Construir un Tíbet nuevo y armonioso

--Entrevista con el secretario del Comité de la región autónoma del Tíbet del PCCh, Yang Chuantang

 
 

Yang Chuantang ( derecha) en entrevista con China Hoy

Yang Chuantang inspeccionando la construcción de la línea ferroviaria de Qinghai-Tibet

Este septiembre, la región autónoma del Tíbet cumple 40 años de fundada. Nuestra revista, desde sus primeros números en 1952, ha dedicado atención ininterrumpida a esta tierra, presentando a los lectores reportajes exclusivos sobre su liberación, construcción y desarrollo. Israel Epstein, (1905-2005) editor jefe honorario de nuestra revista, hizo cuatro visitas al Tíbet a partir de 1956, resultado de las cuales fueron los numerosos reportajes y artículos que publicó, incluyendo el libro Tíbet en Tránsito. Éste fue el primer volumen sobre el tema escrito por un extranjero en el país, y el mismo presenta al mundo objetivamente los cambios radicales que han sucedido en el nuevo Tíbet, como importante aporte para que la comunidad internacional conociera al Tíbet real.

En mayo de 2005, encabezados por el director de la editorial China Hoy, Gong Xixiang, los reporteros de la revista hicieron una visita al Tíbet por el 40 aniversario de la fundación de la región autónoma. Allí entrevistaron al secretario del comité de la región del Partido, Yang Chuantang. Nacido en mayo de 1954, en Yucheng, provincia de Shandong, en el litoral oriental de China, Yang Chuantang fungió como vicegobernador del Tíbet de 1993 a 2002. A partir de diciembre de 2004, asumió su actual puesto. En la entrevista, este “viejo tibetano", según gusta de autodenominarse, aborda el proceso de desarrollo y las perspectivas del Tíbet.

China Hoy: ¿Cuáles son las ideas y medidas renovadoras que han servido al Tíbet para avanzar en estos 40 años?

Yang Chuantang: En 1965, el PIB del Tíbet era sólo de 327 millones de yuanes; en 2004, sin embargo, la cifra ascendía ya a 21.154 millones, lo que implica un incremento sobre precios fijos de 18,6 veces en 40 años. En los cuatro años del nuevo siglo, el Tíbet ha mantenido consecutivamente un ritmo de crecimiento superior al 12% anual, y cuenta con un ambiente ideal para imprimirle un salto al desarrollo económico y social de la región.

De 2001 a 2005 nuestro objetivo ha sido mantener el promedio de crecimiento anual del PIB superior a un 12%, y en 2010, el PIB per cápita deberá llegar al nivel medio a escala nacional, con lo cual se sentarán sólidas bases para la modernización del Tíbet junto al resto del país.

 
  Durante el festejo del Año Nuevo según el calendario tibetano, Yang Chuantang felicita a una anciana tibetana Después de 12 años de trabajo en el Tibet, Yang Chuantang se ha granjeado amplia simpatía entre los lugareños

Con el fin de lograr este salto en el desarrollo hemos planificado proyectos en cinco ramas: en primer lugar, las construcciones de infraestructura y favorables al medio ambiente; en segundo lugar, el desarrollo de cultivos superiores de nuestra región, la crianza de animales domésticos y la elaboración de productos pecuarios, haciendo uso genuino de nuestras ventajas económicas, modernizando la agricultura y la ganadería, beneficiando verdaderamente a los agricultores y ganaderos, mejorando sus ingresos y proveyéndoles de una vida modestamente acomodada. En tercer lugar, el desarrollo de las industrias regionales; en cuarto, el fomento de las inversiones sociales, sobre todo en las zonas agrícolas y ganaderas; y en último lugar, la creación de las condiciones, a través de varios proyectos clave, para el desarrollo sostenible y a saltos del Tíbet.

El Gobierno Central, en su II y III Conferencias sobre el Trabajo del Tíbet, celebradas respectivamente en la década de los 80 y 90 del siglo XX, definió en cada caso 43 y 62 proyectos clave para mejorar la infraestructura del Tíbet. En el nuevo siglo, tuvo lugar IV Conferencia sobre el Trabajo del Tíbet, en la cual el Gobierno Central la designó como una de las provincias y regiones autónomas clave dentro del plan de exploración del oeste, para lo cual definió la aplicación de un esfuerzo concentrado que promueva la estrategia de desarrollo a saltos. Al mismo tiempo, tomó la decisión de construir la línea ferroviaria Qinghai-Tíbet, así como otros 116 proyectos clave incluidos en el X Plan Quinquenal de nuestro país, con una inversión total de 31.200 millones de yuanes –12.000 millones para el tramo de línea ferroviaria Qinghai-Tíbet que pasa por el Tíbet. Hasta ahora se han concluido 83 proyectos. Con motivo del 40 aniversario de la fundación de la región autónoma del Tíbet, se adicionaron otros 24 proyectos de gran magnitud, con una inversión total de 6.420 millones de yuanes; varios de ellos están concluidos.

China Hoy: En los últimos años, el Tíbet ha dado prioridad al desarrollo del turismo, la industria farmacéutica de medicina tibetana, la industria ecológica típica local, la producción de alimentos naturales, la elaboración de productos agropecuarios y la artesanía tibetana. ¿Puede hablarnos sobre los adelantos logrados en el impulso al desarrollo, así como la magnitud y la rentabilidad de estas industrias?

Yang Chuantang: En 2004, 1,2 millones de turistas visitaron el Tíbet, para un crecimiento del 29 por ciento con respecto al año anterior; el ingreso de turismo alcanzó 1.500 millones de yuanes y aumentó en 44 por ciento en comparación con el año anterior. La producción de los medicamentos de medicina tibetana totalizó 1.090 toneladas, con un valor de producción de más de 400 millones de yuanes y un crecimiento de 20 por ciento. Sin embargo, la economía de peculiaridades regionales todavía se mantiene en su proceso inicial, caracterizada por su pequeña magnitud, baja categoría y reducida ganancia.

Más adelante, junto al aceleramiento de la construcción de las industrias locales, introduciremos un pensamiento rector de avanzada para conseguir la industrialización, de modo que las industrias regionales arranquen desde el nivel más alto, crezcan en mayor magnitud y logren la transición histórica de las empresas de la región hacia la agrupación y unión. Las condiciones geográficas y climáticas del Tíbet son muy variadas y a la vez únicas de esta zona. Debemos aprovechar plenamente los ricos recursos que ofrece la tierra, así como el sol y el agua, utilizar las tecnologías, según las demandas del mercado, reestructurar la agricultura y ganadería regionales. Mejoraremos las instalaciones y la calidad de los servicios turísticos. Además, hemos seleccionado varios proyectos que apuntan a la exploración de recursos en los cuales el Tíbet cuenta con superioridad en comparación con otras regiones del país, como los minerales, medicina tibetana y agua.

 


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