JULIO
2004


La realización de un gran sueño

Antorcha Olímpica alcanzará la cumbre del Qomolangma en 2008

Hace poco, Li Zhixin, director del Centro Administrativo de Alpinismo del Buró Estatal de Educación Física y Deporte, manifestó que los trabajos para el relevo de la Antorcha Olímpica que tendrá lugar en Beijing en 2008 “se están llevando a cabo en el presente ejercicio según la planificación oficial”.

La Antorcha Olímpica emprenderá un ambicioso viaje por el monte Qomolangma –también conocido como Everest-, el punto más alto de la tierra, lo que constituirá una iniciativa sin precedentes. Para cumplir esta tarea no sólo se exige a los alpinistas escalar una altura de 8.848 metros sobre el nivel del mar, sino también a los fotógrafos y técnicos encargados de la transmisión en directo por televisión. Hazaña que, verdaderamente, significa una auténtica prueba para ellos.

Según Li, los trabajos iniciales para llevar a cabo esta misión abarcan desde seleccionar alpinistas nacionales hasta entrenar a un grupo de fotógrafos y técnicos en televisión para formar parte en un futuro contingente que deberá ser relevado varias veces durante el recorrido de la Antorcha Olímpica, el cual será transmitido en directo para todo el mundo.

Comparativamente, el último trayecto de ascenso es el más difícil y pesado, y, por el momento, no existen registros e imágenes realizados en esa zona por fotógrafos profesionales chinos.

A pesar de todo, Li se mostró confiado en poder ejecutar esta tarea por los siguiente motivos. En primer lugar, los escaladores chinos, dirigidos por la Asociación de Alpinismo de China y por el equipo de la Región Autónoma del Tíbet, consiguieron recientemente alcanzar con éxito la cumbre de este imponente monte.

En segundo lugar, poseemos cierta experiencia en la transmisión en directo del ascenso del Qomolangma realizado por alpinistas chinos aficionados y realizado con motivo del 50 aniversario de la conquista de su cumbre. Y en tercer y último lugar, disponemos de unas condiciones favorables gracias al desarrollo de la ciencia y de la tecnología y estamos respaldados con el apoyo activo de diversos círculos sociales.

Además, Li manifestó que las Olimpiadas “son el acontecimiento deportivo más importante que se celebra en todo el mundo”. Por ello, Li confía en que representantes de las 56 minorías nacionales chinas y chinos de ultramar participen activamente en las actividades programadas durante el recorrido de la Antorcha Olímpica por el monte Qomolangma.

Dificultades a las que se van a enfrentar

Según lo propuesto por los expertos chinos y extranjeros en el simposio sobre la Antorcha Olímpica del 2008, coordinado por el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing, se espera resolver sin dilación algunos problemas clave que conduzcan al éxito del relevo de la llama olímpica en el Qomolangma.

De acuerdo con lo subrayado por Wang Yongfeng, responsable de la Asociación de Alpinismo de China y ex capitán del equipo de Montañismo de China, existen cuatro puntos urgentes que son necesarios resolver de la manera más rápida.

Primero, el tiempo es muy limitado, pues, por lo general, para llevar a cabo los trabajos preparativos para subir al monte Qomolangma se necesitan tres años. Debido a que ahora se planifica escalar la cumbre por los dos lados –por el norte y por el sur-, los preparativos necesitarán, sin lugar a dudas, de una organización de, al menos, cinco años, pues además de seleccionar al equipo de escaladores, se deberán buscar unos fotógrafos y cámaras profesionales capacitados para realizar una gesta de este tipo. Por otra parte, hay que estar seguros de que los deportistas no sólo lleguen a la cumbre simultáneamente, sino que lo hagan con toda la seguridad posible y sin poner en riesgo la Antorcha Olímpica.

Segundo, hay que asegurar la vida de la llama y reanimarla constantemente añadiendo yesca durante todo el recorrido. Aunque en 1999 nuestros deportistas recogieron hierbas secas en la cumbre del Qomolangma, que fueron encendidas con éxito, ésta vez, podrían contar con más dificultades. El gran reto en este aspecto es, pues, asegurar que la Antorcha Olímpica no se apague a medida que asciende y se pierde calidad y cantidad de oxígeno.

