JUNIO
2004


Sellos especiales — Modismos chinos

En abril de 2004, la Administración Nacional de Correos emitió una colección de cuatro sellos sobre los modismos chinos que cuentan cuatro leyendas muy famosas, a saber: Imitación del andar, Falso amor del señor Ye por los dragones, Nanguo completa el número de flautistas sin saber tocar la flauta y La pelea entre la garza y la almeja.

La historia Imitación del andar cuenta que hace más de dos mil años hubo un joven en Shouling, población perteneciente al reino Yan, a quien siempre le parecía que los demás lo hacían todo mejor que él, por lo que para no ser menos, decidió imitarles. Un día, oyó decir que la gente de Handan tenía ademanes muy elegantes cuando caminaba. Así que hizo un viaje especial desde Shouling hasta Handan para aprender la manera de andar de los lugareños. Tras muchos intentos infructuosos, abandonó la idea y olvidó su manera original de andar, con lo que no le quedó más remedio que volver al reino Yan a rastras.

En la parte inferior derecha del sello hay un dibujo pequeño que muestra al joven arrastrándose por el suelo, lo que supone un vivo contraste con el elegante porte de los habitantes de Handan, los cuales caminan con la cabeza erguida y a pasos agigantados.

El falso amor del señor Ye por los dragones narra la historia de Ye, amante de los dragones, quien gustaba de tallar y dibujar la figura de los mismos por todas partes, incluyendo en la ropa, en las copas de vino, etc. Al enterarse de esto, el auténtico dragón del Cielo le visitó, asomándose a la ventana de la casa del señor Ye, sin imaginar que éste se caería muerto del susto.

Este cuento pretende ridiculizar a los que hablan de una manera y obran de otra. El sello representa con exageración la majestad y el ímpetu del dragón, y describe de manera realista el pánico del señor Ye. Toda la escena parece muy real.

En el modismo Nanguo completa el número de flautistas sin saber tocar la flauta tenemos una historia acaecida durante el período de los Reinos Combatientes (476-221 a.C.), en la que el rey Qixuan del reino Qi era un gran apasionado del yu, antiguo instrumento musical de viento parecido a la flauta, y solía organizar con gran pompa una orquesta de 300 personas. Un señor que se llamaba Nanguo no sabía tocar el yu, sin embargo, entró en la orquesta para ganarse la vida. Después de la muerte del rey Qixuan, el rey Qimin heredó el trono, a quien también le gustaba escuchar el yu, aunque en sesiones privadas. Temiendo ser descubierto, el señor Nanguo se escapó. En el sello, el espacio está dividido por columnas, lo que muestra vívidamente el aspecto turbado de Nanguo cuando huía.

La pelea entre la garza y la almeja nos cuenta que una vez una almeja se arrastró hasta la playa del río para tomar el sol con las conchas abiertas. En ese momento, una garza se arrojó sobre ella y le picó la carne. La almeja cerró con agilidad sus conchas y sujetó con fuerza el largo pico de la garza, comenzando así un forcejeo a vida o muerte. Esta circunstancia fue aprovechada por un pescador próximo que las capturó con suma facilidad.

A la derecha inferior del sello hay un dibujo, el cual sirve para dividir las diferentes escenas. La riña entre la garza y la almeja, y el aspecto satisfactorio del pescador forman un contraste agradable.

En esta colección de sellos se emplean las técnicas de pincelada fina y delicada, un tipo de pinturas tradicionales de China, con múltiples colores. Cada sello se compone de varias escenas, lo que permite una secuencia completa y una coherencia en el cuento.

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