¿Quién ha tocado el depósito bancario de los chinos?

Por LU RUCAI

Los comerciantes promueven los distintos tipos de productos de administración de finanzas.

Conocido es el carácter ahorrativo de los chinos. Según estadísticas, el número de cuentas individuales de depósito de los ciudadanos sobrepasan los 300 millones. Stephen Roach, director economista de la empresa estadounidense Morgan Stanley, destaca en un reciente estudio de la economía, que la tasa de ahorro del pueblo chino se aproxima al 50 por ciento, mientras que la del depósito familiar ocupa un 30 por ciento del ingreso actual. Comparados con los habitantes de otros países, los chinos disponen de un concepto más fuerte sobre el ahorro de dinero.

Lo que llama la atención son los cálculos financieros de 2006, publicados por el Banco Popular de China (banco central) que muestran que, hasta finales de esa etapa, el volumen total de depósitos de los chinos representó 16,42 billones de yuanes (2,12 billones de dólares al cambio actual) con un aumento por año de 2,09 billones de yuanes (270.725 millones de dólares), 112.500 millones de yuanes (14.572 millones de dólares) menos que el año anterior. No es la primera vez que el banco central publica el reporte sobre el descenso de depósitos de los habitantes. “La encuesta realizada entre los ahorristas de las ciudades y poblados del país en el primer trimestre de 2007 arroja que pese a que el activo financiero más importante de los habitantes chinos es el ahorro bancario, sólo el 59,4 por ciento de los encuestados sostiene este punto de vista”.

¿Qué comprende el depósito bancario de los chinos? En el mercado de bienes inmobiliarios, que en los últimos años ha mantenido un crecimiento sostenido, y el de acciones, que cambia de "oso" (a la baja) a "buey" (al alza) a partir de 2006, podemos encontrar las respuestas. La pasión de los chinos por las inversiones apenas empieza.

Huang Xiaojun era un chico pobre al llegar a Beijing, en 2004. Alquiló una habitación en una zona antigua, cercana al CBD (distrito comercial). Aquella renta fue precisamente lo que cambió su vida, luego de conocer que el dueño del lugar donde habitaba era jubilado y vivía de la renta de apartamentos. "Él es propietario de cuatro casas que se encuentran en las zonas de la ciudad donde radican las empresas y centros de enseñanza. Si se calcula por más de 2000 yuanes (unos 259 dólares, al cambio vigente) por departamento, su ingreso mensual alcanza casi los 10.000 yuanes (1.295 dólares)", señaló.

El joven, proveniente de la provincia de Zhejiang, se percató así de una oportunidad comercial. A finales de 2004, el mercado de bienes y raíces no resultó próspero. El precio de vivienda en la zona urbana fluctuaba de 4.000 a 5.000 yuanes por metro cuadrado (de 518 a 629,5 dólares). Al mismo tiempo, a fin de atraer a los compradores, muchos explotadores de viviendas promovieron la política de primer pago cero. Gracias a la ayuda de sus padres, Huang compró dos apartamentos. "No tardé mucho tiempo en devolver el dinero a mis padres. Después, compré otro con un préstamo bancario". Actualmente él vive en uno de esos pisos y el año pasado transfirió uno de los que compró al principio, de 80 metros cuadrados. "Gracias a la ventajosa situación, éste que me había costado 300 mil yuanes (38.000 dólares aproximadamente) lo vendí por más de 800 mil yuanes” (poco más de 100.000 dólares).

Los altos precios atraen una mayor inversión hacia el sector inmobiliario.

El Grupo de Crédito de Suiza, conocido organismo financiero, publicó el resultado de una investigación en el mercado consumidor de China en 2006, después de entrevistar a 2.700 habitantes de distintos niveles de ingreso de las ciudades de Beijing, Shanghai, Guangzhou, Shenzhen, Shenyang, Wuhan, Chengdu y Xi'an. Entre los que tienen intenciones de comprar vivienda dentro de un año, el 53 por ciento expresan que buscan mejorar su ambiente de vida, un 23 por ciento son compradores por primera vez, un 13 por ciento lo hacen para invertir y un 5 por ciento compra para sus parientes. Investigación 0 (compañía encuestadora) realizó un estudio entre los compradores de departamentos de Beijing, Shanghai, Shenzhen y descubrió que en tales ciudades el porcentaje de los consumidores que compraron viviendas como una inversión después de 2004 es de un 7,7 por ciento. Esa tasa, en el caso específico de los beijineses y shanghaineses es relativamente alta, pues aumenta hasta un 12,4 y un 9,3 por ciento, respectivamente. No obstante, los expertos indican que esas cifras son conservadoras. De hecho, el porcentaje de compradores inversores dentro del anillo exterior de Shanghai se acerca al 40 por ciento, mientras en otras ciudades medianas es de alrededor de un 30 por cientro, cifra que sobrepasa en gran medida el 20 por ciento, internacionalmente definido como línea de alarma.

