El Tótem Lobo
Un éxito reciente en las librerías chinas, El Tótem Lobo es un cuento
conmovedor acerca de un joven de Beijing, su vida entre los pastores nómadas y
su amor por un lobo.
La historia transcurre en un lugar remoto de las vastas praderas de Mongolia
interior en la década de 1960. El joven nativo de Beijing, Chen Zhen y un grupo
de amigos abandonan su lugar natal para ir a Mongolia Interior, una tierra que
imagina como misteriosa, ilimitada y romántica. Sin embargo las percepciones de
Chen se verán pronto alteradas por la realidad de la región y los
comportamientos tan drásticamente diferentes que descubre entre los pastores
nómadas mongoles con los que convive.
La vida en las vastas praderas para Chen, será dura y nómada. Los pastores
nómadas dedican sus días a cuidar de sus ovejas pastando y de su ganado, al
mismo tiempo que mantienen equilibrado el ecosistema de las praderas por medio
de sus extrañas relaciones con los lobos. Por un lado, los pastores sienten
aversión a las bestias depredadoras que acosan y devoran su ganado. Sin
embargo, al mismo tiempo también sienten un deber de gratitud hacia los lobos,
por ser éstas las criaturas que ayudan a mantener el hogar vivo de los pastores
acabando con los herbívoros como la gacela de Mongolia, la liebre y el ratón de
campo.
Los pastores nómadas respetan al lobo, de hecho, los mongoles han
considerado durante mucho tiempo al lobo como tótem. Efectivamente, su cruel y
fuerte espíritu, su sabiduría y coordinación como manada inspiró a Genghis Khan
y a su ejército durante la conquista del continente euroasiático en el siglo
XIII. Cuando un mongol muere, a menudo es enterrado cerca de la guarida del
lobo con la creencia de que el lobo puede llevar el alma del muerto al Tengger,
el cielo de los mongoles.
Viviendo entre los pastores nómadas, Chen inevitablemente llega a verse
envuelto en esa relación “amor-odio” con los lobos. Es testigo de que hombres,
mujeres y niños luchan contra una criatura salvaje que ha venido a atacar su
propiedad. En un pasaje de esta historia, Chen se pierde y se encuentra de
repente rodeado por una manada de lobos cazadores de gacelas, deseosos de
probar su sangre.
Sin embargo son los granjeros y no los
pastores, los que representan la grave amenaza para los lobos en la pradera, ya
que ellos son los que acaban con el alimento de los animales. Es entonces
cuando los lobos atacan dos veces a los caballos provocando a los granjeros una
acción sangrienta. A pesar de las violentas protestas de los pastores nómadas,
los granjeros comienzan una matanza de lobos, en la que se sorprenderán al ver
la dignidad y el espíritu de los lobos cuando se enfrentan a una muerte segura.
Chen captura un cachorro de lobo y
decide criar él mismo al animal. Con esto, aprende que los lobos son criaturas
complejas que tienen hábitos interesantes y algunos son parecidos al de los
humanos.
Finalmente, los forasteros hacen la
paz con los pastores, pero no dejan de matar a los lobos y acabar con las
praderas. Las praderas van sucumbiendo lentamente a las tierras de labor, ya,
sin lobos para mantenerlas, y ayudar a su desaparición. El resultado es una
rápida desertificación. En un clímax que no se desvía demasiado de la
posibilidad, las arenas de Mongolia Interior alcanzan Beijing, antes de que los
vientos las azoten sobre el mar de Japón, Corea, y aún más lejos...
