Crisis financiera demanda
cambios estructurales
El crecimiento de China es vital para la economía mundial,
afirmó Fernando Salazar
Por LOURDES FERNÁNDEZ
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Fernando Salazar, consejero
económico y comercial de la embajada de España
en Beijing. |
Cuando la crisis mundial está haciendo mella en las economías
de las superpotencias occidentales, en China, aunque la situación
también es difícil, por la disminución del
volumen de exportaciones, el panorama se vislumbra distinto, pues
ya se observan algunos resultados positivos del paquete de estímulo
aplicado por el Gobierno.
Para muchos economistas extranjeros el tiempo de comenzar a verse
los resultados de los paquetes económicos aplicados por
Estados Unidos, Francia, Alemania y otras naciones pudiera ser
a principios del próximo año, mientras en China
la reversión podría empezar a producirse a principios
del cuarto trimestre del corriente. Y es que aunque la nación
asiática no es la salvación de la crisis mundial,
sí es un factor importante para evitar que la debacle financiera
sea aún mayor, por lo que existe una gran preocupación
e interés a nivel mundial de que su economía logre
recuperarse cuanto antes.
Esta es la opinión de economistas extranjeros, que siguen
de cerca el desarrollo del plan de rescate chino, ascendente a
cuatro billones de yuanes (585.500 millones de dólares
al cambio actual), y quienes se atreven a predecir que los frutos
positivos de esas medidas se recogerán en el segundo semestre
del presente año.
Con esa predicción coincide el consejero económico
y comercial de la embajada de España en Beijing, el economista
Fernando Salazar, quien ofreció a China hoy sus apreciaciones
respecto del plan de estímulo económico aplicado
por el Gobierno.
China hoy: ¿Qué opina usted sobre el
paquete económico aprobado por el Gobierno chino para enfrentar
la desaceleración económica mundial?
Fernando Salazar: El paquete económico es oportuno,
muestra la flexibilidad y rapidez con la que las autoridades chinas
enfrentan el problema, pues cuenta con un volumen de financiación
impresionante, casi una sexta parte del PIB del país, es
decir, se han tomado en serio esta coyuntura.
Ch: La mayor parte de ese plan está dirigido a incentivar
la demanda interna y a evitar el desempleo. ¿Cuál
es su apreciación sobre los planes de inversión
social?
FS: Un porcentaje muy importante de la actividad económica
de China depende de las exportaciones, que con la actual crisis
mundial han caído aceleradamente. No hay más que
ver las estadísticas, de ahí que el paquete de rescate
y estímulo busque sustituir la demanda de las exportaciones
por una demanda interna y ésta, a corto plazo, no puede
ser más que otra inversión.
Actualmente lo que está haciendo el Gobierno es acelerar
las inversiones ya existentes, con el objetivo de mantener el
empleo y, a su vez, toda la actividad económica, por lo
tanto es un paquete muy oportuno y bien pensado.
Ch: ¿Puede China puede jugar un rol importante en el
establecimiento de un nuevo orden económico internacional,
una vez superados los efectos de esta crisis? ¿Es este
el momento oportuno para que China acelere su reforma monetaria,
con miras a lograr una mayor convertibilidad del yuan en el manejo
del comercio internacional?
FS: Esta crisis va a fortalecer el papel de China, que
venía creciendo aceleradamente y ahora adquirirá
un rol determinante, pues se le mirará mucho más
de lo que se le miraba antes. No estoy tan seguro que de la crisis
vaya a salir un nuevo orden económico internacional, así
tan radicalmente dicho. Las transformaciones, salvo guerras o
catástrofes, son graduales, pero sí estoy convencido
de que la transformación gradual que China estaba teniendo,
la presencia gradual que estaba teniendo en el mundo, con la crisis
se va a acelerar.
Respecto al tema de la moneda, el yuan ya es una moneda importante,
de rango mundial, y desde luego, el volumen de reservas que maneja
China y el volumen comercial la convertirán en una divisa
muy importante. Ahora, que este sea el momento idóneo para
llegar a una plena convertibilidad del yuan, particularmente tengo
mis dudas. Ese tipo de operaciones es mejor hacerla en épocas
de calma, pero desde luego será el Gobierno chino quien
lo decida, cuando lo crea conveniente.
Ch: Según algunos economistas chinos, los efectos positivos
del paquete económico podrán comenzar a verse en
el segundo trimestre de 2009 ¿Coincide con esta apreciación?
FS: Depende. El tiempo es relativo, pero que va a surtir
un efecto positivo sí lo creo. Es difícil señalar
exactamente cuándo, aunque muy probablemente será
este año. De eso no tenemos duda, porque estamos viendo
como se agilizan los proyectos, los cuales, en gran parte, se
basan en inversiones que requieren un proceso de elaboración,
aprobación y contratación y no son tan rápidos
como uno quisiera. Tengo dudas con respecto al trimestre, pero
será este año que veremos los resultados positivos,
creo que para la segunda mitad.
