JUNIO
2005


El tesoro del Monte Lushan

Por LU RUCAI

Lushan cubierta de nieve
El famoso puente de cielo de Lushan
Paisaje de otoño de Lushan

El Parque Nacional Lushan, situado en el municipio Jiujiang, provincia de Jiangxi, linda por el norte con el río Yangtsé, el más largo del país, y con el lago de agua dulce Poyang al este, el mayor de China. En 1996, la UNESCO declaró a Lushan como Patrimonio Natural y Cultural Mundial, tomando en cuenta que se trata de una de las cunas de la civilización china. Los monasterios y templos budistas y taoístas se integran a la belleza natural, formando un conjunto cultural de alto valor estético, de estrecha relación con la vida espiritual de la nación china.

Paisaje pintoresco de fama mundial

La zona pintoresca del Monte Lushan se extiende por 302 kilómetros cuadrados, en medio de 500 kilómetros cuadrados dedicados a un área de protección. En el sitio hay 171 picos de unos 1.000 metros sobre el nivel del mar, identificados desde la antigüedad. El más alto es el pico Dahanyang, de 1.474 m. Entre sus muchas cascadas, más de 20 gozan de relativa fama. El salto Sandiequan tiene una caída de 155 m.

Desde tiempos remotos, el Monte Lushan ha sido considerado hábitat de las hadas. Situado en una zona de monzón subtropical, este conjunto montañoso, en el cual se disputan la primacía en belleza los precipicios, las nubes y las cascadas, ha sido privilegiado con un clima agradable y precipitaciones pluviales anuales de 1.950 a 2.000 mm. Según estadísticas, durante más de 200 días al año como promedio, el monte se mantiene rodeado de un mar de nubes, que le otorgan un tono místico.

Las mencionadas condiciones naturales permiten la existencia de una frondosa vegetación de altura, lo cual evidencia la abundante presencia de árboles perennes de hojas anchas y un sinfín de especies de vegetales silvícolas. En 1934, los renombrados botanistas chinos Hu Xiansu, Qin Renchang y Chen Fenghuai, fundaron el primer gran jardín botánico del país dedicado a las investigaciones científicas, considerado asimismo importante base para la protección de la fauna y la flora en los cursos medio e inferior del río Yangtsé.

En medio de estas óptimas condiciones naturales crece la planta del té Yunwu, muy bien acogido en todo el país. La altura de la zona permite que el vapor de agua se eleve y se convierta en nubes, que luego permiten la caída de la lluvia cuando el aire frío da paso a la condensación. La humedad, las nubes y el sol moderado constituyen el ambiente ideal para el crecimiento del té, sobre todo el de alta calidad.

Lushan fue escenario de la era glacial del período cuaternario. Bajo la erosión del glacial se fueron formando numerosos accidentes topográficos, como en el caso de los valles en forma de U, las escaleras de hielo y los salientes helados. En febrero de 2004, Lushan y otros siete parques geológicos fueron los primeros en ser declarados Parques Geológicos Mundiales por la UNESCO.

Paisaje con larga historia

Lushan ha sido incluido en Registros Históricos, el primer libro chino de género biográfico escrito por Sima Qian (135 a.n.e.-87 a.n.e.). Atraídos por la fama del monte, hombres de letras de todas las dinastías lo visitaron, entre ellos Tao Yuanming,Li Bai, Bai Juyi, Su Shi, además de otros 1.500 poetas que visitaron sucesivamente el local y dejaron más de 4.000 poemas, que desde entonces han sido citados a menudo y apreciados por todo el mundo. Los monumentos con dichos poemas se ven en toda la montaña.

Lushan también fue centro religioso de la China antigua. Hui Yuan (334-416), monje zen de la dinastía Jin, estableció allí el Templo Donglin y creó la “Secta de Tierra Pura”, convirtiendo a Lushan en centro del budismo del sur de China. En las dinastías del Sur (420-589), el sacerdote taoísta Lu Xiujing creó en Lushan la secta de Maestro Celestial del Sur. En la dinastía Tang (618-907), Ma Zudao instituyó allí la secta Linji, de influencia trascendental. En la dinastía Song (960-1279), había 361 templos en Lushan. Después de las dinastías Ming (1368-1644) y Qing (1616-1911), el islamismo, el cristianismo y el catolicismo también establecieron ermitas e iglesias en la montaña, donde las asociaciones religiosas de más de 20 países propagaban su religión. En 1924, se celebró en Lushan la conferencia de la Asociación Mundial del Budismo.

En su calidad de base didáctica de tiempos antiguos, la Academia de Estudios Clásicos de Bailudong (AECB), fundada en 940, fue uno de los centros de enseñanza superior de la dinastía Song (960-1279), considerada la “primera de las academias de estudios clásicos del mundo”. Como centro de enseñanza de la pedagogía y la filosofía antiguas de China, la AECB gozó de una fama pareja a las de las academias Suiyang, Shigu y Yuelu, con las cuales formo las “cuatro grandes academias de China”. Zhu Xi (1130-1200), famoso filósofo y pedagogo de la dinastía Song, hizo investigaciones en la montaña y planteó pensamientos educativos y filosóficos de influencia trascendental, apreciados a escala mundial hasta hoy. Tras el establecimiento en la dinastía Tang, la prosperidad en la dinastía Song del Sur, y la decadencia y la revitalización de las dinastías Ming y Qing, la AECB comenzó a decaer, pero su profundo contenido ideológico ha seguido influenciando a los chinos hasta ahora.

El Monte Lushan ha sido por tradición un lugar de veraneo, admirado tanto dentro como fuera del país. Desde la Guerra del Opio, en el siglo XIX, más de mil chalets de estilo arquitectónico occidental de 18 países, como Inglaterra, Francia, EE.UU., Alemania, etc., se fueron levantando en la montaña. Más de 600 de ellos se han conservado hasta la actualidad. Entre las montañas famosas de China sólo Lushan cuenta con tal escala de edificaciones con tan variado origen. Antes de la fundación de la República Popular China, el Kuomintang sentó sus fueros de descanso estival en el mismo sitio. En la Nueva China, Mao Zedong convocó a tres importantes reuniones del Partido allí, con lo cual agregó nuevos valores históricos al lugar.

Un modelo ecológico para Lushan

Desde que un comerciante ruso arrendara el Templo Jiufeng en 1885 para construir un chalet de estilo occidental, y tras más de un siglo de tanteos, el silencio de antaño ha sido sustituido de forma gradual por el bullicio mundano. Las estadísticas muestran que en Lushan hay 5.000 habitantes permanentes, cifra a la que se suman unos 50.000 turistas en la época alta, lo que se convierte en enorme presión para el entorno ecológico local.

En los últimos años, con el fin de rectificar esta tendencia, los departamentos administrativos se han dado a la tarea de terminar con las construcciones ilegales y con aquellas que afectan el panorama circundante, empeñadas en devolver al sitio su fisonomía natural primitiva. Partiendo de estas premisas, el Comité de Administración del Patrimonio Mundial de Lushan proclamó que a partir del 1 de mayo de 2004, la montaña quedaría abierta de manera gratuita a los mayores de 70 años, a los menores de 14 años bajo tutela de adultos, y a los minusválidos. Lushan no ceja en su propósito de ser un verdadero patrimonio natural y cultural para los pueblos del mundo.


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