La implantación del nuevo sistema de elección de cuadros

Todo el mundo está atento a la próxima remodelación del Gobierno chino. Hasta el pasado junio, un total de 34 provincias, regiones autónomas y municipios directamente subordinados al Gobierno central habían culminado la elección de los cuadros dirigentes de sus respectivos gobiernos locales. La opinión pública considera que los nuevos integrantes de los gobiernos locales son más jóvenes que los de los gobiernos anteriores. Muchos de ellos son personas de unos 45 años que, gracias a su gran energía física y espiritual, han ascendido a importantes puestos directivos. Se trata en su mayoría de personas con una sólida formación profesional: posgraduados, titulados de másters, así como profesores y tutores de doctorandos. Por otra parte, la organización de los cuadros se ha perfeccionado, puesto que ya no se exige que los aspirantes a cuadros sean originarios de la circunscripción electoral en la que presentan su candidatura y la proporción de mujeres y de miembros de las etnias nacionales ha aumentado sensiblemente.

Desde el inicio de la reforma y la apertura, pero sobre todo durante los últimos años, el Gobierno no solamente ha intensificado su campaña contra la corrupción, sino que también ha potenciado la construcción de la democracia y la transformación del sistema de elección de cuadros. Gracias a la experiencia obtenida en la práctica, se ha conseguido establecer un sistema dinámico y eficaz para la elección de los mismos. En el agro chino está desarrollándose vigorosamente la “elección directa por parte de los aldeanos”, procedimiento que estimula a la población rural a interesarse por los asuntos políticos, lo que a su vez promueve el desarrollo económico y el progreso social. En las zonas urbanas, la “elección pública de los cuadros al servicio del pueblo” se corresponde plenamente con la voluntad popular, ya que permite aprovechar al máximo el talento de los ciudadanos más capacitados. Por otra parte, el “anuncio público previo a la asunción de los cargos” supone un importantísimo paso en la profundización de la reforma del sistema de elección de los cuadros, puesto que incrementa extraordinariamente su transparencia y su carácter democrático. David Brown, presidente de la Asociación Internacional de Ciencia de la Administración, ha manifestado que China está llevando a cabo transformaciones de gran calado con un tesón encomiable y que espera que la reestructuración administrativa emprendida por nuestro país se erija en fuerza motriz de una reestructuración similar en los demás países de Asia, el Pacífico y el resto del mundo.

China, haciéndose eco de un deseo compartido tanto por sus ciudadanos como por los ciudadanos del resto del mundo, está transformándose gradualmente en una sociedad democrática mediante el perfeccionamiento constante de sus mecanismos democráticos. La modernización del sistema de elección de dirigentes es parte esencial de toda transición hacia una sociedad democrática. Los cuadros de los diferentes niveles deben ser personas con sólidos conocimientos profesionales capaces de afrontar las responsabilidades inherentes a sus cargos, y de dirigir, administrar y tomar decisiones políticas. Asimismo, deben ser capaces de hacerse cargo de la situación general, organizar y reajustar las tareas, conocer a los empleados, asignarles los puestos más adecuados y resolver los casos complejos e inesperados. Por todo ello, nuestros cuadros deben estar en todo momento al servicio del pueblo y poner siempre en primer lugar los interés de las masas populares.