El
ocaso de las sombras chinescas
Por
ZHANG ZHIPING
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Zhang Guoze ( derecha ), primogénito de Zhang Zhaobin, enseñando a la menor
de sus nietas |
En Baokang, pueblo de la provincia de Hubei, todo
el mundo conoce al anciano de setenta y cinco años Zhang Zhaobin,
gran maestro del arte de las sombras chinescas. A los doce años
Zhang, virtuoso del diálogo, el canto y la música, comenzó a aprender
su oficio de los artistas del pueblo. En comparación con el teatro
de otros lugares, el suyo constituye un espectáculo único del
noroeste de Hubei.
A lo largo de décadas, los lugareños invitaron a
la compañía de sombras chinescas de Zhang Zhaobin a participar
en bodas, funerales y celebraciones religiosas. Pero debido a
su pobreza, no siempre podían proporcionarles alojamiento. Aunque
eso poco importaba, ya que las representaciones de esta compañía
solían durar toda la noche. Fue entre finales de la década de
1970 y principios de la década de 1980 cuando las sombras chinescas
de esta región vivieron su época más esplendorosa. La influencia
de la compañía de Zhang fue tal que no tardaron en formarse otras
ocho, todas las cuales actuaban en la misma región. El pueblo
de Baokang se convirtió así en el centro del teatro de sombras
chinescas.
Tras la puesta en práctica de la política de reforma
y apertura, el nivel de vida del pueblo fue elevándose paulatinamente
y cada vez fueron más los lugareños que tenían televisor. Pocos
de ellos recuerdan la felicidad que les traían las sombras chinescas.
Hoy día, la compañía del anciano Zhang es la única que queda en
Baokang. De vez en cuando aún le invitan a representar alguna
obra en compañía de sus hijos. Los artistas se reparten cien de
los 120 yuanes que les dan por representación, y el resto lo destinan
a hacer o reparar figurillas y accesorios. El destino de esta
compañía teatral es oscuro, como las sombras proyectadas por sus
pálidas luces. El anciano Zhang está cada vez más envejecido y
sus hijos se preocupan por la continuidad de esta expresión artística
popular.
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El anciano Zhang
Zhaobin contempla suspirando una figurilla de su teatro |
Los occidentales también llaman al arte de las sombras
chinescas “magia oriental”. Eclipsadas por el rápido desarrollo
del cine, la informática y los medios audiovisuales, las sombras
chinescas están perdiendo la brillantez de antaño con igual celeridad.
Como las de tantos otros lugares de China, la compañía teatral
de sombras chinescas de Zhang Zhaobin parece encaminarse hacia
su ocaso.
Nota: Las sombras chinescas se llaman teatro de sombras,
teatro de sombras de lámpara y teatro popular de sombras. Las
figuras y los accesorios se elaboran
con piel o moldes de papel. Como su nombre indica, en este
teatro las historias se relatan por medio de sombras y de las
siluetas de los personajes y otros elementos que se forman al
proyectar luz sobre ellos. Acompañados de música, los artistas
cantan y, al mismo tiempo, manejan las figuras y los accesorios.
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