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               La 
                sociedad china condena unánime y enérgicamente a 
                Falun Gong por interferir en las emisiones de Sinosat 
                  
                
              La ALSI (Asociación 
                para la Lucha contra las Sectas ilegales) ha condenado enérgicamente 
                el delito perpetrado por la secta Falun Gong al interferir en 
                las emisiones del satélite chino Sinosat. Los grupos de 
                Falun Gong que operan en el extranjero interfirieron en el funcionamiento 
                de dicho satélite para perturbar la emisión y recepción 
                de programas radiofónicos y televisivos en territorio chino, 
                con lo cual no sólo han violado las normas internacionales 
                de telecomunicaciones, sino que han puesto en peligro la seguridad 
                nacional y han perjudicado gravemente los derechos e intereses 
                del público, cometiendo, por lo tanto, un nuevo delito. 
                Con esta acción, la secta Falun Gong ha mostrado una vez 
                más su auténtica naturaleza: la de un enemigo de 
                la humanidad, la ciencia y la sociedad. La ALSI ha expresado su 
                justificada indignación en contra de dicha secta.  
                La gravedad de estos hechos demuestra que la lucha contra las 
                sectas ilegales será larga, compleja y encarnizada. Apoyamos 
                resueltamente los principios y políticas adoptados por 
                nuestro Gobierno para abordar los problemas suscitados por la 
                secta Falun Gong; y, decididos a mantener la estabilidad social 
                y la seguridad de la vida y los bienes del pueblo, lucharemos 
                sin cesar contra Falun Gong, uniéndonos para ello con las 
                máximas personalidades de los diversos sectores sociales. 
                Zhang Eryang, tutor de doctorandos de la Universidad de Ciencia 
                y Tecnología de la Defensa Nacional, ha manifestado que 
                el atentado de Falun Gong constituye una seria violación 
                de la civilización moderna, el orden social y la moralidad 
                pública, y ha añadido que todas aquellas personas 
                amantes de la vida y la civilización tienen el deber de 
                repudiar este acto ilícito. 
                Zhu Nenghong, director de la ALSI de Shanghai, ha declarado lo 
                siguiente: "Despreciando altivamente la condena de la comunidad 
                internacional, los grupos de Falun Gong que operan en el extranjero 
                se han servido de la tecnología punta para atentar contra 
                el satélite Sinosat; es decir, para perpetrar un delito 
                de suma gravedad, puesto que es la primera vez en la historia 
                que un satélite de uso civil resulta atacado. Los autores 
                del ataque, seguramente técnicos con conocimientos muy 
                especializados a las órdenes de Li Hongzhi, serán 
                condenados severamente por todo el mundo". 
                Los habitantes de Qiaoyu, distrito de la ciudad de Guigang (Región 
                Autónoma de Guangxi), han expresado sus indignación 
                diciendo que si no se erradica la secta Falun Gong, el pueblo 
                no podrá vivir ni un solo día en calma. Huang Si, 
                profesor de la escuela central del distrito, ha dicho: "La 
                secta Falun Gong es detestable. Tenemos que mostrar a nuestros 
                hijos su verdadera naturaleza para que no se conviertan en sus 
                víctimas. Una alumna de quinto curso escribió un 
                artículo para la radio de la escuela en el que decía 
                que la secta Falun Gong ha destruido a muchas familias felices 
                y perturba la paz y el orden social, por lo que tenemos el deber 
                de enfrentarnos a ella con todas nuestras fuerzas".  
                En los últimos días, desde todos los sectores sociales 
                de la provincia de Hunan se han proferido enérgicas condenas 
                contra el último delito de Falun Gong, a saber, la interferencia 
                de los programas radiofónicos y televisivos emitidos por 
                medio del satélite Sinosat. Se considera unánimemente 
                que Falun Gong intenta por todos los medios sabotear la causa 
                socialista de nuestro país y la vida norma del pueblo. 
                En consecuencia, debemos adoptar todos los medios a nuestro alcance 
                para luchar contra esta secta. 
                El 10 de julio la Universidad de Chongqing organizó una 
                serie conferencias en las que profesores y alumnos pusieron al 
                descubierto y criticaron la secta Falun Gong. Zhou Cinong, veterano 
                profesor de tecnología de las telecomunicaciones, dijo 
                que Li Hongzhi y su secuaces tratan en todo momento de sabotear 
                la construcción socialista de nuestro país y que 
                la prolongada interferencia de las señales televisivas 
                y radiofónicas del Sinosat representa una grave violación 
                de las normas básicas de las telecomunicaciones civiles 
                y los convenios internacionales. Yu Ping, doctor de la universidad 
                de Chongqing, la ciencia y la tecnología son espadas de 
                doble filo, puesto que si bien pueden ponerse al servicio del 
                pueblo, también pueden ser empleadas incorrectamente por 
                personas empecinadas en poner en riesgo la seguridad nacional 
                y en atentar contra los derechos e intereses de las masas populares. 
                Al conocer la noticia del atentado al satélite Sinosat, 
                tanto el pueblo como los cuadros de la región autónoma 
                de Tíbet condenaron inmediatamente la acción la 
                secta Falun Gong, a la que criticaron por sus reiterados intentos 
                de sabotear la estabilidad social y la paz del pueblo, intentos 
                que revelan su naturaleza antihumana, antisocial y anticientífica. 
              
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