La fragancia del té de Taohuatan

Por LI MENG

Lago del cantón de Taohuatan

EL distrito de Jingxian, situado en el sur de la provincia de Anhui, junto a la zona paisajística de Huangshan, ocupa una extensión de más de 2.000 kilómetros cuadrados. Unos 40 kilómetros al sur de dicho distrito se encuentra el cantón de Taohuatan, en el que todavía se conservan en buen estado cerca de cien construcciones antiguas con esculturas de piedra y tallas de madera, entre las que destacan la sede del club más antiguo de China y el templo de los antepasados más famoso del país. Mención aparte merecen las personas que viven dedicadas al cultivo, la recolección y la elaboración del té de Yongxi (cantón del distrito de Jingxian).

La historia del té de Yongxi

Según los anales del distrito, los orígenes de la famosa marca Yongxi se remontan a hace más de 500 años, concretamente al período de Shunzhi (1644-1662), época en la que los campesinos del lugar inventaron un procedimiento para cocer las hojas de té.
En este lugar, las hojas de té se seleccionan estrictamente. La recolección se lleva a cabo únicamente entre el 5 al 20 de abril; tras una rigurosa selección, las hojas recién recogidas se ponen a secar en un lugar fresco y al cabo de 6 horas ya están listas para su cocción.
Las antiguas técnicas exclusivamente manuales empleadas en el procesamiento del té han llegado hasta nuestros días. Tras algo más de 20 horas de cocerse en la olla, las hojas frescas ya están secas y preparadas. En todo un año, de este distrito salen solamente 20 kilos de té de primera calidad.
La fabricación del té de Yongxi llegó a su apogeo en la época de Xianfeng (1851-1862), tras la cual entró en un período de decadencia, por lo que la gente olvidó su valor comercial y lo elaboró únicamente para el propio consumo. En 1955 la producción de té volvió a la normalidad. En 1982 el té de Yongxi fue incluido entre las marcas nacionales famosas y en 1988 obtuvo la medalla de bronce en la I Feria Nacional de Alimentos. Actualmente, en el mercado mundial se comercializan más de 10 tipos de este té.

Un hombre nacido para el té

Diversos productos de la marca Taohuatan

El clima templado y la tierra blanda y fértil del distrito de Jingxian ofrecen condiciones excelentes para el cultivo del té. Ding Zhihua ha vivido desde pequeño en el pueblo del té. Su hondo sentimiento por esta planta lo llevó a fundar la Corporación de Productos Alimenticios Taohuatan.
Ding todavía recuerda las difíciles condiciones de la primera etapa y los fracasos sufridos en la gestión de la empresa. Debido a la elevación del nivel de vida, los consumidores ya no estaban satisfechos con la limitada oferta de variedades de té. A causa de la competencia del mercado, una gran cantidad de té no encontraba salida y debía guardarse en los almacenes. Al mismo tiempo, el nuevo producto todavía estaba en la fase de ensayo y no podía lanzarse al mercado.
Ding, preocupado por la gestión de la empresa, hizo investigaciones de mercado para averiguar qué tipos de té atraían a los consumidores. Decidido a encontrar té de buena calidad, en marzo y abril, la estación de la cosecha, se dirigió en automóvil hasta una zona productora de té y permaneció allí durante más de un mes.
Con mucho esfuerzo y tras superar algunas dificultades, la empresa se convirtió en el mayor vendedor de té. La base de producción de té de la empresa de Ding, que está a 500 metros de altura sobre el nivel de mar y tiene una extensión de cerca de 1.000 hectáreas, se encuentra en una región con un aire muy fresco y excelentes aguas, lo que explica la elevada calidad del té que se cultiva en ella y la ausencia total de productos contaminantes.
Actualmente, los más de diez tipos de té de la empresa de Ding son todos productos nacionales excelentes. Entre ellos cabe destacar la marca Yongxi, que va a copar el mercado de Beijing, dado que su sabor agrada mucho al paladar de los norteños.

Degustando el té en casa del cultivador

Antiguas viviendas en una calle que se dirige a Tohuatan

En Jingxian hay más de 100.000 cultivadores de té, cifra que representa un tercio de la población del distrito. Antes cada familia tenía su propio método de producción, pero al carecer de capital y de técnología avanzada, su producción no llegaba al mercado.
Ahora los cultivadores no se preocupan por la venta de su producción, puesto que la empresa les compra toda aquella que alcance cierto nivel de calidad. Por otra parte, los técnicos de la empresa les enseñan técnicas para el cultivo del té y métodos para su elaboración.
Una anciana cultivadora nos dijo que su familia se había dedicado al cultivo del té generación tras generación. Antes tenía que llevar el té a la ciudad del distrito recorriendo un largo camino montañoso y venderlo de casa en casa, con lo cual no se vendía mucho por falta de información. Ding cambió totalmente esta situación y en dos años los cultivadores se enriquecieron y conocieron la felicidad de poder vender su producto.
Los amables aldeanos nos sirvieron té recién elaborado. Las hojas de té se desplegaron en la taza, el agua cristalina fue tiñéndose de un color entre verde y negro, y el aire se impregnó de la fragancia del té. Conversando con los aldeanos en su bien amueblada casa, nos dimos cuenta de que la Corporación de Productos Alimenticios Taohuatan, la empresa de Ding, juega realmente un papel muy importante en la economía local.
En ese momento brindamos por que dicha empresa prospere y la fragancia del té de Jingxian atraiga a todo el mundo.