Testigos
de cambios formidables
Por
nuestra reportera LI XIA
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Qiu
Jibao ( centro ): “La tarea de transformar
el Grupo Feiyue en un grupo de prestigio mundial entraña
muchas responsabilidades” |
La víspera de la inauguración del XVI Congreso Nacional
del PCCh, Henry Kissinger dijo ante la puerta del Gran Palacio
del Pueblo: “Cuando hace 30 años visité Beijing por primera
vez, no había ni mucho menos tanto tráfico como hay ahora. Lo
que hoy veo desde las escaleras de este Palacio es el resultado
de los cambios formidables que han tenido lugar en Beijing en
estos últimos 30 años”.
Es evidente que China ha experimentado cambios extraordinarios
gracias a la reforma y la apertura iniciadas en 1978. Tales
cambios tienen su reflejo no sólo en la resolución del problema
que representaba alimentar y vestir adecuadamente a una población
de 1.300 millones de habitantes, sino también en los grandes
avances del desarrollo social. Los ciudadanos que presentamos
a continuación son testigos privilegiados de las transformaciones
radicales vividas por nuestro país en todos los aspectos de
su desarrollo.
Qiu Jibao:
de campesino a empresario
En 1976, poco después de finalizar la “revolución
cultural”, Qiu Jiubao tuvo que abandonar sus estudios del ciclo
superior de la escuela secundaria debido a la falta de recursos
económicos. Para contribuir al sustento de su familia, Qiu comenzó
a trabajar llevando a personas en un triciclo. Sin embargo,
dado que en aquel entonces el sistema político que regía en
todas las zonas rurales de China era el de la comuna, a la que
pertenecían todos los medios de producción, no se permitía el
establecimiento de empresas privadas, puesto que éstas eran
consideradas la vanguardia del capitalismo.
Con el fin de ganarse la vida, Qiu, al igual que
muchos de sus paisanos, emigró al nordeste de China, es decir,
a más de mil kilómetros de su hogar, para trabajar de zapatero.
Gracias la política de la reforma y apertura, cuya
implementación se inició en 1978, al año siguiente Qiu pudo
regresar junto con sus paisanos a su tierra natal, un pueblo
de la provincia de Zhejiang. En 1980 Qiu estableció una pequeña
fábrica de repuestos que, a lo largo de una década, prosperó
extraordinariamente. Durante esos diez años, el atraso económico
de China era considerable, tanto es así que para la mayoría
de las familias chinas, las máquinas de coser, los relojes y
las bicicletas seguían siendo artículos de lujo. Tres años después
de establecer su fábrica, la industria de China comenzó a desarrollarse
rápidamente y las empresas y fábricas de medianas dimensiones,
como la de Qiu, no podían hacer frente a la dura competencia
y se declaraban en quiebra. Con el fin de salvar el puesto de
trabajo de sus obreros, Qiu pidió un préstamo para ampliar la
producción y pasó a fabricar máquinas de coser. Además puso
en práctica su idea de colaborar con una empresa nacional de
Shanghai, gracias a lo cual los productos de su pequeña fábrica
lograron buenas ventas, ya que el pueblo chino consideraba que
los productos salidos de las fábricas de dicha ciudad eran de
mejor calidad, dado que éstas contaban con una tecnología industrial
muy avanzada.
En los 13 años transcurridos desde 1989 hasta hoy,
la fábrica de Qiu, establecida con un préstamo de sólo 300 yuanes,
se ha convertido en un grupo de empresas, el Grupo Feiyao, dedicado
a la fabricación de máquinas de coser, cuyo patrimonio se cifra
en 1.300 millones de yuanes. Qiu, antaño propietario de una
pequeña fábrica, es hoy un empresario privado.
La empresa de Qiu se encuentra en Zhejiang, la provincia
china que cuenta con el mayor número de empresas no estatales.
Hace 13 años, en dicha provincia sólo había algunas industrias
manufactureras dedicadas a la fabricación de zapatos, el ahuecado
del algodón, la elaboración de doufu
(requesón de soya) y otras actividades. Ahora, en cambio, el
volumen de la economía de la provincia de Zhejing ocupa el cuarto
puesto nacional. Las exportaciones del Grupo Feiyao, que ha
establecido 18 empresas filiales en el extranjero, han alcanzado
un valor de 100 millones de yuanes. El 50 por ciento de su producción
se exporta a Japón y a diversos países de Europa y América del
Norte.
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El
lema del desarrollo del Grupo Feiyue es “innovar con el
apoyo de la ciencia y la tecnología” |
En el informe presentado ante el XVI Congreso Nacional
de PCCh, Jiang Zemin subrayó que mediante su trabajo y sus negocios,
las empresas no estatales pueden participar junto a los obreros,
los campesinos y los intelectuales en la construcción del socialismo
con características chinas. Qiu Jibao ha expresado su determinación
de esforzarse al máximo por gestionar correctamente su empresa
no estatal, a fin de demostrar que los campesinos también pueden
hacer grandes contribuciones al desarrollo del país.
