Repatriados de ultramar: gloria pasada
de moda
Por SI YAN
En China, repatriados de ultramar es un término que se
emplea para clasificar a quienes regresan al país tras
terminar sus estudios en el exterior. Desde 1978, año en
que se implementó la política de la reforma y apertura
hacia el exterior, hasta finales de 2006, un total de 1.067.000
estudiantes chinos cursaron estudios en el extranjero, más
del 70% de ellos después de 2000. Entre los 275 mil que
ya regresaron a la patria, 42 mil lo hicieron en 2006, representando
un crecimiento del 21,3% en comparación con el año
anterior y una tendencia de aumento anual.
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Feria hacerse de Emprendedores
para los Repatriados de Ultramar, celebrada en la procincia
de Liaoning. |
En 1987, según un acuerdo entre los gobiernos chino y
británico, la parte china enviaría su primer grupo
de estudiantes a cursar carreras de MBA al Reino Unido, pagadas
por la parte británica. Entre los 20 estudiantes enviados
se incluyó Wang Yafei, quien más tarde se convertiría
en la primera mujer china que consiguió el título
de MBA en Inglaterra. Así, de una simple maestra de inglés,
Wang Yafei pasó a trabajar como profesora visitante de
la Universidad de Maryland, Estados Unidos, y acumuló una
rica experiencia profesional en los sectores de las acciones y
las inversiones. Además, estableció en la Universidad
de Beijing el primer centro de orientación de profesión
para los estudiantes en China. Desde noviembre de 2005, Wang Yafei
está a cargo del intercambio internacional del Instituto
de Administración Guanghua de la referida universidad.
Debido a su experiencia estudiantil transnacional, los retornados
de ultramar fueron talentos reconocidos por la sociedad y, muchas
veces, hasta objetos de envidia. Sin embargo, cuando ir a estudiar
al extranjero deviene cada día más fácil,
es mayor el número de estudiantes chinos que regresan a
la patria una vez terminados los estudios. La mayoría no
cuenta con experiencia laboral alguna en el exterior, lo que les
ha dificultado encontrar un empleo ideal en el interior del país.
En la parte continental de China, por el cambio socio-económico,
la gente asume una actitud cada día más normal respecto
a los retornados del exterior, quienes también dejan de
considerarse diferentes a los graduados nacionales. El motivo
radical del cambio consiste en que, con la apertura del mercado,
China está formando políticas y normas compatibles
con los países occidentales. Bajo la circunstancia de la
internacionalización de los talentos nacionales y la nacionalización
de los internacionales, la gloria de los retornados de ultramar
ha pasado a la historia, expresó Wang Yafei.
Aumenta competitividad para conseguir empleo
Se calcula que decenas de miles de chinos salen anualmente al
exterior para cursar estudios. Aquellos que viajaron a países
y escuelas de segundo o tercer niveles aprendieron muy poco después
de varios años de estudios. Poco a poco, las personas se
dieron cuenta de que retornado de ultramar no es sinónimo
de talento.
Como en agosto comienzan los estudios en varios países
foráneos, la Sra. Guo visitó cinco veces en una
semana al Aeropuerto La Capital de Beijing para despedir a quienes
van a estudiar al exterior, entre ellos el mayor tiene 22 años
y el menor 16.
Zhang Jin, de 16 años, viajó a Nueva Zelanda. Allá
terminará sus estudios de preparatoria, licenciatura y
master. Regresará en calidad de talento de alta categoría,
opinaron sus padres.
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Representantes de los retornados
se reúnen con motivo de la Fiesta del Medio Otoño. |
No obstante, esta brillante perspectiva requiere de un pago muy
elevado. Al llegar a Nueva Zelanda, ante todo, el adolescente
tiene que perfeccionar su dominio del idioma, asistiendo a una
escuela que cobra dos mil yuanes por semana (más de 125
dólares). En vista del nivel actual de inglés de
Zhang Jin, sus padres pagarán al menos sus clases de idioma
durante medio año. Además, se incluye un promedio
de 60 mil yuanes por año en la preparatoria, 80 mil yuanes
anualmente en la universidad carreras promedio, no como
la de medicina- y algo más alto para el master, así
como 50 mil yuanes para los gastos de vida. Si se suma el costo
de los boletos de avión, un estudiante chino en el extranjero
invierte cientos de miles de yuanes para concluir sus estudios
desde la preparatoria hasta el master. Lo bueno es que Nueva Zelanda
permite a los alumnos mayores de 16 años trabajar 20 horas
a la semana y generalmente ganan 50-60 yuanes por hora. Pese a
ello, el ingreso será insignificante en comparación
con el altísimo egreso.
