Coordinador de una misión de la ONU en China
Por nuestra reportera XU XIAOYAN
Alto, amable y bien educado, el paquistaní y residente en China, Khalid Malik, es el coordinador de las Naciones Unidas y representante del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. El señor Malik lleva una vida muy agitada: cada semana asiste a varias conferencias, foros y charlas para transmitir las ideas y propuestas del Secretario General de la ONU, Kofi Annan, a los funcionarios y ciudadanos chinos.
Actualmente 21 organizaciones de la ONU tienen sus agencias en China, entre ellas, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (UNDP), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Población. Además, numerosas organizaciones de la ONU están cooperando con China en la implementación de proyectos, pese a que no han establecido sus oficinas de representación en el país.
En junio de 1979, el Gobierno chino firmó el Acuerdo Básico sobre Cooperación con el UNDP, la primera organización internacional que ofreció asistencia a China. “Después de estar 26 años en China, la ayuda de UNDP y su cooperación con China han desarrollado muchos campos. Nuestros proyectos de asistencia han pasado de las construcciones de infraestructura y el intercambio tecnológico, a la reforma del sistema de alto nivel y consultas políticas”, expresa Malik. “Nuestra estrategia de trabajo actual en China es explorar socios estratégicos con diversos departamentos de desarrollo chinos. El UNDP puede ayudar a China en cuatro formas, que son la profundización de la reforma, el alivio de la pobreza, el control del SIDA y el desarrollo sostenible de los recursos naturales y la protección ambiental”.
En septiembre de 2000, los jefes de Estado de diversos países se reunieron en Nueva York para la Cumbre Milenaria de las Naciones Unidas, durante la cual anunciaron las ocho Metas de Desarrollo Milenario de la ONU que serán alcanzadas en el año 2015. Éstas son actualmente los principales objetivos de trabajo de las organizaciones de la ONU en China. “China tiene un papel decisivo en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Milenario de la ONU. Sin la participación de China, hay poca esperanza de que se alcancen”, dijo Malik. “Estamos contentos de ver cómo está luchando China para lograr estos objetivos. Según el informe de evaluación, China ha alcanzado algunos, y tengo la confianza que el país podrá materializar la mayoría de ellos en 2015”.
La razón por la que China ha implementado tan bien estos objetivos se atribuye a la política del país de construir una sociedad modestamente acomodada. Desde el inicio de la política de reforma y de desarrollo de fines de 1970, el país ha hecho dramáticos progresos en cuanto al alivio de la pobreza. En los últimos 26 años, la tasa de crecimiento del producto interno bruto promedio anual de China fue de 9,4%, y su tasa de crecimiento del producto interno bruto per cápita fue de 8,1%. Unos 250 millones de chinos se han librado de la pobreza y han mejorado su nivel de vida. Además, la esperanza de vida en China es de más de 70 años.
Cuando China ha hecho notables logros en algunas áreas del desarrollo humano, se ha visto enfrentada con duros desafíos en otros sectores, como la igualdad entre los sexos, el control de la SIDA y la protección ambiental. Las organizaciones de la ONU en China han trabajado duro para ayudar al pueblo chino, particularmente los grupos débiles, para tener una vida mejor desde que China abrió sus puertas al mundo exterior. El organismo de la ONU en China ayudará al país a realizar estos objetivos milenarios mediante una serie de trabajos prácticos.
El UNDP emitió hace poco el Informe del Desarrollo Humano de China en 2005. Malik expresó que el recurso más precioso de una nación es su pueblo. Esta idea corresponde al concepto de “prioridad a la gente” del Gobierno chino –China está experimentado cambios fundamentales para cambiar su centro de atención del incremento del producto interno bruto a la modalidad de desarrollo de dar “prioridad a la gente”. Según Malik, la Comisión Estatal de Desarrollo y Reforma ha consultado al UNDP en cuanto a la elaboración del XI Programa Quinquenal del país, y Malik y sus colegas están trabajando en las propuestas con el fin de incluir los índices del desarrollo humano a este programa.
Malik soñaba en viajar a China hace muchos años, y se sintió honorado cuando fue seleccionado para su puesto de trabajo. Expresa: “China se encuentra en una etapa crucial de desarrollo. Ha hecho progresos social y económico maravillosos en los últimos años, y está esperado a marchar a pasos más grandes hacia adelante. Creo que el futuro de China es el futuro del mundo”.
Tanto la familia de Malik como la de su esposa tienen largas amistades con China. El padre de Malik es un veterano funcionario del Gobierno de Pakistán y tiene estrechos lazos con China ya de principios de los años 60, mientras que el padre de su esposa, de 80 años, vino a China en los años 40 y domina el chino, ahora ha vuelto a mirar textos chinos ya que desea volver a China para visitar a sus hijos y ver cómo el país ha cambiado.
Al mismo tiempo, la familia de Malik está feliz viviendo aquí. “Mi esposa, mis niñas y yo estamos muy contentos de nuestra vida en China”, dijo él. “Estamos aprendiendo el chino, pero ellos progresan más rápido que yo. Después de vivir aquí, entiendo por qué el país es tan atractivo para los extranjeros, la gente de esta tierra es hospitalaria y amistosa, la cultura es rica y multicolor, y el país es inmenso y vigoroso”.