OCTUBRE  2002

 

 

 

 

 

 

 

 


Yi Chun, “capital de los bosques chinos”

Por YU JIE y JIALING

La naturaleza intacta de la hermosa ciudad de Yi Chun atrae a numerosos turistas de muy diversa procedencia. Aunque no tiene las soleadas playas de la isla y provincia de Hainan, ni los prados salpicados de vacas y corderos de Mongolia Interior; ni el abigarramiento de minorías nacionales característico del sudoeste del país; ni la modernidad imperante en las bulliciosas ciudades costeras, no por ello su belleza resulta menos maravillosa y peculiar.

Yi Chun, llamada también, “capital de los bosques chinos”, está situada en el norte de China, concretamente en la cordillera Xin’an Menor, en una zona que hace medio siglo era un bosque virgen.

En esta zona se halla el bosque virgen de pinos de Corea más extenso del mundo. Los más de 120 tipos de coníferas y otras especies arbóreas existentes en esta zona subártica forman un auténtico paraíso forestal. Cada año esta extensa masa forestal absorbe 24,3 millones de toneladas de dióxido de carbono y produce a cambio 33,41 millones de toneladas de oxígeno. Es lo que podríamos llamar un “bar natural de oxígeno”.

Este inmejorable ambiente ecológico ofrece excelentes condiciones para la proliferación de la vida animal y vegetal. En efecto, los bosques de la cordillera Xin’an Menor albergan a más de 600 especies vegetales de valor económico y medicinal, como el ginseng, la schisandra, la “oreja de madera”, diversas setas, la “cabeza de mono” y avellanas, y a más de 300 especies animales, entre las que destacan los osos, los ciervos y los corzos.

Yi Chun se caracteriza por el misterio que rodea a sus paisajes forestales, un verdadero don de la naturaleza, y por su amplia oferta turística: estancias en el bosque, pistas de esquí,  rafting  y excursiones por el bosque a pie o en vehículos especiales. En otras palabras, Yi Chun es una zona forestal turística como hay pocas en China.

Mar de bosques

Situada entre los 46° 28´ y los 49° 21’ de latitud norte, Yi Chun se encuentra en una zona subártica influida por el clima monzónico continental. Su singular topografía y sus no menos peculiares condiciones climáticas hacen que las cuatro estaciones sean muy marcadas.

El alegre correr de los arroyos

Al comienzo de la primavera, la nieve empieza a derretirse. El alegre sonido de los arroyos en su correr por entre el bosque, acompañado del agradable canto de los pájaros, disipan toda preocupación y  tristeza. Los 676 ríos que fluyen por el territorio de Yi Chun son muy idóneos para la práctica del  rafting . Con sus 80 kilómetros de longitud, el río Dafeng, que atraviesa el poblado Jinshan, es considerado el mejor lugar de la cordillera Xin’an Menor para la práctica de esta especialidad deportiva. Equipados con chalecos salvavidas de vivos colores, los practicantes de este deporte se deslizan río abajo en botes de goma, llevados por corrientes ora apacibles, ora impetuosas, que les hacen experimentar distintas emociones. A ambas orillas, las montañas cubiertas de verdor ofrecen una imagen de una belleza encantadora.

El fresco verdor

En pleno verano, este mar de bosques brinda un frescor delicioso. En Yi Chun, la estación de lluvias coincide con la del crecimiento de la vegetación, lo que favorece el florecimiento de ésta. En manchú, “Yi Chun” significa “pieles del vestido”, expresión que alude vívidamente a las abundantes capas de vegetación que envuelven a la ciudad. En la reserva natural del exuberante bosque de  Fenglin, en Wu Ying, uno puede adentrarse por el mayor bosque de pinos de Corea del mundo, cuyos troncos, erguidos como columnas de piedra, ofrecen una vista impresionante. A esta especie arbórea hay que añadir otras más de 110, entre ellas alerces, píceas, abetos, abedules, tilos, olmos y álamos. Este medio privilegiado brinda a Yi Chun aire fresco durante todo el año; en verano, la temperatura media es de sólo 20,7° C. Los habitantes de las bulliciosas ciudades modernas sufren al ver como la vegetación desaparece bajo los altos edificios y las carreteras. Aquí, sin embargo, se conserva un verdor nada monótono: verde esmeralda, verde claro, verde oscuro, verde mar ...

