China prepara su
incorporación a la OMC
HACE
poco, en un episodio de la teleserie titulada La hermana desocupada
Ma se oía decir a uno de sus protagonistas: "Ahora
no es un buen momento para comprar electrodomésticos; después
de la incorporación a la OMC los precios bajarán;
quienes los compren ahora, seguramente saldrán perdiendo".
Estas palabras reflejan una actitud ante el ingreso de China en
la OMC que estuvo muy extendida entre el pueblo en una primera etapa
de ese largo proceso.
Pero en esta última etapa de unas negociaciones que han durado
15 años, el pueblo chino ha adoptado una actitud muy distinta
a la anterior. Durante cierto período, los especialistas
y los estudiosos se han adelantado a las repercusiones de la entrada
de China en la OMC y han prestado suma atención a los aspectos
relacionados con la política, las leyes, el mercado y los
recursos humanos. Al mismo tiempo, han presentado la propuesta de
realizar lo mejor posible los preparativos en dichos ámbitos
a fin de poder satisfacer las exigencias futuras. Por lo tanto,
cabe decir que el pueblo chino en general y los funcionarios y expertos
en particular han abandonado las actitudes ingenuas mostradas inicialmente
y han comenzado a poner en ejecución medidas prácticas
y concretas.
Al principio, al igual que el pueblo chino, algunos especialistas
sostuvieron que el ingreso de China en la OMC afectaría gravemente
al comercio exterior de nuestro país. Wu Yi, miembro del
Consejo de Estado, ha manifestado que tras su incorporación
a la OMC, China tendrá más oportunidades de ampliar
la apertura en todos los terrenos y de mejorar su política,
su legislación y las relaciones que mantiene con los países
pertenecientes a la OMC. Algunos analistas opinan que la incorporación
de China a la OMC servirá de acicate para la reforma de la
legislación china.
Yu
An, miembro de la Academia China de Leyes y responsable de los trabajos
preparatorios del ingreso en la OMC, ha afirmado que la entrada
de nuestro país en dicha organización tendrá
una influencia profunda, general y poderosa. Esa gran fuerza impulsará
al Gobierno chino en la profundización del sistema legislativo
y en el mejoramiento de los sistemas de inspección comercial
y de vigilancia.
En la actualidad, las tareas más importantes son la transformación
de las funciones gubernamentales y la normalización de las
correspondientes actividades del Gobierno, ya que dichas tareas
vienen exigidas por los acuerdos vinculantes de la OMC. Todos los
órganos administrativos de los diversos niveles, así
como los departamentos relacionados con el Gobierno, tienen responsabilidades
legislativas en el cumplimiento de los acuerdos de la OMC. Los órganos
gubernamentales obligados a cumplir las estipulaciones de dichos
acuerdos no se limitan a los vinculados con el comercio exterior,
sino que abarcan otros muchos ámbitos, como las aduanas,
la inspección de mercancías, los exámenes sanitarios,
la supervisión técnica, las rentas, el control de
las divisas, el Banco Popular de China, el Ministerio de Educación,
el Ministerio de Transporte y Comunicaciones y el Departamento Administrativo
de Industria y Comercio. Además, la legislación y
la justicia china también deberán atenerse a los acuerdos
de la OMC. Los poderes legislativo y ejecutivo de China deberán
proceder en conformidad con los mencionados acuerdos.
Tras la incorporación a la OMC, los acuerdos de esta organización
supervisarán el cumplimiento obligatorio de sus estipulaciones
por parte no sólo del Gobierno Central, sino también
de los gobiernos locales y de las oficinas del nivel inferior al
de barrio. Es muy importante y necesario fomentar la responsabilidad
de los funcionarios de nivel distrital en el desempeño de
su cometido, a fin de garantizar el respeto a los principios contenidos
en los acuerdos de la OMC y de acabar con los privilegios.
Resuelta a cumplir sus promesas, China ha comenzado una revisión
radical de sus leyes y estipulaciones. Hasta el momento, ya son
tres las leyes fundamentales relativas a las empresas de inversión
foránea que han sido completamente modificadas. No obstante,
dichas leyes representan solamente una pequeña parte de la
legislación en materia de comercio exterior. Zhang Yuqing,
jefe del Departamento de Justicia del Ministerio de Comercio Exterior,
ha dicho: "La principal tarea exigida por la incorporación
de China a la OMC consiste en establecer un sistema legislativo
unitario, justo y abierto a las relaciones económicas y comerciales
con el exterior".
Zhao
Weitian, investigador del Centro de Estudios Legislativos subordinado
a la Academia China de Ciencias Sociales, ha manifestado: "El
establecimiento y la modificación de las leyes no es más
que un primer paso; hemos de comprender que esa tarea, al igual
que el ingreso de China en la OMC, será un proceso largo
y que hemos de esforzarnos por conseguir que los reglamentos de
esta organización arraigen en la mentalidad y las actuaciones
del Gobierno y el pueblos chinos".