Li Suli:
de cobradora a delegada
En reconocimiento de su carácter amable y servicial,
puesto de manifiesto a lo largo de más de diez años, Li Suli,
una sencilla cobradora de autobús de Beijing, ha sido nombrada
trabajadora modelo del nivel nacional y ha participado como
delegada en el XV y el XVI Congreso Nacional del PCCh. En 1981,
cinco años después de terminar la “revolución cultural”, Li
comenzó a trabajar de cobradora de autobús. En esa época, debido
a los problemas existentes en el sector de los servicios públicos,
todo el mundo se quejaba de los cobradores de autobús. Pero
Li Suli, con su vocación de servicio y su amable actitud hacia
los usuarios, ha dejado en éstos la huella de un espíritu activo
y de un sentimiento cordial. Este es uno de los muchos elogios
que los usuarios le han dedicado por su devoción al trabajo:
“Li Suli es el bastón de los abuelos, al vista de los ciegos,
la guía de los forasteros, la enfermera de los pacientes y la
amiga de los ciudadanos”. Además, Li se ha dedicado con pasión
a adquirir conocimientos útiles para el desempeño de su trabajo,
como los relacionados con los idiomas, el lenguaje de los sordomudos
y el itinerario de la línea en la que presta sus servicios,
contribuyendo con ello a lograr el objetivo de convertir Beijing
en una metrópoli internacional.
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Li
Suli vendiendo billetes de autobús. |
Desde su entrada en servicio el 10 de diciembre de
1999, la línea telefónica especial de Li Suli, que cuenta con
la ayuda de 30 compañeros, ha contestado más de 7.000 llamadas,
ayudando así a resolver numerosos problemas relacionados tanto
con el tráfico como con la vida cotidiana. Li ha dedicado su
tiempo libre a estudiar administración económica y ha aprobado
el examen de la Universidad del Transporte de Beijing. Actualmente
está cursando un máster en el Instituto de Ingeniería Electrónica
de dicha Universidad.
Yu Zhengsheng:
de técnico a funcionario
Yu Zhengsheng, delegado del XVI Congreso Nacional
del PCCh y gobernador provincial de Hubei, se graduó en 1967
en la Facultad de Controles Automáticos del Instituto de Ingeniería
Militar de Harbin. Posteriormente, fue encargado de técnicos,
ingeniero, subdirector de un departamento de investigación y
funcionario gubernamental de diversos niveles, desempeñando
diferentes cargos, entre ellos el de alcalde. En el 2001 ascendió
de ministro de construcción a secretario del Comité Provincial
de Hubei.
Al igual que la mayoría de los funcionarios de alto
rango del Partido Comunista de China, Yu ha recibido una excelente
formación. Ello se corresponde con la exigencia de que los funcionarios
del mencionado rango posean un elevado nivel profesional y cultural.
De hecho, dicha exigencia es uno de los requisitos que deben
cumplir quienes aspiren a ser nombrados funcionarios gubernamentales
de alto rango, cuyas características definitorias son la experiencia
y la preocupación por satisfacer la voluntad del pueblo.
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Yu Zhengsheng |
Antes, se consideraba que el buen funcionario era
aquél que no cometía errores; ahora, los criterios con los que
se valora a los funcionarios son radicalmente distintos. En
efecto, actualmente el buen funcionario es aquél que, además
de no cometer errores, logra éxitos reconocidos por el pueblo
en el desempeño de sus obligaciones. Yu Zhengsheng trabaja en
Hubei, la cuarta provincia más populosa de China y una de las
más industrializadas. El 70 por ciento de los empleados del
sector industrial trabajan en empresas estatales y el 70 por
ciento de la producción de dicho sector corresponde a la industria
pesada. Hubei es asimismo una importante provincia en los ámbitos
de la agricultura y la formación científica. Pese a todo ello,
sigue siendo relativamente pobre, en buena parte debido al azote
de los desastres naturales, como las catastróficas inundaciones
de 1998, que se saldaron con unas pérdidas materiales valoradas
en miles de millones de yuanes.
En resumen, Hubei posee tres puntos fuertes: la industria,
la agricultura y la formación científica; y cuatro puntos débiles:
la escasez de zonas de explotación, el elevado número de empresas
estatales (con el consiguiente problema del paro), la bajada
del precio de los cereales y el algodón (con la consiguiente
reducción de los ingresos de los campesinos) y la proporción
excesiva que ocupa la industria pesada.