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Salón de España
en la Feria Internacional de Turismo de Shanghai 2008, celebrada
en noviembre pasado con la presencia de 106 países
y regiones del mundo. |
Según el consejero comercial, a corto plazo este plan
económico ya ha arrojado resultados positivos, en especial
en lo que se refiere a las medidas adoptadas, como la agilización
de los créditos bancarios, y eso se ha podido ver en los
últimos meses, cuando los bancos han colocado mayor liquidez
en el mercado, provocando efectos inmediatos, por lo que muchos
analistas consideran que lo peor de la desaceleración en
China ya está pasando, y se está próximo
a tocar fondo.
Ch: Algunos especialistas sostienen que incentivando la demanda
interna no se sale de una crisis, pues China vive de las exportaciones
y en esta área su volumen comercial ha bajado notablemente.
¿Comparte este criterio?
FS: Es muy difícil transformar una economía.
Eso es un proceso largo y no se logra de la noche a la mañana,
simplemente cambiando la prioridad que en este caso tienen las
exportaciones. El consumo exige confianza, dejar una parte de
los ahorros, dejar de ahorrar, y dedicar parte de esa renta al
consumo. Eso en China es complicado. Aquí se sigue ahorrando
mucho, existe una cultura del ahorro y se sigue siendo muy austero,
lo cual no se cambia repentinamente.
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En el primer
semestre de 2009, la economía china viene dando muestras
de recuperación. |
No obstante, este plan de estímulo tiene otras áreas.
Yo soy de la opinión de que si se aceleran todas esas inversiones
previstas, pudiera ser suficiente por lo menos para que la desaceleración
económica no sea tan aguda y que no baje la previsión
de un 8 por ciento de crecimiento para este año, que el
FMI acaba de rebajar a un 6,5, una cifra elevada de todas maneras
para los países desarrollados.
El patrón de consumo, que ha ido cambiando poco a poco,
también sufrirá variaciones, aunque tardará
mucho tiempo. Ya se puede ver que se están aplicando medidas
experimentales, como pagar parte del sueldo en cupones y reducir
el IVA en la compra de electrodomésticos en las zonas rurales.
Todo esto ayuda a elevar el consumo y por ende la demanda interna,
pero el verdadero cambio en el patrón de consumo para sustituir
a las exportaciones tardará.
Si ves el paquete de inversión, gran parte está
dirigido al medio rural. Las grandes reformas que se están
planeando, sobre todo las reformas en la Ley de Seguridad Social
y de Sanidad, tendrán un impacto positivo en el campo,
que hasta ahora estaba relativamente desatendido, por lo que los
chinos aprovecharán la coyuntura de la crisis. Para un
chino, una crisis es peligro y oportunidad, y en gran parte es
un buen momento para mejorar el estándar de vida rural.
Ch: Una de las conclusiones en la última reunión
de la APN fue que la Expo Shanghai 2010 será importante
para la recuperación económica del país.
¿Cuál es su punto de vista?
FS: Las expos son eventos universales muy importantes,
un escaparate del país, que genera cierta actividad económica,
pero no son suficientes para sacar a una nación del tamaño
y volumen de China de una situación de apuro. Que ayuda,
sí, que va a generar un volumen de inversiones y obras
en Shanghai, así como empleo y actividad económica,
sí, pero porque representará sobre todo una vitrina
de China, como lo fueron los Juegos Olímpicos, una nueva
oportunidad para presentar el país dinámico y competitivo
que se está formando.
Ch: ¿Ve usted un doble discurso en el llamado de China
a no hacer uso del proteccionismo comercial, cuando paralelamente
está incentivando el consumo de sus productos y recientemente
rechazó la oferta de Coca Cola para adquirir acciones de
la empresa de jugos Huiyuan?
FS: El consumo interno y el rechazo de la propuesta de
Coca Cola son cosas distintas. China está haciendo un llamamiento
a no utilizar el proteccionismo comercial, eso es cierto. De hecho,
si como en la gran depresión de los años 30, hubiera
una ola de proteccionismo y todos los países se cerraran,
se produciría lo que los economistas llamamos espiral decreciente
del comercio exterior, que se iría contrayendo y agravaría
la recesión. China sería entonces uno de los mayores
perjudicados, porque es una de las grandes potencias comerciales
a nivel mundial y no le interesa para nada que se aplique el proteccionismo
comercial, como creo no le interesa a nadie.
Que fomente la demanda interna no es malo, es normal, lógico
y lo único que puede hacer en estos momentos. No obstante,
la demanda interna es para todos, tú incrementas el consumo
e inversión y eso puede ser satisfecho por productos nacionales
o extranjeros.
Por tanto, fomentar la demanda interna no significa ser proteccionista.
Ahora, lo importante es que debemos estar vigilantes, como lo
estamos todos en los organismos internacionales, en la OMC, donde
corresponda, para que no se adopten nuevas barreras e impedimentos.
