Cementerio público de la ciudad de Nanjing en el Día de la Claridad Pura. CFP

Día de la Claridad Pura

Por LI WUZHOU

La Claridad Pura es uno de los 24 Períodos Climáticos del Año Solar de China. Como estas etapas reflejan objetivamente los cambios de temperatura de las cuatro estaciones, la precipitación anual y las relaciones entre los fenómenos biológicos de periodicidad y el clima, el pueblo trabajador de la antigüedad organizaba actividades agrícolas conforme a ellas.

Después de la llegada de la Claridad Pura, la temperatura empieza a subir y la lluvia aumenta, con lo que se crean las mejores condiciones para la labranza y cultivo de primavera. Son muy populares los refranes “Sembrar las semillas de frijoles y cultivar plantones de calabazas antes o después de la Claridad Pura”, “No hay temporada mejor que la Claridad Pura para plantar árboles”, entre otros. Este período climático tiene vínculos muy estrechos con la producción agrícola.

Sin embargo, la Claridad Pura también es una fiesta tradicional importante de China. Es el día de hacer ofrendas a los antepasados y limpiar sus sepulturas. Los hans y la mayoría de las minorías étnicas lo hacen durante el Día de la Claridad Pura.

Ese día todas las familias, no importaba si se trataba de altos funcionarios, nobles o gente sencilla ni cuántos eran, iban juntos al campo y al cementario familiar a cumplir con el homenaje a los muertos. Durante los festejos las dinastías feudales daban vacaciones a sus funcionarios, para que éstos pudieran regresar a su pueblo natal.

Según la tradición, la gente debe traer al cementerio licor, fruta, pastel y papeles parecidos al dinero, porque cree que los difuntos los utilizan en su mundo. Ofrendan la comida y la bebida ante el túmulo, encienden el papel moneda, escardan las hierbas y acollan la tumba y luego rompen unos ramos con nuevos brotes verdes y los plantan en la tierra del sepulcro. Después, los familiares hacen reverencias, arrodillándose y tocando el suelo con la frente ante la tumba, según el orden de las generaciones. Al final, comen todas las comidas ofrecidas y regresan a casa.

Una mujer deposita flores con nostalgia en la tumba de un antepasado. CFP

Estas actividades expresan por un lado el amor filial a los antepasados, y por el otro la creencia de los antiguos chinos, de que el buen cuidado y la protección de sus sepulcros agradan a los difuntos, quienes ya son almas fuertes que pueden proteger y bendecir a sus descendientes. Si nace un bebé, se celebra una boda o suceden otros acontecimientos felices en la casa, y la familia va a poner un papel rojo sobre el túmulo, simbolizando el envío de las buenas noticias a los difuntos.

En la actualidad, los chinos de ultramar o los que marchan lejos de su pueblo natal por trabajo, todavía observan la costumbre de regresar a casa el Día de la Claridad Pura. Si se les permite, también tratan de acercarse a la montaña o a un lugar alto para hacer una reverencia en dirección hacia su pueblo natal. Pero hoy en día, el tiempo de homenajear a los antepasados deja de limitarse al mismo día de la fiesta y se ha extendido a diez días.

El Día de la Claridad Pura también se llama Fiesta de Paseo en el Campo. Según el calendario solar, se celebra del 4 al 6 de abril, tiempo espléndido primaveral, cuando las plantas florecen y recobran su verdor, muy conveniente para que la gente recorra las áreas campestres. Los ancianos chinos tienen la costumbre de salir en estos días a apreciar los paisajes primaverales y hacer ejercicios físicos. En la antigüedad las mujeres no podían salir libremente, excepto durante la celebración. Entonces aprovechaban la oportunidad para pasear, jugar colompios, volar cometas e ir de compras. De ahí el refrán popular “La Fiesta de la Primavera es de los hombres, mientras que la Claridad Pura pertenece a las mujeres”.

A pesar del movimiento contra la cultura tradicional desplegado durante la “revolución cultural” y la penetración de los valores de la cultura occidental en la etapa de la reforma y apertura, las costumbres de la Claridad Pura no se vieron afectadas, sino que tendieron a recuperarse aún más.

Las ofrendas y reverencias se hacen cada año más prósperas. Shanghai, la ciudad con más actividad comercial de China, registra anualmente cerca de diez millones de ciudadanos que acuden al cementerio en los días de la fiesta. Mientras, en algunas ciudades del interior del país, la tradición está mucho más arraigada, se realizan arreglos especiales en los cementerios y la policía de tráfico se ve obligada a salir a la calle para aliviar los embotellamientos.

Algunos eruditos creen que las costumbres tradicionales del Día de la Claridad Pura demuestra la ideología de la piedad filial de los chinos y las actividades relacionadas fomentan los lazos y emociones de la familia, por lo que aconsejan al gobierno a establecer vacaciones legales en esa etapa.

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