Belleza multicolor

El otoño es la estación más atractiva para los turistas, pero también la más corta. Las hojas rojas y amarillas componen un paisaje tan bello que se diría que es obra de un pintor. Ante tal paisaje, es imposible reprimir los elogios a la pródiga hermosura de la naturaleza. Además, en esta época del año la naturaleza brinda generosamente diversos tipos de deliciosas frutas silvestres. De este modo, todos los sentidos quedan satisfechos.

Alegría y risas invernales

En pleno invierno, Yi Chun, cubierta de nieve, es aun más bonita. La espesa nieve posada sobre las ramas de los árboles crea un mundo de quietud que serena el alma. La gente quiere preservar esta calma, pero la alegría producida por la tranquilidad la rompe con risas. Entre los bosques se encuentran las pistas de esquí de Mei Huashan, Jin Shantun y Tao Huashan. Con la escopeta al hombro, uno puede seguir el rastro de los animales y adentrarse en el bosque para percibir su original encanto.

Bosque de rocas

Colinas en forma de trípode

Aparte de la impresionante vastedad de los bosques cubiertos de nieve, en la cima de la cordillera Xin’an Menor, más precisamente en la zona de Tang Wanghe, en el nordeste de Yi Chun, puede admirarse un bosque de grandes rocas graníticas, misteriosas obras de la naturaleza que se yerguen majestuosamente como columnas.

El bosque de rocas está formado por seis colinas de granito: dos ubicadas en el sur y cuatro en el norte. Cada una se asemeja asombrosamente a algo: una parece un león guardián, con la parte delantera levantada y la parte trasera en el suelo; otras dos, llamadas “los amantes”, están una frente a otra;  otras dos más, llamadas “un hilo del cielo”, están tan juntas que parecen haber sido cortadas con un cuchillo; otra muestra la silueta de Avalokitesvara, la Diosa de la Misericordia; y otra se llama Buda Maitreya. La belleza natural de este paraje maravilloso arranca a los turistas expresiones de admiración.

¿Le gustan los desafíos? Pues estas rocas de formas caprichosas le ofrecen una buena oportunidad para demostrar sus dotes de escalador. La escalada es un deporte que no sólo fortalecer la salud, sino que también templa la voluntad.

El fascinante mundo de la nieve

En el bosque de rocas hay también un gran estanque, tierras térmicas y un centro vacacional. En los alrededores de este paraje se han abierto al público un bosque de pinos de Corea, un jardín botánico, una área para observar a los animales salvajes, un corredor de plantas florales y otros lugares pintorescos. De este modo se agrupan en un conjunto armonioso las caprichosas formaciones rocosas, los maravillosos paisajes y las peculiares cumbres. En resumen, la ciudad de Yi Chun es un lugar ideal para desarrollar el turismo ecológico y forestal, pasar las vacaciones, hacer excursiones y practicar el  rafting , la escalada y el esquí.

En los últimos años, aprovechando tanto sus abundantes recursos forestales como sus excelentes condiciones ambientales, la ciudad de Yi Chun ha acelerado en todos los aspectos el desarrollo del turismo forestal y ha tomado una serie de medidas políticas tendentes a fomentarlo aun más, para de este modo incrementar los ingresos de la ciudad. Gracias a todo ello, las redes de transporte, comunicaciones, comercio y servicios han ido extendiéndose, con lo cual la fisonomía de la ciudad de Yi Chun se ha transformado completamente.

En 2001, el Buró Estatal de Turismo concedió a Yi Chun el título de “ciudad turística china excelente”.

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