Y aquí sí estamos un poco preocupados por la aplicación
de ciertas barreras, no solamente de China, sino de otros países,
que pudieran catalogarse como ciertos rasgos proteccionistas,
pero que en términos generales no podemos verlo como un
aumento del proteccionismo. En términos generales esta
situación no se está dando, salvo casos muy concretos.
Ch: ¿Puede China jugar un rol importante en la recuperación
de la economía mundial? ¿Cómo ve su tendencia
económica?
FS: China, desde luego, es ya un país con un acelerado
crecimiento económico a nivel mundial. Eso quedó
asentado con la revisión de las cifras macroeconómicas
del año pasado, superó a Alemania y generó
el tercer mayor PIB del mundo, es el segundo exportador y posee
las mayores reservas internacionales, además de ser el
tercer receptor mundial y el primero de los países en desarrollo.
Es uno de los países más importantes del mundo.
Evidentemente, que su economía no caiga y se mantenga creciendo
a la tasa que sea, pero a una tasa elevada, es muy importante,
porque aporta un factor de estabilidad a la economía mundial.
Ahora, que la recuperación de la economía mundial
venga de China, creo que no, todavía su peso en el comercio
internacional, en el área de las inversiones, no es tal
como para tirar de la recuperación.
Es indudable que el volumen de reservas internacionales que posee
China va a contribuir, vía adquisición de bonos,
a financiar los paquetes de rescate de otros países, a
aportar estabilidad al comercio exterior.
El propio primer ministro, Wen Jiabao, lo ha dicho, China
no es la solución a la crisis, pero es un factor de estabilidad
ante la crisis y con que se preocupe de crecer ella misma y mantener
su estabilidad, ya le hace un gran favor a la economía
mundial.
Ch: ¿Qué previsión de crecimiento del
PIB de China le parece más acertada para este año,
el 8,9 del Gobierno, o el reciente 6,5 del FMI?
FS: El Gobierno chino sostiene que un 8,5 por ciento,
otros hablan de 7,5 por ciento, y las últimas previsiones
del FMI apuntan al 6,5 por ciento, pero va a andar en ese entorno,
según como funcionen las medidas y cómo se reflejen
en la economía real. La cifra va a oscilar de 6 a 7, aunque
tampoco hay que mitificarla, pues se trata de una voluntad. Lo
importante es mantener una economía en movimiento, rodando,
creando empleo, invirtiendo en obras sociales, en modernización
de empresas, unos decimales por arriba o por abajo tampoco es
tan importante.
Ch: España es uno de los principales socios comerciales
de China. En los últimos años se han incrementado
las relaciones comerciales, la cooperación y la transferencia
de tecnologías. ¿De qué forma ambos países
pueden ayudarse a enfrentar esta coyuntura?
FS: A principios de año, tuvimos la visita del
primer ministro Wen Jiabao, en el marco de una gira europea, ocasión
en la que firmamos doce acuerdos empresariales importantes, que
contemplan inversiones en sectores como tecnología, finanzas
y telecomunicaciones, y en otros casos convenios cruzados para
operadoras en telefonía. Estos acuerdos van a generar inversiones,
empleos y transferencia de tecnología, y son una muestra
muy clara de como ambos países pueden cooperar para generar
no solamente negocios conjuntos, sino oportunidades económicas,
empleo e inversión.
Al mes siguiente tuvimos otra visita importante, cerca de 200
empresarios del ministerio chino de Comercio, y firmamos 21 acuerdos
de suministro por un importe de 350 millones de dólares,
por los cuales China comprará varios productos de su interés,
lo que generará empleo en nuestro país y en China,
pues se incorporan a los procesos productivos.
Es conocido que las exportaciones españolas a China se
basan en el suministro de materiales que la industria china necesita
para poder producir e importar. Y si una visita fue en enero y
otra en febrero, en marzo tuvimos 56 inversores chinos en España,
buscando oportunidades de cooperación, es decir inversión
china en España.
Todavía es muy pronto para hacer predicciones, pero se
han establecido los primeros contactos y de ellos estamos seguros
vendrán oportunidades. Ambos países están
trabajando conjuntamente, de una forma muy intensa, en buscar
como cooperar y ayudar a generar comercio, negocios y oportunidades.
Estamos ayudándonos en esta coyuntura económica.
Definitivamente China y España, ahora más que antes,
han fusionado intereses. La presencia de inversiones españolas
aquí se ha acentuado, siendo en la actualidad el séptimo
socio comercial del país, y se espera que en los próximos
meses, la presencia china en España sea determinante para
impulsar nuestra economía. Trabajamos y cooperamos en sectores
como finanzas, energía renovables y turismo, para estabilizar
la economía mundial y hacer frente a otros retos que afectan
al planeta, pues como coincidieron Wen Jiabao y el presidente
del Gobierno español, Jose Luis Rodríguez Zapatero,
la crisis no sólo toca la fibra económica, sino
también la fibra social y política, de ahí
que subrayasen la necesidad de luchar contra lo que denominaron
una crisis de confianza.
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