José Miguel Palacio Fernández,
coordinador de Asesores de la Secretaría de Agricultura,
Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación
de México, impartió el 19 de abril la
conferencia México-China, Relaciones comerciales
en el ámbito agroalimentario, en la Universidad
Nacional Autónoma de México (UNAM), donde
afirmó que China es nuestro mercado meta.
En la primera parte del discurso, el funcionario
enumeró las características de las dos
etapas del desarrollo rural de China, entre las cuales
1978, año en que empezó a aplicarse
la reforma y apertura al exterior, actúa como
un hito divisorio. La primera etapa se caracterizó
por el sistema de la comuna popular. El crecimiento
de producción agrícola representaba
un 2,3% anual, mientras que en la segunda época
(con los contratos de responsabilidad familiar), ha
superado el 10%, afirmó. También
relató la triple transformación que
sufrió el país asiático: de economía
planificada a economía regulada por principios
de mercado; de actividad basada en la agricultura
a la de manufacturas y servicios; de una economía
cerrada a una relativamente abierta.
En el sector agroalimentario, la Secretaría
de Agricultura de México pugna por encontrar
una mejor forma de penetrar en el mercado del gigante
asiático con sus productos. Palacio mencionó
varios ejemplos exitosos como el de Corona, cerveza
bien acogida por los consumidores chinos, y el Tequila,
el licor nacional mexicano, así como el aguacate.
Frente a la colosal demanda doméstica de China,
el funcionario reconoció que la mayor dificultad
estriba en la carencia de organizaciones mexicanas
que hagan ofertas a ese mercado objetivo.
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