La educación musical en China

Por LU RUCAI y LUO YUANJUN

Los alumnos de la escuela forman una orquesta sinfónica de música folklórica.

“MI curriculum es muy simple: Estudié en la escuela secundaria afiliada al Conservatorio Central de China y posteriormente en este centro docente superior de música, donde obtuve mi título de doctor. Después de graduarme regresé a la escuela afiliada y trabajé como profesor en ella, de la cual soy director en la actualidad”, resumió Xing Weikai.

Los alumnos tienen un don musical

Xing Weikai, de 44 años, piensa que la educación musical en la actualidad es mejor que la de hace 34 años, cuando él estudió en la institución que hoy dirige. "Cuando estuve en la primaria, sólo los alumnos con resultados sobresalientes en el coro eran recomendados para ir a las academias especializadas de música. Yo fui uno de los pocos afortunados".

Xing comenzó a aprender música en plena “revolución cultural” (1966-76), cuando la mayoría de jóvenes eran enviados a trabajar en el campo. Las únicas excepciones eran el ejército o estudiar arte, razón por la que aceptó muy contento que su escuela lo recomendara para aprender música.

“Sin embargo, a diferencia de los alumnos de hoy en día, que esperan entrar en nuestra escuela, en aquel entonces yo no sabía nada de piano y si pude ingresar en este centro fue sólo por mi naturaleza musical. Después tuvimos la oportunidad de tocar el piano”, recordó y añadió que “en aquella época, incluso algunos alumnos de la ciudad no sabían qué era un piano, menos los que provenían de las zonas lejanas. No obstante, la mayoría de los estudiantes de la especialidad de música tenían una tradición familiar, pues sus padres o parientes sabían tocar algún instrumento”.

A su juicio, después de la reforma y apertura, la educación musical en China ha tenido un gran desarrollo. Un alto porcentaje de los alumnos han tocado algún instrumento y en muchas escuelas secundarias clave, los jóvenes tienen sus propias orquestas sinfónicas. La popularización del estudio de este arte se relaciona con el examen estándar de música, en el cual miles de alumnos participan anualmente. Ello, pese a cierto carácter de utilitarismo, ha cimentado realmente una buena base musical en los alumnos dedicados a la especialidad. “En nuestra época, eran muy pocos quienes tenían una buena formación musical, pero ahora la cantidad es considerablemente superior”.

¿Es bueno el modelo chino?

Ling Weikai, director de la Escuela Secundaria afiliada del Conservatorio Central de China.

El Conservatorio Central de China admite anualmente a más de 300 estudiantes, una tercera parte de los cuales provienen de la escuela secundaria afiliada. Pero en la década del 80 del siglo pasado, antes que algunos jóvenes decidieran estudiar en el extranjero, la cifra llegó a ser del 50 por ciento. La mayoría de los alumnos de su escuela, aseguró el director, pueden entrar directamente al conservatorio.

En el centro trabajan 120 maestros, que no son suficientes para los 730 alumnos, si se emplea el método didáctico de “un maestro con un alumno”. Debido a ello, los maestros provisionales son bien acogidos.

Según Xing, la escuela fue establecida de acuerdo con el modelo del Conservatorio de San Petersburgo, de la ex Unión Soviética, muy distinto al de los países europeos y los Estados Unidos, cuyo sistema de estudio es de carácter abierto, porque los alumnos pueden recibir otras asignaturas en las escuelas ordinarias y acudir a la de música sólo para las clases específicas de esta especialidad. En China se escogen muy temprano los alumnos que emprenderán la carrera de música, aceptando las asigaturas de la escuela, y la mayoría de ellos permanecen como internos.

Hay más de diez escuelas como ésta en el país, concentradas fundamentalmente en ciudades como Beijing, Shanghai y Shenyang.

Niuniu, de ocho años de edad, ejecuta un concierto de piano de Mozart.

"Este método educativo es conveniente para la situación de China, una nación en vías de desarrollo, cuyo nivel económico y cultural está todavía en la etapa inicial, por lo que sólo pueden prepararse los alumnos talentosos, aprovechando los limitados recursos financieros y humanos. Bajo cierta condición, el modelo vigente permite formar lo más pronto posible los talentos musicales", afirmó Xing, al comentar los éxitos y defectos del programa. “En Europa y Estados Unidos, los estudiantes escogen la música como profesión cuando llegan a la universidad; pero en los niveles educativos previos reciben la educación musical como todos los demás. En esas regiones pocos estudian profesionalmente la música, pero la mayor parte de la población tiene buenos conocimientos sobre ella. China aún tiene una distancia que recorrer en ese sentido.

"Aunque hemos considerado el modelo europeo y estadounidense, creemos que por el momento no es conveneinte introducirlo en nuestro país, pues los alumnos dedican mucho tiempo a practicar y aprender música de esta manera, si regresan a la escuela ordinaria para otras asignaturas, será demasiado difícil para ellos. Mantendremos este sistema de enseñanza hasta que se reforme el método de admisión universitaria nacional”.

Música no sólo para ganarse la vida

“Todos tienen la misma cantidad de tiempo. Si dedican muchas horas a su especialidad, otras asignaturas serán descuidadas. Algunos alumnos y sus padres piensan que la carrera de música exige dedicación completa, sin ocuparse de otras asignaturas, porque para entrar en la universidad sólo se mide su nivel de música”, señaló Xing, que pese al énfasis que hizo ante los estudiantes y sus padres acerca de la importancia de las demás asignaturas, de vez en cuando éstas eran rechazadas.

Momento de una clase.

A partir de 2004 se exige el examen nacional para todos los alumnos que aspiren a ingresar en la universidad, incluidas las especialidades de bellas artes y música. “Es bueno, porque así ellos regresan a la clase de las culturas. Algunos no tienen suficientes conocimientos culturales y no pueden obtener el título al estudiar en el extranjero, independientemente de sus excelentes habilidades para tocar un instrumento. Después sus padres reconocen la necesidad de esta materia”, amplió.

Al referirse al utilitarismo de los estudios de música, Xing mostró cierta preocupación. “Se puede decir que es algo ideal, si los padres desean que sus hijos realicen un sueño, pero también los hay que desean que sus hijos tengan un nivel social más alto a través del estudio de la música. Y ciertos jóvenes estudian sólo por orden de sus padres. Es una lástima.

“Los alumnos deben estudiar música por interés propio, porque ésta enriquece el contenido de la vida. Sin embargo, muchos de ellos aprenden música como cualquier otra técnica y sólo comienzan a tener interés después de cierto tiempo. Esto es lo que queremos ver”, subrayó.

Como sus colegas, Xing ha notado el gran potencial existente en el mercado de la música. En China hay una notable diferencia en la demanda de músicos en dependencia de las regiones y las ciudades medianas no disponen de orquestas sinfónicas normales. No obstante, el director se muestra optimista sobre el porvenir de la música. “Regularmente cada provincia debe contar, al menos, con dos o tres bandas”. La realidad es que la mayoría de los graduados prefieren quedarse en las grandes ciudades, como Beijing, lo que provoca este desequilibrio.

Dirección : 24, calle Baiwanzhuang, Beijing, 100037, China
Fax : 86-10-68328338
Sitio Web : http://www.chinatoday.com.cn
E-mail: chinahoy@chinatoday.com.cn
Todos los derechos reservados: China hoy