Sólo
un cigarrillo al día
Lao Hu, anciano de más de 70 años,
enferma repentinamente, por lo que acude al médico
de inmediato. Lo suyo no es grave, dice el
doctor, pero a partir de hoy tiene que acostarse
temprano y salir de paseo con frecuencia. Además,
sólo puede fumarse un cigarrillo al día.
Dos semanas después, Lao Hu regresa al hospital
y le dice al galeno: Estoy mucho mejor. Lo que sí
me resulta difícil es lo del cigarrillo diario. ¡Imagínese,
empezar a fumar a mi edad!
¿Adivina?
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Hija: Mamá, ¿Es bonita mi falda?
¿No adivinas cuánto costó?
Madre: Creo que es muy cara, hija.
Hija: ¿Y cómo lo sabes; por el
color?
Madre: No, por la cara de disgusto que tiene
tu marido.
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Cena
preventiva
Marido: Cariño, he invitado
a un colega a cenar en casa mañana.
Esposa: ¿Cómo? ¿Estás
loco? Mira, hace mucho tiempo que no limpio la casa; tampoco
he hecho compras en el supermercado. Además, hay
un montón de platos por lavar en el fregadero. Y
por último, no tengo el menor interés en preparar
esa maldita cena.
Marido: Lo sé, cariño.
Esposa: Entonces, ¿por qué insistes
en invitarlo a cenar?
Marido: Para disuadir a ese chico tonto, que no hace
más que pensar en casarse.
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