Chen Changhua, jefe del departamento de estudio en China del Grupo de Crédito de Suiza señaló: "Considerando el nivel de ingreso de los chinos, el valor de la vivienda debe bajar. Empero, el mercado actual está lleno de fondos y no proporciona más canales oportunos de inversiones, lo que dificulta el descenso del precio, sobre todo en la presente situación, donde aparecen mezcladas la demanda de uso propio y la de inversión”.

El mercado al alza promueve el ánimo de los accionistas.

Sin embargo, la política de regulación y control macroeconómicos y el aumento del interés bancario desempeñan un papel de freno. El director de la sucursal de Bienes Inmuebles Chain, una comercializadora de viviendas de segunda mano, ubicada en la calle Chaoyang, expresó que debido a que el ritmo de incremento del precio de alquiler de los edificios normales es mucho más bajo que el de las viviendas del mismo periodo (10%), para el inversionista representa un gran riesgo invertir en la compra de apartamentos.

La cantidad registrada de tales departamentos para vender marca una tendencia alzista, aunque en la práctica la comercialización ha experimentado una baja en comparación con el año pasado. "Según los cálculos, considerando los factores de los impuestos que tienen que pagar y la subida del interés bancario, para transferir una vivienda de segunda mano y recuperar el costo, al menos se debe pagar un 11 por ciento más del precio base del apartamento, cifra que sobrepasa el ritmo del valor de las nuevas viviendas".

No obstante, ello no ha hecho disminuir la pasión de los habitantes y actualmente se aprecia una nueva tendencia a la inversión. Una encuesta de muestreo de la Compañía Limitada de Auncios de Asia y EE.UU., de Beijing, refleja que un 46 por ciento de los habitantes de la capital china tenían la intención de comprar vivienda fuera de la ciudad en 2006, indicador que sólo marcó un 22 por ciento en 2004. Los datos de Bienes Inmuebles de la Planicie Central arrojan que, a partir de junio de 2006, más de treinta zonas residenciales como el jardín de profesores de Rizhao, Riviera, en Beidaihe, y la villa Wanghai, de Weihai, llevaron a cabo acciones promocionales y de venta en Beijing.

El día 27 de febrero de 2007 se registró el récord de gran caída del día unitario durante los diez años en el mercado de acciones. En la jornada siguiente Cao Min abrió una cuenta en la Bolsa Guotai Junan, siguiendo los consejos de sus colegas, que le dijeron que la baja del mercado de acciones es la mejor ocasión para entrar en el negocio. "Uno de mis amigos empezó a comercializar en el mercado de acciones a partir de 2006. La tasa de ganancia sobrepasó el 100 por ciento y logró más beneficios que depositando el dinero en el banco". Pese a que sus colegas le advierten de los riesgos existentes, Cao penetró sin vacilación.

Los datos de la Compañía China de Registro y Liquidación muestran que un mes después del penúltimo día de febrero pasado, 2,4 millones de inversionistas individuales entraron en el mercado de acciones. Cada fecha de transacción promedio marca 100.000 nuevas cuentas, que en su máximo incremento llegó a las 170.000. Al mismo tiempo las nuevas cuentas de fondos ascendieron en marzo a 1,5 millones.

Bolsa a plazo de Shanghai.

Cuando en el mercado de "oso", que había durado cinco años, se presentó la tendencia de ascenso, a principios de 2006, el mercado de valores atrajo la entrada de numerosos inversores. La suma de los inversionistas individuales está experimentando un auge notable y el número total de cuentas abiertas supera los 80 millones; mientras que el contingente de inversores de las instituciones también se expande cada día con mayor fuerza. La venta de fondos refleja una tendencia excelente, pocas veces vista en su historia, tanto que de los 87 fondos nuevos emitidos en 2006, el volumen de compra de cada uno de siete de ellos sobrepasó los 10.000 millones de yuanes (unos 1.295 millones de dólares).

Una investigación hecha por el banco central entre 20.000 habitantes de 50 grandes, medianas y pequeñas ciudades chinas en el primer trimestre de 2007 evidencia que un 30,3 por ciento de los encuestados considera que bajo el actual precio y nivel del interés bancario, emplear los ahorros para comprar acciones o fondos es una buena inversión. En su reporte la institución agrega que el descenso del depósito especifica claramente que la veloz subida y gran cantidad de operaciones son las principales causas de origen del fenómeno.

