El mundo requiere el progreso continuo de China

Por WU JIANMIN

*Wu Jianmin:
Anterior director del Departamento de Información del Ministerio de Relaciones Exteriores de China, embajador en Holanda, representante permanente de la Oficina de China en la ONU en Ginebra y embajador en Francia y presidente de la Administración de Exposición Internacional.

Actual rector de la Universidad de Relaciones Exteriores de China, subdirector de la Comisión de Asuntos Exteriores y subsecretario general y vocero del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino.

La comunidad internacional ha prestado más atención al XII Congreso Nacional del Partido Comunista de China (PCCh) que a los encuentros similares de esta formación política celebrados en el pasado. Este año 1.135 periodistas provenientes de 55 países solicitaron participar en el magno evento, para cubrir sus incidencias. Antes de su inauguración fui a Europa, donde escuché hablar reiteradamente de este encuentro. Después de la clausura de la principal reunión de los comunistas chinos, me reuní con algunos amigos extranjeros en Beijing, quienes deseaban conocer con entusiasmo las informaciones que difundió la cita a la comunidad internacional y que les ayudara a explicar el Informe presentado por el Secretario General, Hu Jintao.

Considero que esta atención universal se debe al gran cambio del mundo, al gran desarrollo de China y la gran interacción existente entre ambos.

En la actualidad, el mundo está experimentando enérgicas y profundas transformaciones, se están desarrollando marcadamente la globalización y la revolución de las ciencias y las nuevas tecnologías. La dependencia entre algunos países nunca se ha estrechado tanto como en el presente, mientras que un grupo de naciones en vías de desarrollo, cuya población representa la mitad del total mundial, están despegando con rapidez, fenómeno sin precedentes en la historia. En esa ola de evolución económica, el despegue de China ha llamado poderosamente la atención de todos los pueblos. Su Producto Interno Bruto (PIB) per cápita llegó a 1.600 dólares en 2002, y superó los 2.000 en 2006. El hecho de que este indicador se duplicara en cuatro años, en un país con 1.300 millones de habitantes, ha resultado un caso nunca visto. China se ha convertido en una fuerza motriz principal del desarrollo económico, lo que ha conmovido al mundo.

Al mismo tiempo, tal cambio afecta también al país asiático. Por ejemplo, el precio del crudo se elevó de 51 dólares por barril, desde mediados de enero del año en curso, hasta 95 dólares en la actualidad, razón por la cual la tarifa correspondiente subió enseguida en China. Así la interacción extraordinaria.

Recientemente me entrevisté con un estudioso británico y al comentarle algunos detalles sobre el XII Congreso Nacional del PCCh, manifestó con emoción que “el desarrollo constante de China es una buena noticia para el mundo. Hu Jintao proclama el avance posterior de la reforma y apertura de su país y subraya que ‘no habrá salida si se paran o retroceden’. Si China se para o retrocede, será no sólo una catástrofe para la nación, sino también una mala noticia para el mundo”.

Hace unos días vi al ex asesor de Seguridad Nacional de James Carter, el doctor Zbigniew Brzezinski, quien se mostró satisfecho con la evolución de las relaciones chino-estadounidenses, aunque alertó que algunos en el mundo no desean que estos vínculos mejoren, sino que retrocedan. Al preguntarle quién podría estar interesado en ello, respondió de modo tajante que los independentistas taiwaneses. Ellos esperan ver la tensión en las relaciones bilaterales y su deterioro, para beneficiarse de esa situación. Por lo tanto, los dos países deben fortalecer en forma total las negociaciones y promover el avance continuo de sus nexos, sin dejar que la tentativa de los secesionistas prospere.

Los dos ejemplos arriba mencionados mueven a una reflexión seria. Pese a que en el mundo existen numerosas contradicciones, discrepancias y disputas, debido a los cambios internacionales los intereses comunes de los diversos países aumentan. Los intereses comunes de la humanidad y el mundo constituyen la base de promoción hacia el progreso de la sociedad humana.

En su Informe ante el XVII Congreso, Hu Jintao señaló: “Se han operado cambios históricos en las relaciones de la China actual con el mundo, de modo tal que su porvenir y destino se ven vinculados cada día más estrechamente con los de éste”. Justamente basado en el conocimiento de esos cambios profundos, el mandatario inició la edificación de un mundo de paz eterna y prosperidad común. El XVII Congreso Nacional del PCCh tocó el clarín de lucha por enarbolar la bandera de socialismo con características chinas y construir en forma integral una sociedad modestamente acomodada. China tendrá un porvenir más espléndido. Lo que es China, lo será el mundo.

Dirección: Calle Baiwanzhuang 24#, Beijing, 100037, China
Fax : 86-10-68328338
Sitio Web : http://www.chinatoday.com.cn
E-mail: chinahoyes@yahoo.com.es
---------chinahoylm@yahoo.com.mx
Todos los derechos reservados: China Hoy