma. Su casa es al mismo tiempo taller y tienda de los objetos artesanales que confecciona. En el taller, no muy espacioso, trabajan cinco o seis obreros jóvenes y la ganancia es fabulosa. Dicen que a veces el ingreso anual de su familia llega a los 800.000, e incluso, al millón de yuanes. Chen imparte también cursos gratuitos de capacitación para enseñar la técnica a los aldeanos. En la sala de clases, una chica de 18 años tejía con esmero la figura del presidente Mao, que una vez lista será montada en un cuadro. “La técnica no es difícil y se domina con un mes o dos meses de aprendizaje. La paciencia es lo más importante en este trabajo”, explicó la chica, sin dejar de tejer y añadió que la imagen del dirigente tiene una buena acogida en el mercado.

Ahora empresas de mayor envergadura están entrando en Chishui. Al notar el desarrollo del sector del bambú, el Grupo Chitianhua invirtió en un proyecto de fabricación de papel a partir de la planta, con una capacidad anual de 200.000 toneladas.

Sin embargo, el suministro de bambú fresco no satisface el funcionamiento de las plantas. “Para producir 200.000 toneladas de pasta de papel necesitamos un millón de toneladas de materia prima, pero ahora los cultivadores no nos pueden proporcionar ni siquiera la cantidad suficiente para llegar a las 100.000 toneladas, debido a que una tercera parte del bosque de 1,2 millones de mu fue plantada recientemente, por lo que tendremos que esperar unos años aún”, declaró un trabajador de la empresa.

Otro problema es el transporte del material. “Traer el bambú desde las montañas a las fábricas cuesta mucho trabajo, especialmente por la escasez de mano de obra y medios de transporte. Sin embargo, en los próximos tres años se construirán dos autopistas, una hacia Chongqing y otra hacia Guiyang. Por eso confiamos en el futuro”, expresó Zeng Qiang.

Licor Maotai y una ciudad

La ciudad de Renhuai también espera con ansia la construcción de las autopistas. Ubicada en el noroeste de Zunyi, de la que la separan 111 km, es una localidad menos famosa que el licor Maotai, un producto local que ocupa un tercio del mercado nacional de las bebidas alcohólicas. Sin embargo, su producción no lograba satisfacer la creciente necesidad del mercado por el leve incremento que registraba su producción anual.

Empresarios de la industria que se encarga de elaborar el Maotai intentaron elevar la producción y buscar nuevo sitios para colocar los talleres, pero fracasaron, porque al licor producido fuera de las antiguas bodegas le faltaba su fragancia específica.

“En cualquier sitio fuera del poblado de Maotai no se puede hacer la bebida original”, puntualizó Yuan Renguo, presidente y gerente general del Grupo Maotai. Las materias primas principales de este producto son el sorgo rojo y el trigo, que se producen en los valles contiguos al río Chishui, en cuyos alrededores se levantan las montañas, lo que impide que el viento sople con fuerza durante todo el año.

El plan de traslado del taller fue abandonado. Hay que buscar remedio en la misma localidad. “El gobierno provincial planea invertir 20.000 millones de yuanes en los próximos cinco a diez años para duplicar la producción y después, alcanzar la meta de 40.000 toneladas anuales de la bebida,” anunció Yang Fangming, subdirector del Departamento de Propaganda del municipio de Renhuai. Según el proyecto, que se debe ejecutar en cinco años, más de 10.000 pobladores que residen en las proximidades de la planta serán reubicados en otro sitio, para mantener la conveniente densidad demográfica y asegurar que la población del poblado no sobrepase las 15.000 personas, además, se va a controlar la escala de producción de las empresas de alta polución pertenecientes a las industrias hullera y cementera.

“Aquí hay muchas destilerías de pequeña escala que producen una gran variedad de licores. Si se probasen diariamente tres marcas, se necesitarían tres años para conocerlas todas”, aseguró Yang.

Según él, el plan de traslado ha sido modificado en repetidas ocasiones, para resolver una serie de problemas relacionados con el medio ambiente y el desarrollo sostenible del lugar, tales como la contaminación de los campos, la pérdida de la vegetación y la erosión de la tierra y el agua, provocadas por la producción industrial en los cursos medio y superior del río Chishui.

En realidad, ya en 1972, el entonces primer ministro chino, Zhou Enlai, enfatizó que no se permitiría dañar la fuente de agua de las destilerías ni menos aún establecer fábricas químicas dentro de una periferia de 100 kilómetros río arriba de los talleres. De esta forma se ha conseguido preservar el ambiente ecológico del Chishui. “El agua del río es roja, pero muy limpia y dulce a la vez” subrayó Yuan.

Meitan es una famosa base productora de té verde. Li Xueshi

Hotel familiar en el poblado.

Li Xueshi

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