Ganancias con responsabilidad
En poco tiempo, China ha alcanzado altas cotas de desarrollo
económico, sobre todo si se le compara con los años
que precisó el hoy llamado mundo desarrollado para lograr
un nivel similar. En menos de tres décadas el salto ha
sido prodigioso. Pero hoy ya no nos bastan estos índices
para estar satisfechos. Si queremos alcanzar la armonía
social - objetivo supremo de cualquier sociedad moderna y justa
- hay que mantener al ser humano en el primer orden de prioridades.
A eso aspira el país y, en consecuencia, es menester que
las ganancias comiencen a marchar más parejas con la justicia
social.
Este tema, del que ya hemos abordado algunas aristas en previas
ediciones, vuelve por nuestros fueros este mes, de la mano de
nuestra reportera Xin Xin, quien explica cómo China se
pone al día en el tema de la responsabilidad empresarial,
en su artículo Un toque humano en el taller mundial.
Los llevados y traídos talleres explotadores o maquiladoras,
de triste fama, deben ir dando lugar a empresas que se preocupen
por el trabajador, que asuman sus compromisos con el medio ambiente
y que esgriman como brújula los más altos valores
de respeto a la condición humana. Esta es la tendencia
en buena parte del mundo, y China aspira a no quedar rezagada
en este largo recorrido hacia la justicia.
Otro recorrido es el que le proponemos en este número
por la meridional ciudad de Nanning, que amén de ser un
emporio del buen ambiente ecológico, gana cada día
mayor fama como eje en nuestras relaciones económicas con
los países de la Asociación de Naciones del Sudeste
Asiático (ANSEA), y el Sudeste de Asia en general. Se trata
de una zona geográfica que vive un despegue económico,
en medio de una fiesta comercial perenne.
Y de ambiente festivo han estado también los beijineses
que hablan español o hurgan incansables en las aguas profundas
de la cultura hispana. De plácemes se les ha visto por
la reciente apertura del Instituto Cervantes en la capital china,
una institución del gobierno español que promete
villas y castillos a los entusiastas de una forma de hablar, ser
y sentir que ya abarca a más de 400 seres humanos. Sobre
la inauguración les ofrecemos pormenores.
|