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La negativa de Shanxi a impulsar una industria a todas luces prometedora, genera aún mayor estupor cuando se conoce que el departamento gubernamental chino autorizado para dicha industria pone sus actuales esperanzas en mantener en alto los niveles de beneficios de la industria hullera de China para el venidero quinquenio. Dados los exorbitantes precios del petróleo en el mercado internacional y las reservas inadecuadas del crudo de China, el carbón muestra su importancia incomparable en el país. Sus múltiples usos abarcan desde la puesta en marcha de la industria fabril hasta el funcionamiento del acondicionador de aire. En China, el carbón mineral satisface el 70 por ciento de las demandas energéticas, y el carbón de Shanxi resuelve el 26 por ciento de esa necesidad, según un informe del análisis publicado por la industria hullera china. El agotamiento de recursos amenaza a ciudades dependientes de la producción de recursos. Carbón que amenaza Los visitantes de Shanxi suelen ver cielos grises y una capa de polvo de carbón en cada superficie visible, horizontal y vertical. La explotación minera a largo plazo de las costuras de carbón debajo de las calles y casas ha causado el hundimiento de amplias áreas, como se aprecia cada año en tramos de hasta 5.000 hectáreas, 40 por ciento de las cuales se hunden en tierras labrantías. Éste es un ejemplo típico de cómo el vigor económico de China se ve inhibido por sus recursos limitados. Los recursos de capital naturales de Shanxi se reducen a un ritmo alarmante y de continuar la escala y velocidad actuales de explotación, sus depósitos minerales podrían agotarse en 70 años, de acuerdo con un reciente informe de investigación. El proceso de explotación de las minas trae aparejados enormes desperdicios: se utilizan dos toneladas de reservas de carbón y 2,48 toneladas de agua para producir una tonelada de carbón en minas de propiedad estatal. Los cálculos hechos en 2002 indican que las pérdidas causadas por los desperdicios del recurso, la contaminación ambiental, el daño ecológico y el hundimiento, resultado directo de la explotación, han alcanzado 30 mil millones de yuanes, o 70 yuanes de pérdidas invisibles por cada tonelada de carbón producida. A pesar de que el gobierno local de Shanxi ha consolidado su supervisión y administración de las pérdidas energéticas en los últimos años, la escasez de los recursos de agua y la reducción brusca de las tierras de labrantío han obstaculizado seriamente el desarrollo de otros sectores industriales. Las perspectivas de Shanxi y de otras provincias cuyas economías se basan en el carbón son sombrías, pues el 80 por ciento de sus minas de carbón se encuentran en etapa de madurez o de pleno declive, conforme a las estadísticas proporcionadas por la Asociación de Explotación Minera de China. La necesidad de fortalecer la protección del medio ambiente, la seguridad de la producción y la eficacia del trabajo han impulsado al Gobierno chino a buscar alternativas de desarrollo económico a expensas de los ya limitados recursos existentes. La seguridad ante todo Lo que más preocupa a la mayoría de los funcionarios de Shanxi es la seguridad del trabajo en las minas de carbón. Wang Shouzhen, director de la Administración de Industria Hullera de dicha provincia y diputado a la Asamblea Popular Nacional (APN), explica: "El número de muertes por millón de toneladas de carbón es el criterio aceptado para la seguridad del trabajo en minas de carbón. La tasa de mortalidad en los yacimientos carboníferos de propiedad estatal de Shanxi ha bajado de 1,85 por millón de toneladas de carbón en 2000 a 0,9 en 2005, pero la cifra en minas de carbón del cantón y poblado ha ascendido agudamente". En la cuarta sesión de la X APN, llevada a cabo en marzo de 2006, el gobernador de Shanxi, Yu Youjun, reveló que en septiembre de 2005 la provincia cerró 4.876 minas de carbón ilegales, y que en enero de 2006 cerró otras 1.400, cada una con la capacidad de producción inferior a las 90.000 toneladas de carbón. El gobierno ha exigido una renovación tecnológica a las minas de carbón de tamaño mediano - ésas con las reservas de 200.000 a 300.000 toneladas -- y ha estipulado que las que no cumplan con las normas de seguridad del trabajo serán cerradas en el plazo de dos años. También estimula a las minas más pequeñas a fusionarse con las más grandes, y pronostica que en los próximos cinco años, el número de minas de carbón en la provincia se limitará a 2.500. "La mecanización, la informatización y la centralización son las metas del desarrollo de las minas de carbón en China", afirma Wang Shouzhen. Junto al cierre de minas se aplican sanciones a los funcionarios que no observen la puesta en práctica de medidas de seguridad, o debido a la ocurrencia de accidentes o la existencia de yacimientos ilegales.
Hacia industrias de alto valor agregado El incremento de la demanda de carbón, que comenzó hace cuatro años, se ha traducido en un apreciable incremento de la renta per cápita de los habitantes de Shanxi. "Los precios del carbón han alcanzado un tope absoluto en los últimos dos años, pero un cambio de la estructura de los recursos energéticos es inevitable; incluso el pueblo de Shanxi lo entiende claramente", dijo un funcionario del gobierno de Shanxi, quien concluyó: "Este es un problema grave para los granjeros que dependen del carbón para vivir. Debemos hacer nuestro mejor esfuerzo para reducir al mínimo el impacto negativo de este cambio". El desarrollo del nuevo tipo de la industria química del carbón parece ser una alternativa más viable. Esta industria abarca la licuefacción, gasificación y la fabricación del carbón substitutivo del petróleo. Meng Chunqiu, director general de la Compañía de Coquización del Carbón Haoyi de Shanxi, declara que su empresa ha invertido 10 millones de yuanes en los nuevos proyectos que, al terminarlos, permitirán a producir seis productos nuevos de alquitrán. El más valioso, la naftalina, se utiliza en la fabricación de los aditivos alimenticios y las bolas de alcanfor. "En la actualidad, la naftalina industrial se vende a 7.000 yuanes por tonelada, y como nuestro producto se extrae en el curso de la coquización del carbón, su costo de producción no es alto", explicó Meng Chunqiu. Los ingresos derivados de los productos químicos del carbón ocupan más de la mitad de la renta total del Grupo de la Industria Hullera de Jincheng. Wang Shouzhen reveló que hasta 2010, las ventas del carbón del grupo sobrepasarán 3 mil millones de yuanes, y que los ingresos de productos no carboneros de las empresas hulleras alcanzarán 100 mil millones de yuanes, según el XI Programa Quinquenal de la provincia de Shanxi. El gobierno invertirá 318 mil millones de yuanes en la construcción de nuevos proyectos y la renovación tecnológica de las empresas existentes, de los cuales 200 mil millones se destinarán a las industrias no carboneras. Shanxi ha estado explorando los productos químicos
del carbón, y posee condiciones técnicas para
acelerar su desarrollo. La prosperidad del mercado del carbón
surgida en años recientes ha permitido a ciertas
empresas dedicadas a la explotación hullera acumular
los fondos con los cuales desarrollan los productos químicos
correspondientes. Hay, sin embargo, una tendencia actual
al desarrollo redundante de bajo nivel, razón que
incide en que los proyectos químicos se limiten al
petróleo y al metanol del carbón. Cuando se
completen estos proyectos, la oferta de tales productos
excederá considerablemente a la demanda, lo cual
conducirá a las guerras de reducción de precios
y a las pérdidas económicas. Ésta es
una cuestión grave que preocupa a Wang Shouzhen. |
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