SHANGHAI, 26 may (Xinhua) -- Chile pretende comprobar la importancia de fortalecer las relaciones entre los habitantes de una ciudad, en respuesta al lema ideado por los organizadores de la Exposición Universal de Shanghai, "una ciudad mejor, una vida mejor", aseguró el director general del pabellón chileno, Jorge Iglesias.
"Nuestros amigos chinos nos preguntan mucho por el gesto de 'extender la mano', que se ve con frecuencia en los videos que proyectamos en las salas (del pabellón)", dijo Iglesias, y explicó que este gesto significa "las ganas de comunicarse y la necesidad de comunicarse".
"Si ves los videos, cada una persona es un mundo. El respeto no sólo al medio ambiente sino también al otro haría la ciudad más amigable", sostuvo.
En opinión del funcionario chileno, la infraestructura ayuda, pero "creemos que son las relaciones y las personas lo más importante para construir una ciudad armoniosa".
Manuela, una niña chilena de seis años de edad que superó a varios candidatos en diferentes pruebas para seleccionar un representante infantil, desempeña un papel importante en casi todas las seis salas del pabellón de Chile.
En la primera, donde los visitantes pueden ver un panorama de la capital, Santiago, transformándose a menudo debido a la labor humana pero también a los desastres naturales, la pequeña aparece en la pantalla pensando y soñando.
"Manuela representa una niña chilena común y corriente. Los niños son el futuro de las ciudades, y lo que ven y lo que piensan ellos son verdades", señaló Iglesias.
"Al principio está preocupada por lo que ve, y también preguntándose si la ciudad son solamente los edificios que se construyen y se destruyen, o son las autopistas, o los automóviles. Se preocupa y no sabe la respuesta", explicó.
Luego de pasar a la tercera sala, Manuela se ve más optimista, y ese optimismo "nace de tomar conciencia de que una ciudad (también está hecha) de relaciones y de personas, y de que podemos tener mejores ciudades con personas más respetuosas y que se relacionen entre sí".
El funcionario informó que el pabellón chileno está registrando unas 15.000 visitas por día, y los productos típicos de la nación, como el vino y el pisco, han recibido una buena acogida entre los chinos.
Una de las muestras más visitada ha sido el "Pozo de las Antípodas", una instalación interactiva que conecta ambas ciudades en línea mediante una pantalla fija instalada en el pozo del pabellón, en Shanghai, y otras en diferentes lugares de Santiago, las cuales permiten ver lo que ocurre al otro lado del mundo en tiempo real.
Tres meses después de que un terremoto "devastador y obviamente no esperado", según Iglesias, azotara Chile, "los efectos económicos, sociales y emocionales que tuvo sobre el país aún no han podido ser medidos en su dimensión real".
A pesar de eso, el gobierno decidió "seguir adelante con el proyecto", y mantuvo casi intacto el presupuesto para su participación en la Expo.
"El terremoto también demuestra la necesidad de ayudarse entre si. Algo tan horrible como un terremoto terminó siendo un catalizador de la unión y del apoyo mutuo entre las personas", dijo el funcionario.