Las colinas reciben la aurora.

Zhangjiajie, maravilla del mundo

Por WU MEILING

El 15 de julio de 2007, después de un viaje a Zhangjiajie, el periodista estadounidense Simon Winchester publicó en el diario The New York Times un artículo titulado “Linda silueta de la antigua montaña de China”, en el que narra en detalles sus impresiones sobre los innumerables picos rocosos de la región. “Es un espectáculo que sorprenderá a todos. Entonces yo, probablemente como un agricultor de soja del oeste, salí a través del túnel Lincoln y llegué de repente a los rascacielos del centro de Manhattan, (…) Zhangjiajie es igual de grandioso que la Gran Muralla”.

Cascada de Baofeng.

Ubicada en el noroeste de la provincia de Hunan, Zhangjiajie cuenta con miles de colinas gigantescas y delgadas, que se alzan con gracia como lindas chicas bailando en el agua.

Incomparable fenómeno geográfico

Según los geólogos, las 3.000 colinas verdes de este territorio se formaron durante cientos de millones de años, debido a la erosión causada por el movimiento de las aguas. Hace 1.500 millones de años, los violentos movimientos terrestres que se produjeron en el área convirtieron la tierra en hoyos marinos y causaron erupciones volcánicas submarinas. La gran cantidad de cuarzo contenido en estos estallidos constituyó el material básico que formó después los bosques de colinas de piedra que se encuentran en Zhangjiajie.

Hace 380 millones de años, gran parte del noroeste de Hunan permaneció sumergido bajo el mar. De tal modo, en el lecho marino de poca profundidad de Wulingyuan y Zhangjiajie se depositó una gran cantidad de lodo y grava. Luego, con el paso del tiempo, las piedras cuarcitas se transformaron en bosques de colinas. Con las 3.000 elevaciones en forma de pilares, la región posee el relieve más típico del mundo, caracterizada por las colinas de piedra cuarcita. Algunos geólogos propusieron que este tipo de configuración debería denominarse “topografía Zhangjiajie”.

Lago Baofeng.	Cueva de Huanglong.

El relieve cárstico de Yugoslavia era famoso en el mundo, pero las cuevas erosivas y las rocas calizas de allí no son tan lindas como las de la mencionada localidad china, que fue bautizada como “Pequeño paraíso”. En cuanto al bosque de piedras de Yunnan, por la falta de las nubes y ríos a su alrededor, parece un paisaje monótono en comparación con el de Zhangjiajie, donde miles de pinos sobre los precipicios atraen a los turistas. La topografía de Danxia, en la provincia de Guangdong, caracterizada por las piedras rojas formadas por el efecto de la erosión del viento y el hundimiento de la tierra, es en general de forma plana en la cumbre y no tiene las lindas piedras cuarcitas que posee Zhangjiajie.

Será un famoso sitio turístico

Las “colinas, bosques, cuevas, fuentes, lagos y cascadas” de Zhangjiajie no fueron descubiertos sino hasta los años ochenta. Una vez revelada su belleza ante el mundo, se convirtió en apenas veinte años en el primer Parque Forestal Nacional de China, Zona Paisajística de Categoría 5A, Patrimonio Natural Mundial y Parque Geológico del Mundo.

Funicular de la montaña de Tianmen.	Montaña entre las nubes.

El famoso escritor chino, Shen Congwen, describió en estos términos el paisaje de la región: “En el oeste de Hunan todo el paisaje tiene una belleza serena con un matiz de melancolía. Es como una pintura de la dinastía Song y versos rítmicos”.

En Zhangjiajie se ve el agua pasando silenciosamente por las montañas, formando arroyos y lagos. Cabe mencionar el arroyo Jinbian, el lago Baofeng y el río Maoyan. El primero corre murmurando entre las colinas fantásticas y valles profundos. A ambos lados se ven los precipicios altos, como si se entrara en un mundo originario de la antigüedad.

Colina de Jinbian.

El lago Baofeng, con sus aguas límpidas, es de una jadeita incrustada en lo alto de la montaña, mientras el río Maoyan, que se encuentra en el curso superior del río Li, se caracteriza por sus aguas cristalinas y las montañas verdes, además de sus rocas y piedras en forma singular en ambas orillas, todo lo cual sirve para modificarlo como “galería de 50 kilómetros”. El drifting sobre este afluente es una experiencia extraordinaria.

Zhangjiajie es un museo natural, en el que pueden apreciarse maravillas por todas partes. La cueva Huanglong clasifica como la “mejor cueva de China” y “primera maravilla del mundo”.

El monte Tianmen puede ser otra singularidad de la región. Esta tierra cárstica se formó por los movimientos del Himalaya. La gruta Tianmen es un fenómeno excepcional del lugar, un accidente calcáreo natural con un inmenso hueco que se suspende en lo alto de la montaña con 131,5 m. de alto, 57 m. de diámetro y 60 m. de profundidad.

Para favorecer el desarrollo del turismo en el monte Tianmen, Zhang Tongsheng, originario de Tianjin, invirtió 300 millones de yuanes en la construcción de una carretera. En el teleférico se descubre el panorama de esta vía de 99 curvas, que parece un dragón serpenteando la montaña. Dicen que la autovía será registrada probablemente en el libro de récords Guinness, con lo que Zhangjiajie pondrá otra maravilla a disposición del mundo.