Pese a que los expertos recuerdan reiteradamente al pueblo que invierta con discreción y alertan sobre la conveniencia de no poner todos los ahorros en el mercado, mucha gente entra sin vacilación. Han Jingrun, de 31 años, era técnico de una compañía inglesa de software. A principios de 2007 su departamento cerró y frente a la opción de quedarse y esperar a ver si era despedido, prefirió renunciar. Al preguntársele el motivo de su decisión contestó que "tendré más tiempo para comercializar en el mercado las acciones que antes compré y dejé a un lado. Por lo tanto, no gané mucho dinero. Ahora, cada día saco tiempo suficiente para estudiarlas y he conseguido mayores beneficios". Han invirtió todos sus ahorros, 150.000 yuanes (unos 19.400 dólares), al igual que gran cantidad de jóvenes chinos. "La apertura de las transacciones en la Red facilita en gran medida el proceso de operaciones. Se reduce notablemente la gente que acude a la bolsa, que en su mayor parte son las personas de más edad". Las acciones inmovilizadas del papá de Han de hace seis y siete años ya están descongeladas, los inversionistas encuentran confianza.

Peng Bo trabaja en una compañía de análisis de bolsa. "Los chinos poseemos pocos canales de inversión, además de bienes inmuebles y mercado de efectos. Cuando el gobierno aplica estrictas medidas al mercado del primero, lógicamente los considerables fondos entran en el mercado de acciones". Empero, los inversores sueltos que penetran en el mercado no son capaces de calcular los riesgos ni tienen preparación psicológica. "Cuando ocurrió la gran caída, el 27 de febrero, de inmediato perdí más de 10.000 yuanes en mi cuenta. Al día siguiente no tuve otro remedio que efectuar una liquidación", contó Han, que llamó a sus amigos para advertirles, pero algunos no le hicieron caso y tuvieron grandes pérdidas.

Yang Shen (seudónimo) es una persona bien acogida en las "conversaciones sobre acciones" de Tianya, un conocido foro. Trabaja para un departamento relacionado con esta especialidad y su carrera es finanzas. Cada día publica sus predicciones sobre la cotización del mercado de efectos de la semana siguiente y responde las dudas de los accionistas. "La mayoría de los accionistas sueltos no tienen conocimientos básicos del mercado. Ellos operan con la idea de enriquecerse de la noche a la mañana. Son oportunistas. Por otra parte al comprar acciones no estudian bien los éxitos de las empresas y escuchan sólo las noticias callejeras. Incluso algunos que llevan tiempo en el negocio olvidan las lecciones de unos años atrás, cuando sus acciones se quedaron congeladas", comentó. Sus opiniones aparecen en el foro a fin de recordar a la gente que haga una gestión prudente.

Sin embargo muchos consideran que el alza en el mercado de acciones no cambiará durante el 2007. El índice de la bolsa de Shanghai ha subido desde 1.161 puntos, a principios del año pasado, a más de 3.000 puntos en la actualidad. El milagro de duplicar el índice de acciones hace que la gente confíe firmemente en que siempre que inivierta tendrá una recuperación. "Perder la ocasión en 2006 es perdonable, pero no podemos perder la de 2007" se ha convertido en un lema para los inversionistas.

Peng Bo cree que ante los pocos canales de inversión, una vez que el gobierno advierte a la gente sobre los riesgos que implica poner a ciegas sus ahorros en el mercado de efectos, el fondo del mercado enfrenta dos tendencias: circula de nuevo al mercado de viviendas o al banco. Como consecuencia, el precio de los bienes inmuebles, que apenas comienza a bajar, subirá. Por otro lado, con una psicología poco saludable muchos inversionistas no son capaces de enfrentar las pérdidas. De ahí que sea necesario fomentar el concepto de administrar los fondos y llevar este concepto desde un estado oportunista a uno saludable.

Los bancos y compañías aseguradoras promueven sus productos de administración financiera con un ritmo acelerado y un ciclo cada vez más corto, lo que atrae a algunos inversionistas que esperan un beneficio constante y estable. La Compañía de Investigación del Mercado Shenzhou de Shanghai, realizó una encuesta entre los shanghaineses que evidencia que el 86,4 por ciento de las personas cree que la administración financiera es una forma activa de vivir y una actitud positiva de vida.

Mientras, el 80,3 por ciento sostiene que el manejo financiero individual se caracteriza por su personalidad y diferencia y se debe tener cuidado y no seguir la corriente a ciegas. La mayoría de los encuestados operan inversiones en varios aspectos, pero los que escogen el depósito bancario alcanzan el 71,3 por ciento, pues el ahorro se caracteriza por la baja renta, riesgo casi cero y deviene la primera opción de inversión. Y un 33 por ciento opta por comprar acciones como segunda elección.

Los expertos indican que frente a un sistema de seguridad social que no es perfecto, el depósito sigue siendo la primera opción para los chinos por concepto de administración financiera. Con el paso de tiempo, esta circunstancia irá cambiando, a medida que mejore el sistema y se modifique el enfoque de la gente.