En Datong se
abre un nuevo cielo
CUANDO se menciona la ciudad de Datong, capital
de la provincia de Shanxi, lo primero que acude a la mente es la
majestuosa cueva de y en el inmenso mar de carbón.
Fundada
hace más de 2.400 años y situada cerca del sector
de la Gran Muralla que discurre por el norte de la provincia de
Shanxi, Datong es la segunda mayor ciudad de dicha provincia. En
la demarcación de Datong se encuentran la cueva de Yungang,
la montaña de Hengshan, el templo de Xuankong, el muro de
los Nueve Dragones y otros lugares del valor histórico. Pero
esta ciudad es conocida también como la "capital de
carbón" debido a la abundancia de este combustible.
Desde la fundación de la República Popular China,
Datong ha desempeñado un papel de primer orden en el desarrollo
de la economía nacional, no en vano es uno de los mayores
centros de producción de energía de nuestro país.
Durante un largo período ha sido precisamente la explotación
de estos abundantes recursos de carbón la que ha provocado
una grave contaminación del medio ambiente. Hace unos pocos
años, al llegar a Datong uno se sentía sofocado por
el aire contaminado que día tras día envolvía
la ciudad, circunstancia que dañaba seriamente su reputación
de ciudad de enclave histórico y cultural. Por aquel entonces,
todo el mundo suspiraba por la llegada del día en que Datong
pudiese gozar de cielos despejados.
Sun Fuzhi, alcalde de Datong, ha manifestado que uno de los objetivos
más importantes para el siglo XXI es el logro de un desarrollo
sostenible, es decir, la obtención de los máximos
beneficios económicos con los mínimos perjuicios para
el medio ambiente. Al tiempo que clausuraba su etapa de "centro
de los recursos energéticos del carbón", la ciudad
de Datong afianzaba su posición de "centro de producción
de energías limpias". De este modo, mientras explota
sus recursos culturales y naturales, procura dejar "riquezas
verdes" a las generaciones venideras.
Uno de los puntos clave de esta reconversión está
siendo implantación generalizada de la tecnología
del carbón limpio; es decir, el desarrollo de una industria
basada en un tipo de carbón limpio. En consecuencia, el aprovechamiento
de la turba se ha convertido en una nueva industria caracterizada
por el respeto al medio ambiente y el ahorro de recursos energéticos.
¿Pero qué es la turba? Se trata de un carbón
mineral formado por la descomposición de restos vegetales
en lugares pantanosos. China comenzó a explotarla en los
años 70 del siglo XX. Fluida y estable como el petróleo,
ofrece ventajas con respecto a éste por lo que hace a la
combustibilidad, el drenaje de materias contaminadas, los costes,
el transporte y el almacenamiento; al igual que el petróleo,
puede transportarse a grandes distancias a través de tuberías
especiales. La diversidad de sus aplicaciones contribuye en gran
medida a paliar la crisis mundial del abastecimiento de petróleo
y a reducir la contaminación provocada por el transporte
y la combustión del carbón.
Los beneficios económicos y las ventajas ecológicas
del uso de la turba han propiciado su explotación en todo
el mundo. La atención creciente prestada por la opinión
pública al problema de la contaminación del medio
ambiente va acompañada de una explotación y una aplicación
cada vez más intensas de esta fuente de energía. También
en nuestro país la producción de turba ocupa un lugar
relativamente destacado.
En enero de 1996 el presidente Jiang Zemin afirmó: "La
tecnología de la turba tiene una importancia estratégica."
El primer paso que ha dado Datong en esa dirección ha consistido
en diversificar la producción; al mismo tiempo, ha impulsado
decididamente la exportación de este tipo de carbón
limpio, sacando así el máximo partido de sus muchas
ventajas, entre las que se cuentan la elevada calidad, la abundantes
reservas, los menores costes y la excelente situación geográfica
de la ciudad. Pero lo más importante es que, en comparación
con el petróleo, la turba es un producto no contaminante
de alto rendimiento, cualidad que ha redundado en una mejora de
las condiciones medioambientales no sólo de Datong, sino
también de sus alrededores.
En 1998 el Comité Municipal y el Municipio de Datong comenzaron
ha organizar a sus recursos humanos para realizar estudios de mercado,
introducir tecnologías, acumular capital, elaborar programas
y llevar a cabo otros trabajos. En mayo del 2000 se fundó
el holding Turba Huihai de Datong, que con una inversión
de 130 millones de yuanes ha construido una fábrica de turba
con una capacidad de producción de un millón de toneladas
anuales, cifra que la convierte en la mayor la de China. Dicha capacidad
permite duplicar la capacidad productiva de China en este campo
y se procurará alcanzar un producción anual de 10
millones de toneladas. Datong se ha convertido en el mayor productor
de turba de China, abriendo así un nuevo camino para su propio
desarrollo.
La producción de turba puede dar un renovado ímpetu
al progreso de Datong, ciudad que durante la construcción
económica de los años pasados ha desempeñado
un gran papel como centro de producción de energía.
Datong, antaño cubierta por el negro manto del polvo del
carbón, es hoy en día un ciudad verde En la actualidad,
esta ciudad ha cambiado desde una ciudad de carbón negro
en una ciudad verde sobre la que se abre un nuevo y límpido
cielo.
Por SUN CUIPING y YU JIE
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