Shi Guangsheng, ministro de Economía y Comercio con el Exterior,
ha prometido lo siguiente con respecto a dicho ingreso: "De
acuerdo con las necesidades de la economía de mercado socialista,
China se esforzará por mejorar las leyes y estipulaciones
relativas a la asimilación de capital foráneo y por
elaborar una legislación completa al servicio de las inversiones
de los empresarios foráneos; una vez creada esta base legal
para las inversiones foráneas, China dedicará mayores
esfuerzos al establecimiento de condiciones unitarias, estables,
claras y fácilmente previsibles, aplicables a los empresarios
extranjeros; China sigue transformando las funciones gubernamentales,
elevando la eficacia, reforzando la conciencia de servicio y ejerciendo
el poder de forma justa, para crear así un entorno administrativo
más favorable a las inversiones foráneas".
China ha prometido asimismo aceptar las verificaciones anuales de
su sistema legislativo realizadas por órganos de la OMC,
verificaciones que se prologarán durante entre ocho y diez
años. En cuanto a dichas verificaciones, el profesor Yu An
preguntó lo siguiente a un especialista norteamericano: "¿Hay
personal suficiente para ocuparse de los asuntos chinos? ¿Es
posible alcanzar resultados amplios en la verificación de
los asuntos chinos?". En realidad, para que las verificaciones
realizadas por el exterior sean válidas, será indispensable
contar con una eficaz administración dentro del país;
sólo así podrá China cumplir sus promesas y
obtener beneficios reales. Desde esta perspectiva, la formación
de personal competente se ha convertido en la tarea más importante
y urgente. Por este motivo, algunos departamentos gubernamentales
ya han comenzado a trabajar en esa dirección.
A principios del 2001, varios expertos chinos y extranjeros de alto
nivel, especializados en las leyes y negociaciones de la OMC, fueron
invitados por el Ministerio de Justicia y el Departamento Administrativo
de Expertos Extranjeros a impartir clases de capacitación
en Beijing, Shanghai y Chongqing. La mayoría de los 160 asistentes
a dichas clases eran funcionarios de alto rango y representantes
del sector jurídico. Jia Wen, director del Departamento Administrativo
de Abogados subordinado al Departamento de Justicia de la provincia
de Hainan, dijo: "Aunque estas clases corren de nuestra cuenta,
vale la pena asistir a ellas, puesto que, en general, desempeñamos
el papel de consejeros empresariales y de consejeros legislativos
del gobierno. Por consiguiente, nos vemos obligados a dominar los
conocimientos de este ámbito, lo que se traducirá
en un incremento de nuestra capacidad de trabajo".
Jiang
Jing, director de un departamento del Ministerio de Justicia, manifestó:
"Todos los departamentos de nuestro Ministerio han establecido
actividades de formación jurídica; todos los empleados,
funcionarios gubernamentales y administradores empresariales, así
como nosotros, los abogados, debemos adquirir conocimientos legislativos
tanto teóricos como prácticos. Por este motivo, muchísimas
personas, incluidos presidentes y gerentes generales de compañías,
participan ahora de forma activa y voluntaria en esas clases de
capacitación, las cuales se han puesto de moda".
La Comisión Estatal de Economía y Comercio también
ha organizado cursos de formación de alto nivel sobre la
OMC y el desarrollo empresarial. Los participantes en estos cursos,
provenientes de Shanghai, Gansu, Hunan y otros lugares del país,
se desplazaron a Japón y Singapur para efectuar inspecciones
orientadas a conocer lo mejor posible las estipulaciones de la OMC.
Después de finalizar una inspección, un gerente general
dijo: "Creo que lo más importante es que todos los trabajos
se realicen de acuerdo con las leyes del mercado y las estipulaciones
de la OMC. Cuando Japón y Singapur se incorporaron a la OMC,
su situación económica no era tan buena como la existente
hoy en día en nuestro país; no obstante, gracias a
la incipiente globalización económica, estos dos países
lograron consolidar su poderío económico y aprovechar
esa oportunidad de desarrollarse".
La municipalidad de Shanghai ha elaborado un proyecto de tres años
de duración, cuyo objetivo es "formar a personal competente
de alto nivel especializado en temas vinculados con la OMC; en concreto,
se pretende capacitar a unos 100 empleados para alrededor de 50
departamentos gubernamentales y empresas estatales de grandes dimensiones".
En el extranjero no escasea el personal competente que trabaja en
el sector de la OMC. Se trata de personas que no sólo conocen
perfectamente las mercancías y los servicios, sino que poseen
conocimientos especializados y la capacidad de tratar adecuadamente
las cuestiones relacionadas con las aduanas, los impuestos y el
comercio electrónico. Actualmente, en China sólo hay
unas diez personas que reúnan esas cualidades.
Algunas publicaciones afirman que en este ámbito nuestro
país cuenta con menos de 100 personas plenamente capacitadas;
y añaden que las circunstancias concretas obligan a formar
a unas 1.000 personas con conocimientos generales, de entre las
cuales se seleccionarán a 100 para que asistan en el extranjero
a cursos de especialización y capacitación de alto
nivel.
A fines del 2000, algunos ministerios comenzaron la capacitación
sucesiva de cuatro grupos, en la que participan los administradores
de 520 importantes empresas estatales. Se trata de la primera iniciativa
de capacitación a gran escala para directores de grandes
empresas estatales. Una noticia publicada en el extranjero anuncia
que China ha puesto en marcha los trabajos de divulgación
de las leyes para incorporarse adecuadamente a la OMC.
Por nuestra reportera YI
DA
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