El colosal costo de los estudios hace que muchos retornados sean
hipercríticos a la hora de buscar trabajo. No pocos salieron
al exterior en edades tempranas y, aunque dotados del título
académico, carecen de una real capacidad laboral y frecuentemente
se quejan de la diferencia de las condiciones laborales entre
China y los países desarrollados. Ello está muy
lejos de lo deseado y exigido por las empresas, que no tienen
ningún interés en pagar un salario para enseñar
a un empleado a trabajar.
En realidad, la falta de experiencia laboral constituye también
un obstáculo en la busca de empleo para los graduados nacionales.
En este sentido, éstos y los repatriados parten del mismo
punto. Los segundos, pese a haberse graduado de famosas universidades
extranjeras, tienen que ganar la competencia mediante sus verdaderas
experiencias y capacidades laborales.
Estudiar en el exterior, fuente de experiencias diferentes
Antes de viajar a Inglaterra, Li Qi, de 23 años, consiguió
el primer lugar en la Copa Desafío --Competición
de Creatividad del Plan Comercial en la zona de Beijing-- y fue
admitido por la Universidad de Comunicaciones como estudiante
de posgrado. Sin embargo, este futuro asegurado que al parecer
tenía Li Qi, carece de sentido de novedad y desafío.
Estudiar en el extranjero puede brindar un título académico
y, lo más importante, muchas experiencias nuevas, nuevo
modo de ser, nuevos estudios y nuevos amigos...
Con el objetivo de cosechar experiencias diferentes, Li Qi viajó
al Reino Unido.
Estudiar en el extranjero con el fin de enriquecer la vida refleja
el carácter particular de los universitarios de esta generación.
Según Li Qi, el desarrollo individual tiene que ver con
las oportunidades, capacidad y modo de ser. Las ocasiones están
algo fuera del control personal, pero la capacidad puede elevarse
en el estudio y el trabajo. Pero el último sólo
se perfecciona a través de los contactos con las personas
y las cosas novedosas.
Un joven retornado dijo que cuando estudiaba en Singapur, también
tenía un trabajo a tiempo parcial. En realidad, él
no tiene ninguna dificultad económica, por lo que el objetivo
del trabajo era más bien adquirir nuevas experiencias que
ganarse la vida.
Crear una empresa propia
Li Kai, nacido en 1981, estudió en la Universidad Central
de las Etnias, donde asumió la presidencia de la federación
estudiantil. Cuando se graduó en 2002, no le costó
trabajo conseguir un puesto como funcionario público en
el gobierno a nivel de distrito en Beijing. Poco después,
el joven fue admitido en el Instituto de Derecho de la Universidad
de Temple, Estados Unidos.
Dos años más tarde, al regresar a China, Li Kai
se encontró con grandes cambios en la situación
laboral del país. Tras experimentar muchas dificultades,
finalmente comenzó a trabajar en una asociación
subordinada a algún departamento gubernamental.
Sin embargo, la experiencia de estudiar fuera cambió la
forma de pensar del joven. Cuando estudiaba en la universidad
nacional, sólo deseaba contar con un trabajo estable en
el gobierno, pero luego de su experiencia en ultramar no podía
adaptarse a este modo de trabajo. Al ver que este puesto le restaba
ímpetu y creatividad, decidió abandonarlo y fue
a una oficina de abogados.
En los últimos seis años, la Federación
Nacional de la Juventud de China organiza la Feria Semanal Hacerse
de Emprendedores para los Repatriados de Ultramar con el fin de
brindar a éstos los servicios en plan de proyectos, contratación
de talentos, informaciones e investigación ambientales
cuando desean crear su propia empresa.
Han Xiaohong, presidente de la Cadena Ciji del Examen de Salud,
estudió en Alemania y terminó el doctorado en medicina.