Tercero, comparando con el ascenso por el lado norte del Qomolangma, el del sur lo hemos realizado en nueve ocasiones, por lo que poseemos conocimientos sobre cada piedra y sobre los refugios en alturas superiores a los 8.000 metros. En síntesis, la escalada por el sur es más fácil que por el norte, pues por este lado la subida es relativamente más larga, aunque también más adecuada. Ahora necesitamos negociar con las autoridades de Nepal para realizar una coordinación mutua y recabar todo tipo de información de escaladores extranjeros que hayan recorrido ambas rutas.

Cuarto, la ascensión no es, en realidad, un trabajo difícil, lo peor es mantener una buena coordinación durante el proceso de escalada, de transmisión en directo por la televisión y de continuidad en el relevo de la llama olímpica. Por ejemplo, para nosotros son completamente nuevos temas tales como el suministro de oxígeno, tanto para los alpinistas como para la antorcha, o el transporte de los equipos necesarios para la retransmisión televisiva y la señal de radio.

Según Di Henry, tramador del relevo de la antorcha, los trabajos preparativos para los Juegos Olímpicos deben disponer de suficiente tiempo, porque los de Sydney duraron cinco años. Durante este lapso se firmaron seguros con 23 países, contratos con 40 compañías de transporte y se fundaron 262 comités, proporcionando así sólidas bases para el feliz recorrido de la Antorcha Olímpica.

Wang Yongfeng mantiene que el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos debe explorar y seleccionar empresas que compartan la misma idea de unidad y superación que supone este reto, para que, de este modo, la apoyen económicamente sin buscar obtener ganancias comerciales.

El relevo de la Antorcha Olímpica es una buena manera de mostrar los diversos y bellos paisajes por donde atravesará durante su andadura. Y es también una oportunidad única y la mejor manera de intensificar las relaciones con los habitantes de las diversas nacionalidades.

China es un país con una población muy numerosa, por lo que la seguridad es lo más importante. Tenemos que hacer todo lo posible por evitar cualquier factor que pueda producir o causar alguna situación de inseguridad pública.

La coordinación con los lugares por donde pase la antorcha es un trabajo clave, pues va a recorrer muchos países, algunos de los cuales poseen una civilización milenaria.

Mayo de 2008

Según lo anunciado por Sun Weijia, responsable del departamento de propaganda y prensa del Comité Organizador de los Juegos Olímpicos de Beijing, mayo de 2008 será el mes durante el cual la antorcha atravesará el monte Qomolangma. Este acto solemne, nunca antes realizado, será retransmitido por televisión en directo a todo el mundo.

El 13 de julio de 2001, durante el último discurso pronunciado en Moscú por los representantes de Beijing durante su campaña para conseguir ser la sede de las Olimpiadas de 2008, se dio a conocer a todo el mundo esta iniciativa inspirada en la Ruta de la Seda, idea que va a suponer un antes y un después en la historia de los Juegos Olímpicos.

Con el lema “Paz y Olimpiadas”, el trayecto del relevo de la Antorcha Olímpica se iniciará en el Monte Olimpo, atravesará Grecia -lugar de origen de la antigua civilización humana-, Roma, Egipto, Turquía, Mesopotamia, Persia, la Península Arábiga, la India, Nepal y finalmente llegará a China. La llama encendida permanentemente cruzará la cordillera Himalaya y el monte Qomolangma, punto más alto del mundo, llegando así a una altitud jamás alcanzada durante toda la historia de los Juegos Olímpicos.

Ya en China, el fuego sagrado llegará al Tíbet, atravesará el río Yangtsé, el río Amarillo y subirá a la Gran Muralla. Durante su recorrido por una nación compuesta por 56 minorías étnicas, incluyendo Hong Kong, Macao, Taiwán, un gran número de personas gozará de este maravilloso acontecimiento, sirviendo de magnífico estímulo para todos los presentes.

En este año, los escaladores seleccionados serán reunidos y sometidos a un entrenamiento duro. Entre los años 2004 y 2006 deberán adaptarse progresivamente a la altitud y dominar las técnicas básicas de la escalada, a través de entrenamientos realizados en algunas montañas de la meseta de Qinghai-Tíbet con una elevación media superior a los 7.000 metros, y, además, prepararlos para escaladas en grupo y en solitario.

En 2007, se realizará un simulacro para obtener datos de primera mano tanto sobre el traspaso de la antorcha en la cima, como sobre la emisión en directo. De acuerdo con los resultados, perfeccionaremos y mejoraremos todos aquellos aspectos que arriesguen la misión.

