Flores
para todos los días
Por YAO YI
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El mercado de flores de la
ciudad de Kunming. |
La proximidad del Día de San Valentín de 2006 impulsó
de manera notable las ventas de flores en el Mercado Laitai, situado
al lado de la Tercera Circunvalación Este de Beijing. Con
55.000 m² de superficie, Laitai es el mayor mercado del norte
de China, donde se venden finas especies de flores, tanto del
país como del mundo.
Como mayor productor de flores del mundo, China cuenta con la
más extensa superficie cultivada, equivalente a un tercio
del total mundial, y dos, cinco y diez veces la de Japón,
EE.UU. y Holanda, respectivamente. Cada año se registra
un aumento promedio de 10% en la superficie cultivada y el volumen
de producción, sobre todo después del año
2001, cuando la cifra viene creciendo de un 30-40%.
Mejores días de venta
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El 13 de febrero
de 2006, los campesinos floricultores de Guangzhou entregan
rosas al mercado. |
En 2002, consciente de las halagüeñas perspectivas
del mercado en Beijing, Wang Li trasladó aquí su
familia y su negocio de flores desde Kunming, capital de la provincia
de Yunnan, y en seguida alquiló un puesto en el Mercado
Laitai. Casi todos mis parientes se dedican al cultivo o
comercialización de flores. Ellos son mis suministradores,
lo que constituye mi ventaja sobre otros vendedores, indica
Wang Li.
Generalmente, los días festivos van precedidos por fuertes
pedidos de compradores, a pesar del alza de los precios. Sin embargo,
Wang tiene el suministro garantizado, lo que le permite ocuparse
sólo de recibir las mercancías en la estación
ferroviaria y el aeropuerto.
En la actualidad, las provincias de Yunnan, Liaoning y Guangdong
poseen el 62% de la superficie cultivada de flores en China. Yunnan
suministra principalmente flores en primavera, verano y otoño,
Liaoning le aventaja en invierno gracias a sus invernaderos y
Guangdong cultiva las especies bajo cobertizo.
En comparación con el cultivo de cereales y verduras,
las flores surten mejores utilidades, lo cual ha motivado a crecientes
personas a dedicarse a esta actividad. Según Wang, su hermano
mayor, floricultor en las afueras de Kunming, tiene un ingreso
tan alto que le permite enviar a su hijo a estudiar a Francia.
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El Día de las Madres
supone un alza en las ventas de flores en Shenyang, en especial
de los claveles . |
En opinión de Wang, cuando la compra de flores se
convierta en un hábito de los chinos, no habrá caídas
en mi negocio. En días comunes él atiende
principalmente órdenes al por mayor y puede cuidar solo
su puesto. Me gusta charlar con los compradores, explicándoles
las características de diferentes flores y el modo de cuidarlas
y ponerlas más bonitas. Pero ahora estoy muy ocupado.
Con la llegada del Día de San Valentín, llegan compras
masivas de flores para enamorados o amigos. Aunque es poco común,
de vez en cuando aparece un cliente que compra 99 rosas, o incluso
999 (en chino, el número 9 se pronuncia igual a la de para
siempre).
Según la experiencia de Wang, otras fiestas generan también
enormes ventas de flores. Por ejemplo, el festejo del Día
Nacional siempre acompaña de grandes demandas. Sólo
en Beijing, cada año se necesitan millones de macetas de
flores para decorar las calles y los sitios públicos. Las
empresas e instituciones gubernamentales también hacen
compras fuertes para celebrar sus aniversarios. A comienzos de
noviembre de 2006, durante el Foro de Cooperación entre
China y Africa, celebrado en Beijing, se exhibió más
de un millón de macetas de flores en la plaza Tian´anmen,
los alrededores de las sedes de las delegaciones visitantes y
a ambos lados del itinerario de los huéspedes.
Fiestas floreadas
Cuando el sobrino de Wang Li regresó de Francia a China
para pasar vacaciones, comentó a su tío que en otros
países el consumo de flores figura entre los gastos diarios,
costumbre muy diferente a la de los chinos, quienes sólo
las compran en días festivos. Wang sustenta esta opinión
al decir que: Debido a la cercanía de su mercado
a las sedes de muchas embajadas, hay cada día extranjeros
que compran flores. Conozco a un estadounidense que viene diariamente
a comprar una rosa para su esposa.
Lu Yan, empleado de la oficina de representación de una
empresa estadounidense en Beijing, vino hoy especialmente al Mercado
Laitai a reservar flores para su novia con motivo del Día
de San Valentín. Después de comparar muchos puestos
en el mercado, decidió hacer el pedido en el de Wang. En
vez de hacer la reservación por teléfono, prefiero
venir personalmente para seleccionarlas por mí mismo,
explica.
La reservación implica una mejor calidad de las flores
y un precio moderado. En el pasado Día de los Enamorados,
el precio de las rosas creció en diez veces, recuerda
Lu.
Respondiendo a la pregunta de si compra flores en días
comunes, Lu considera que los chinos no se acostumbran a regalar
flores sin motivo especial, debido a su actitud pragmática
en momentos de selecionar los regalos. Prefieren los objetos de
uso real y toman las flores como algo decorativo sin utilidad.
Sobre todo la gente de mayor edad que vivieron aquellos años
de escasez material presta mayor énfasis en el valor de
uso.
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