Después de regresar a China, ella estableció su
cadena de examen de salud dirigido a las personas sanas, que en
cuatro años se convirtió en el mayor instituto de
administración de la salud en China. Según el estándar
internacional, la administración de la salud puede bajar
al 10% el costo de salud para el 90% de las personas y las empresas,
mientras el 10% de las personas y las empresas sin administración
de la salud pagarán 90% más del costo. En este sentido,
la cadena ayudó al país a ahorrar casi dos mil millones
de yuanes en la inversión sanitaria.
Para estimular las acciones emprendedoras de los repatriados,
el país implementará en los años venideros
una serie de proyectos para facilitar que los retornados del exterior
pueden aprovechar su patente, tecnología y fruto científico
y transferirlos en acciones de la empresa. Desde 2006 hasta 2010,
se planea establecer 150 parques incubadores de diferentes niveles
en el país, entre ellos 40-50 fundados por el Ministerio
de Personal y los gobiernos locales, en que entrarán más
de 10 mil empresas creadas por los repatriados de ultramar.
Cinco campos
con empleos muy solicitados por los retornados del exterior |
a. Telecomunicación
Debido a la especial naturaleza de este campo se generó
una alta ganancia y un aumento continuo de personal. Esta
rama tecnológica experimenta un gran desarrollo.
Desde el año pasado, la maduración de las
nuevas tecnologías como NGN, 3G y IPTV brinda un
gigantesco espacio de despliegue de su capacidad para los
retornados, que absorbieron directamente los pensamientos
tecnológicos más desarrollados y novedosos.
b. Bienes raíces
En los últimos años, la industria inmobiliaria
ha ocupado un lugar entre los 10 campos que generaron mayores
demandas de empleo en el país. Entre los talentos
necesitados se incluyen los administradores de la construcción,
gerentes de proyecto, administradores de costo de obras,
arquitectos y contadores. Con la internacionalización
de la construcción y los bienes raíces, cada
día se requiere de más empleados que dominen
por lo menos un idioma extranjero y conocimientos básicos
de las rutinas y normas internacionales, ventaja destacada
con que cuentan los retornados de ultramar.
c. Finanzas
Después que China entró en la Organización
Mundial del Comercio (OMC), a la par con la apertura de
la industria financiera, la multiplicación y especialización
de los servicios en fondos, acciones, seguros y bancos y
la entrada de los bancos extranjeros y compañías
de fondos de capital mixto, la escasez de los talentos financieros
es cada día más evidente, especialmente en
la inversión bancaria, la securitización de
activos, la aplicación y explotación de softwares,
la asesoría y valorización, el análisis
de crédito comercial y la ge-rencia de riesgos.
d. Logística
Considerada como industria del porvenir del siglo XXI,
la logística comprende los sectores económicos
como comunicación aérea, terrestre y marítima,
tráfico, almacenamiento, compra, abastecimiento,
entrega y distribución, información, venta
por cadenas, manufactura, entre muchos otros. Con el incremento
de los acontecimientos internacionales en China, este campo
requiere de muchos talentos de alta categoría.
e. IT
Pese al desarrollo del negocio electrónico durante
muchos años, el crédito financiero y el pago
por Internet se encuentran aún en la fase inicial.
En este campo, la ideología más avanzada aprendida
en el exterior forma la ventaja destacada de los retornados,
sobre todo, en puestos como ingenieros de prueba de programas
y gerentes de proyecto, que en general requieren de la capacidad
de control y la creatividad. El modelo de educación
occidental que presta atención a la combinación
de conocimientos y ejemplos prácticos favorece a
la formación de los talentos más creativos,
por lo que muchas empresas prefieren contratar a personas
de entre los repatriados de ultramar.
Además, otros campos recién generados como
la asesoría, la comunicación y el periodismo
(anuncios, medios de prensa y editoriales) y los juegos
por Internet también forman destinos importantes
para los retornados de ultramar. Las ciudades grandes y
desarrolladas como Beijing, Shanghai, Shenzhen, Guangzhou,
entre otras, constituyen las principales zonas de entrada
de estos talentos, quienes rara vez toman en consideración
la posibilidad de trabajar en las ciudades del interior
del país, lo que significa un desequilibrio notable
en la distribución de los retornados.
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