Desde septiembre de 2007 a marzo de 2008, debemos hacer todo lo necesario para que el relevo de la Antorcha Olímpica se realice sin contratiempos, tales como la preparación del equipamiento o los sistemas de seguridad.

A partir de marzo de 2008, empezaremos a mandar sucesivamente contingentes para establecerse en los campamentos base de la ladera sur y norte, con el fin de cumplir esta heroica empresa.

Wang Yongfeng informó sobre los trabajos que se están llevando a cabo en todos los centros docentes superiores del país para la selección de las personas encargadas del traspaso de la llama olímpica y que terminarán antes de junio de 2005. Se estima que se necesitarán unos cuarenta atletas oficiales por cada lado, incluyendo otros veinte suplentes, de los cuales la mayoría provendrá del entorno universitario, además de unos cien deportistas preparados para coordinar las diversas actividades en caso necesario. Los atletas oficiales deberán llevar una carga de entre 10 y 15 kilos, mientras que los suplentes portarán cerca de 25 kilos durante la subida de la montaña.

Retransmisión en directo

“La heroica empresa de 2008 será emitida en directo al mundo entero y quedará inscrita, sin duda alguna, en una página brillante en la historia del alpinismo y en la de la retransmisión televisiva”, aseguró Sun Weijia.

El periplo de la Antorcha Olímpica por el punto más alto del mundo y la retransmisión en directo por televisión supondrán uno de los mayores retos jamás realizados en el monte Qomolangma, pues conlleva toda una serie de importantes problemas técnicos, como la propia retransmisión en directo, el trayecto por las zonas montañosas, la organización de la fuerza humana, las dificultades clave que deberán resolverse in situ, la seguridad de los equipos y las técnicas para mantener encendida la llama en unas condiciones geográficas complicadas y rigurosas carentes de oxígeno y a temperaturas muy bajas.

Sun añadió que aunque “podemos enfrentarnos con innumerables dificultades durante el relevo de la llama olímpica, cuando se alcance la cumbre será uno de los momentos más emocionantes, si no el más, de todo el recorrido. Espero que todos los atletas y el personal para la emisión televisiva se inspiren en el lema olímpico de ‘más rápido, más alto y más fuerte’ y marchen intrépidos hacia la cumbre de la codillera Himalaya y promuevan el espíritu olímpico hacia un estado más ideal.

Una estrecha relación

Según la opinión de Wang Yongfeng, China “es un país muy montañoso y una nación acostumbrada a adorar la naturaleza, cuya cultura no sólo forma parte de la brillante civilización china, sino que también tiene una larga historia”.

Wang añadió además que los Juegos Olímpicos “también estaban relacionados con dioses que habitaban en el Monte Olimpo. La adoración a los dioses de la montaña y a los ríos, así como a los inmortales de la antigua Grecia, parece tener algo que ver con la escalada de una montaña”.

Continuó Wang, “el alpinismo no figura entre las disciplinas de los Juegos Olímpicos, ni tampoco guarda relación con las Olimpiadas nacidas en 1894. Sin embargo, sus lemas principales de ‘más rápido, más alto y más fuerte’ y ‘lo importante es participar y procurar la paz y la amistad’, constituyen uno de los ideales básicos del alpinismo”.

A partir de 1984, Wang empezó su carrera como alpinista y junto con Li Zhixin conquistó en 1999 las montañas más altas de los cinco continentes. Así, expresó que el desafío de llevar la llama olímpica hasta la cumbre del mundo, escribirá, sin duda alguna, una nueva página en la historia y producirá una profunda influencia en la práctica futura del alpinismo, tanto en China como en el resto de países.

Diez campamentos

Con el fin de asegurar el feliz y exitoso relevo de la Antorcha Olímpica, es necesario establecer de diez a doce campamentos base a ambos lados del Qomolangma. La cumbre de este monte es una diminuta ladera de 9 metros de largo, 2 metros de ancho y una inclinación de 3 grados, la cual permite una estancia breve de escaladores, técnicos y equipos.

Según los datos recabados hasta el momento, la humanidad ya ha batido el récord de permanencia durante 24 horas continuadas en este lugar. Estos valiosos datos favorecerán nuestro trabajo en el traspaso de la Antorcha Olímpica y durante la emisión en directo de dicho acontecimiento.

