Los letreros de energía solar iluminan las paradas de autobús de Beijing.

 

Energías alternativas: dirección del futuro

 

 

La condición previa para el mejoramiento del medio ambiente es controlar la contaminación, lo cual depende en gran medida de la reducción de los gases perniciosos, que puede hacerse realidad con el desarrollo de nuevas fuentes renovables que alivien la presión de los recursos energéticos.

Según el Ministerio de Tierras y Recursos Naturales de China, la explotación petrolífera del país tiene una reserva estimada para 15 años, muy inferior a los 51 años promedio mundial. Las estadísticas demuestran que la necesidad de petróleo de China llegará a 450 millones de toneladas para el 2020, de las que 250 millones deberán importarse.

Otros datos indican que el gigante asiático promovió energías alternativas que le permitieron ahorrar 3,38 millones de toneladas de petróleo de 2001 a 2005, periodo en el que produjo unas 12,62 millones de toneladas de todo tipo de combustibles no tradicionales, y para acelerar la explotación de esos recursos, la Comisión Estatal de Desarrollo y Reforma emprendió un estudio a principios de 2006.

Diesel biológico

El 9 de marzo de 2007, se puso en funcionamiento la línea productiva de diesel biológico de la compañía Nueva Edad S.A., de la Industria de Grasa en el Parque de Demostración Industrial Duchang de Jiangxi, y así nació el primer barril de diesel bio-lógico de China.

Según la presentación del responsable del proyecto, este combustible alcanza completamente la pauta del de uso automovilístico, e incluso resulta mejor que el diesel petroquímico en combustibilidad, antidetonantidad, volumen de emisión perniciosa y otros diez aspectos, además de que cada tonelada es 100 yuanes (unos 13 dólares al cambio actual) más barata que el diesel ordinario. Lo más sorprendente es que se elabora a partir del aceite comestible usado por los restaurantes.

Los científicos estudian nuevas variedades de diesel biológico.

“Los restaurantes en Nanchang desechan diariamente decenas de toneladas de aceite usado y este número puede ser astronómico, si se suman los de la provincia de Jiangxi y otros lugares del país. Pero lamentablemente, la mayor parte de este producto no ha sido bien aprovechado. Ahora, nuestra compañía compra el aceite usado a 3.500 yuanes (45,25 dólares) por tonelada y luego lo aprovecha para desarrollar y producir diesel biológico”, dijo el gerente general de Nueva Edad, Zhang Nan.

China cuenta actualmente con decenas de empresas de producción de diesel biológico, distribuidas en Jiangsu, Fujian, Zhejiang y otras provincias.

Shen Tonghe, director del centro de industria carbonquímica, señaló que, “las materias primas para producir el diesel biológico incluyen semilla de algodón, soja, semilla de colza, planta acuática, grasa animal y aceite usado en los restaurantes, entre otros elementos”.

La elaboración anual de este producto por decenas de empresas, precisó, supera las 100.000 toneladas y se prevé que su demanda llegue a diez millones de toneladas en 2010. “Este combustible puede utilizarse directamente, mezclado en gran proporción con el petróleo, alcanzando el estándar nacional. Es un recurso de bajo costo y sin contaminación acuática, que tiene un porvenir brillante”.

El ingeniero de la Compañía Nueva Edad comentó que en estos momentos están colaborando con la iniciativa del gobierno local para promover el plan de la plantación de 500.000 mu (15 mu = 1 hectárea) de árboles Jatropha curcas, a fin de garantizar el suministro estable de materias primas para producir diesel biológico y harán realidad el objetivo estratégico de contar con una línea de 500.000 toneladas al año, esta-bleciendo así la mayor base de diesel biológico en Jiangxi. Por el momento ya tienen una gran cantidad de compradores, entre los que aparecen las compañías de autobuses públicos de las ciudades de Jiujiang y Jingdezhen, que ya firmaron contrato con ellos.

Se populariza el etanol

El etanol se distinguió en el estudio de bioenergías de China en 2006 y el Gobierno Central respaldó la construcción de cuatro fábricas para elaborar este combustible en Jilin, Heilongjiang, Henan y Anhui, las cuales produjeron cerca de 1.630.000 toneladas de etanol el año pasado y lo promovieron por más de diez provincias del país.

Autobuses de cero descarga están de servicio en Beijing.

Shen Tonghe, una voz autorizada en el tema, indicó que, del actual consumo petrolífero de China, un 50 por ciento se destina al sector automotriz. La industria automovilística del país se desarrolla muy rápido. Ahora tenemos 40 millones de coches y esta cifra se incrementa diariamente. Tan sólo en Beijing el número de vehículos crece en mil cada día. Esta gran cantidad de coches consumen anualmente el 85 por ciento de la producción nacional de gasolina y más del 20 por ciento de diesel. El departamento de industria del Centro de Estudios del Desarrollo del Consejo de Estado estima que la demanda de carburantes de los medios de transporte llegará a 138 y 256 millones de toneladas en 2010 y 2020, respectivamente. Para entonces, los autos se “tragarán” la mitad de petróleo doméstico e importado.

La alternativa del etanol se ha convertido por ello en un tema estratégico para China y es también un producto más maduro entre los que se espera reemplacen las fuentes tradicionales. Sin embargo, según Shen, “el porvenir de la gasolina etanol tampoco es brillante, porque los materiales no se pueden garantizar y la calidad del producto tampoco es ideal”.

Antes, los materiales eran por lo general cereales antiguos, pero a medida que se ha ido incrementando el consumo del producto, el depósito de cereales antiguos ya no puede satisfacer la necesidad de la ampliación productiva. “Ahora, las materias primas son principalmente maíz, pero eso también se relaciona con la seguridad nacional de reserva del cereal. En Guangdong y Guangxi se ha apelado a la caña de azúcar, la mandioca y otros cultivos de almidón o fibra, pero el suministro de materias primas todavía es un gran problema”, agregó.

Al mismo tiempo, siendo éste un país rico en carbón, la gente también deposita sus esperanzas en la tecnología que convierte ese mineral en gasolina. El grupo Shenhua, que se encargó del estudio de esta alternativa, declaró hace poco que han superado la mayor dificultad y dominado la tecnología nuclear, dando ya el primer paso hacia la industrialización.

Sociedad Anónima de Combustible etanol, de Jilin.

Sin embargo, Li Dadong, miembro de la Academia de Ingeniería de China, subrayó que “la liquidación carbonera aún no es rentable. Para producir 10.000 toneladas de gasolina se necesitan cien millones de yuanes (casi 13 millones de dólares) de inversión”. Si se quiere impulsar este proyecto, hay que resolver el problema del costo. China ahora está promoviendo esta estrategia, tomando a Mongolia Interior, Shaanxi, Shanxi y Yunnan como bases de prueba.

De todas maneras, el país no vacilará en desarrollar las energías alternativas y según la planificación, el gobierno impulsará iniciativas como la explotación hidroeléctrica, nuclear, eólica, solar, electro-geotérmica y marítima, con lo que la producción de energía renovable puede incrementarse de un 7 a un 16 por ciento del total en 2020.

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