En lo hondo de la montaña de Yunling

Por QI JUAN

La antigua comandancia de las tropas de Ye Ting, héroe de la resistencia contra la agresión japonesa

YUNLING, conocido también como "La beldad de la montaña cubierta de nubes", es un pequeño cantón (37,5 kilómetros cuadrados) del distrito de Jingxian (noroeste de la provincia de Anhui) situado entre las montañas de Sigu y Yunling.
Este cantón debe su fama al general Ye Ting, quien hace 60 años dirigió en este lugar la lucha heroica que sus tropas libraron contra los agresores japoneses. Son muchos los chinos que todos los años vienen a visitar este antiguo campo de batalla. En mayo del 2001 el Presidente Jiang Zemin visitó este pequeño cantón y trajo a

Estatua de Ye Ting

su población una nueva oportunidad de desarrollo económico.
En los primeros días del año en curso fui a visitar este pequeño cantón montañoso.

Historia de un grupo de campesinos

A medida que el sol ascendía, la aldea se iba animando.
"¡Vámonos, viejo Zhang! ¡Primero trabajaremos en tu parcela!", gritó un campesino.
Zhang salió de su casa abotonándose la chaqueta.
"¡Vámonos! ¡Por la tarde trabajaremos en la tuya!", respondió Zhang a voz en cuello.
Un grupo de campesinos fue al arrozal de Zhang.
Así solía empezar la jornada de los campesinos yunlineses.
En los primeros años de la década de los 80, en las zonas rulares chinas comenzó a aplicarse una reforma, en virtud de la cual el sistema de propiedad colectiva fue sustituido por un sistema en el que las responsabilidades se fijaban por contrato y las remuneraciones dependía del rendimiento; es decir, el trabajo agrícola colectivo fue reemplazado por trabajo individual en la parcela familiar.
Este sistema innovador ha venido estimulando considerablemente la iniciativa del campesinado.
Sin embargo, las familias que carecían de mano de obra se veían en grandes apuros cuando las faenas agrícolas llegaba a su apogeo. Para resolver este problema, las 3.000 familias del cantón de Yunling decidieron organizarse en 84 grupos de ayuda mutua. Los campesinos de un mismo grupo se ayudan unos a otros y compran colectivamente pequeñas máquinas agrícolas.
Las sembradoras y las cosechadoras han elevado enormemente la productividad. Los campesinos ya no viven sólo de lo que les da la agricultura. En efecto, la mano de obra sobrante se dedica a hacer negocios o a la cría de gusanos de seda, patos y peces. La vida de los campesinos ha mejorado y muchos de ellos se han mudado a nuevas casas.

Construcción de carreteras

Carretera recién construida

En los años 60, en el cantón Yunling no había ni un metro de carretera. Para ir a la capital del distrito se tardaba tres horas. En la temporada de lluvias, la gente no podía salir de la aldea, porque los caminos de tierra se convertían en cenagales.
Hace varios años, el gobierno cantonal decidió construir carreteras con inversiones del Estado y de los campesinos. La construcción de carreteras ha posibilitado la comercialización de la producción local en otros lugares y la consiguiente prosperidad de los lugareños. Conscientes de los beneficios que les han reportado, los campesinos aprecian sus carreteras y las cuidan con diligencia. Un anciano, por ejemplo, lleva tres años aplanando y reparando voluntariamente un tramo de estas carreteras montañosas sin recibir a cambio ni un centavo. Cuando le pregunté por qué lo hacía, me respondió: "Para facilitar la comunicación a mis paisanos".
Este año el gobierno cantonal ha decidido ensanchar y asfaltar las carreteras con el fin de crear condiciones favorables para el desarrollo económico de Yunling.

Empresas cantonales

El cantón de Yunling

El desarrollo de las empresas catonales es la base de la modernización rural. Yunling no tenía ninguna industria, pero ahora cuenta con siete industrias cantonales y 22 empresas de inversión particular, entre las que se encuentran un taller de artesanía, una papelera, una fábrica de maquinaria y una mina de oro. Estas industrias y empresas utilizan mayoritariamente materias primas locales, circunstancia que ha impulsado la producción agrícola.
El jefe del taller Artesanía Yuting me contó que era un campesino común que sólo sabía trabajar el campo y que su existencia había sido un tanto difícil. Pero al ver que la situación económica y las condiciones de vida de los campesinos de otras aldeas mejoraban a raíz del establecimiento de industrias, decidió montar un taller de artesanía. Al principio, trabajaban en él solamente diez empleados; ahora, la plantilla de sus seis filiales suma 400 trabajadores. En 1997 los productos del taller Artesanía Yuting comenzaron a exportarse a los Estados Unidos.

El sueño de los niños

En casa del viejo Zhang conocí a su hijo, estudiante de secundaria. El muchacho me dijo que quería ingresar en la universidad y salir de Yuting para ver un poco de mundo. Este es el sueño que acarician muchos niños de las aldeas de las montañas.
El muchacho me llevó al centro donde estudia: la Escuela Secundaria Yunling. En 1972, año en que se construyó dicha escuela, sólo se impartió un curso que siguieron 50 estudiantes; ahora, en cambio, la escuela ofrece 11 cursos impartidos por 37 profesores a los que asisten más de 600 alumnos. En los exámenes de ámbito distrital celebrados el año pasado, los alumnos de la Escuela Secundaria Yunling fueron los que consiguieron las mejores notas; muchos de ellos han ingresado en centros de enseñanza superior.
Las aulas de la escuela son muy modestas: las mesas y las sillas cojean, y las ventanas están cubiertas con plástico; los profesores y los alumnos tienen que frotarse las manos para hacerse pasar el frío. En el recreo, los muchachos señalaron el nuevo edificio que se levanta al lado del campo de deportes y me dijeron: "Este será nuestro aulario. Después de las vacaciones de invierno estudiaremos en las nuevas aulas".

Aula de la Escuela Secundaria Yunling

Este nuevo edificio de la escuela ha sido construido por el gobierno cantonal. De acuerdo con el principio de que "La enseñanza es el requisito previo para la realización de proyectos importantes de largo alcance", Yunling ha allegado fondos por todos los medios y los ha invertido en la construcción de infraestructuras, con el fin de mejorar las condiciones de la educación. A parte de la escuela mencionada, Yunling cuenta con tres escuelas primarias y tres centros de enseñanza para los adultos.
Decididos a salir de la pobreza y el atraso en que se encuentran las aldeas de las montañas, los campesinos yunlineses, dirigididos por el gobierno cantonal, han llevado a cabo numerosos esfuerzos
Al ver la montaña cubierta de nubes y el espeso bosque, sentí brotar en mí el deseo de que los habitantes de Yunlin no tarden en prosperar y salir de la pobreza.