Wang propuso que los alpinistas partieran simultáneamente, los del lado sur desde una altura de 8.500 metros y los del norte desde una altura de 8.700 metros, para reunirse, tras siete horas de escalada, en el punto culminante.

Cuatro posibles itinerarios

Liu Jiyuan, director del Instituto de Investigación de Ciencia Geológica y de Recursos de la Academia de Ciencias de China, señaló que hay preparados cuatro posibles itinerarios para realizar el descenso desde la cumbre y abordar otras regiones y provincias próximas.

La elección de las rutas debe tener en cuenta los siguientes puntos: características geológicas, entorno ambiental y paisajes naturales y artificiales, tanto del Qomolangma, como de la Región Autónoma del Tíbet, para reflejar de manera amplia la historia milenaria y la cultura brillante de la nación china.

Los itinerarios propuestos son los siguientes:

1.      Itinerario Xinjiang-Tíbet, el cual atraviesa la antigua Ruda de la Seda y permite apreciar paisajes naturales y artificiales.

2.      Itinerario Qinghai-Tíbet, el cual atraviesa la famosa carretera de la meseta y los antiguos caminos nómadas de Tangzhu y Tangfan. Este itinerario puede mostrar la convivencia armoniosa entre el ser humano y la naturaleza de la región occidental de China y divulgar, a su vez, el espíritu olímpico medioambiental.

3.      Itinerario Yunnan-Tíbet, el cual atraviesa la frontera occidental, siguiendo la franja costera del territorio chino de oeste a este y de sur a norte.

4.      Itinerario Sichuan-Tíbet, el cual atraviesa la antigua Ruta de la Seda por el suroeste y la antigua vía Chama.

Leyenda sobre los Juegos Olímpicos

El fuego sagrado de los Juegos Olímpicos tiene que ver con una leyenda mitológica de la antigua Grecia. El dios Prometeo, para salvar a la humanidad del miedo, la miseria y la pobreza, extrajo secretamente, ocultándose del dios Zeus, yesca, material que servia para prender fuego.

Según la mitología, antes de la inauguración de los Juegos Olímpicos de la Antigüedad, era obligatorio realizar un acto solemne para encender la llama olímpica en el pebetero y los atletas debían correr hasta ese lugar.

Los tres que llegaron primero llevaban en lo alto la Antorcha Olímpica y recorrieron toda Grecia para transmitir la orden del cese de todo tipo de guerras. Así nacieron los Juegos Olímpicos, los cuales se celebran cada cuatro años y son inaugurados y clausurados con la llama olímpica.

Una tradición simbólica

La Antorcha Olímpica apareció por primera vez en las Olimpiadas de Ámsterdam en 1928. Desde aquel entonces, durante los Juegos Olímpicos, que se celebran cada cuatro años, se enciende en el transcurso del acto de apertura una llama que iluminará hasta que se clausure el acontecimiento deportivo. De este modo se ha mantenido hasta hoy como una tradición simbólica de los Juegos Olímpicos.

Un punto más atractivo

Tras el emocionante instante en el que se enciende la Antorcha Olímpica, el más inolvidable es, sin lugar a dudas, su recorrido, porque se ha convertido en el acto más importante destinado a divulgar el espíritu olímpico, fortalecer la unión y la amistad de la gente de todo el mundo y concentrar la aspiración común de los habitantes del país anfitrión.

En las Olimpiadas de Sydney 2000, la Antorcha Olímpica atravesó el Desierto Rojo, paso frente la Ópera House de Sydney y, finalmente, llegó al Estadio Olímpico, mostrando al todo el mundo, durante su trayectoria, su espectacular geografía, sus costumbres y sus sentimientos más profundos. Los deportistas de prestigio de Australia y muchos otros famosos atletas, así como respetados aborígenes ataviados con sus ropas tradicionales, participaron en este acto y donde quiera que acudieron fueron objeto de bienvenida por los habitantes tanto de ciudades como de zonas rurales.

En los de Barcelona 1992, la noticia de la incorporación de 200 deportistas provenientes de más de 50 países al contingente del relevo de la Antorcha Olímpica de España, se recibió con una gran alegría en todo el mundo.

Las Olimpiadas Beijing 2008, levantaran sin duda una ola apasionada en todo el territorio chino y estimularán el sentido de orgullo nacional que, de por sí, ya posee el pueblo chino.

 

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