Administración
transcultural,
clave del éxito de KFC y McDonald’s en China
Por QIU JIANGHONG
 
DESDE la apertura del primer restaurante
de comida rápida de la cadena estadounidense Kentucky Fried
Chicken (KFC) en China en 1987, la cara sonriente del viejo
coronel se ha multiplicado en todas las ciudades del país.
Hasta la fecha hay más de mil restaurantes de KFC en China,
con un aumento medio anual de unos 200 nuevos establecimientos,
o lo que es lo mismo, una inauguración cada dos días.
Al
mismo tiempo, su competidor McDonald’s, otra firma estadounidense de comida rápida
especializada en hamburguesas, también expande constantemente
su negocio en China, superando en la actualidad los 600
restaurantes repartidos por todo el país desde que abriera
su primer local en China a principios de 1990.
Pese a la pérdida de negocio y a la crisis
que viven estas empresas en los Estados Unidos, en China
se han desarrollado con mucha rapidez alcanzando un ritmo
de crecimiento medio de cien restaurantes al año.
Según
un estudio, los ingresos en el sector de comida rápida en
China en 2003 fueron de 180.000 millones de yuanes, ocupando
un 8 por ciento del mercado nacional. Además de poseer una
administración estandarizada, su excelente administración
transcultural ha sido la clave del éxito y del crecimiento
sostenible de este tipo de negocios.
Comida rápida extranjera con sabor
chino
Uno de los mayores problemas a los que
se enfrentan las empresas de comida rápida occidental en
China es el alto nivel culinario de los comensales chinos.
Al principio, la comida extranjera gustó a muchos clientes
por la novedad. Pese a su alto precio -diez yuanes por una
hamburguesa y cinco por una Coca-Cola pequeña-, el deseo
de saborear la nueva comida, la idea de experimentar un
nuevo estilo de vida y la atracción de una moda desconocida,
impulsaron a los consumidores a probar este tipo de alimento.
En aquel momento, almorzar en un restaurante de comida rápida
estaba considerado como el símbolo de la vida de los ricos.
Por lo tanto, no es de extrañar que los restaurantes de
KFC fueran bien acogidos desde su acceso al mercado chino
y tras la apertura de tantas filiales.
No obstante, a mediados de la década de
1990, cuando había apenas un centenar de restaurantes de
este tipo en las grandes ciudades como Beijing, lo que atrajo
a la gente dejó de ser ya la curiosidad por algo nuevo,
y pasó a ser la conveniencia, la rapidez, la música y el
ambiente cómodo y libre.
A
muchos empleados les gusta comprar una hamburguesa en el
camino a la oficina y beber una Coca-Cola escuchando música
después de terminar su jornada laboral. Con el paso del
tiempo, los administradores se dieron cuenta de que los
clientes se quejaban del sabor y de la monotonía en la variedad
de productos comparados con la comida tradicional china.
Esta tendencia se acentuaba sobre todo durante la celebración
de las fiestas tradicionales, pues durante ellas casi nadie
acudía a estos locales, mientras que los restaurantes chinos
estaban abarrotados.
Evidentemente, el problema reside en la
diversidad cultural. Arraigadas en un ambiente político,
económico y cultural típico de los Estados Unidos, estas
comidas rápidas son el claro reflejo de la identidad de
su país, mientras que las diferencias en lo político, lo
económico, lo ideológico y el nivel de desarrollo entre
ambos países constituyen los obstáculos para la aceptación
de la cultura empresarial transnacional, reflejada de forma
destacada en el sector de comidas y bebidas.
La
realidad queda bien reflejada en un dicho popular que aconseja
que “allá donde fueres, haz lo que vieres”. En China, donde
la cultura gastronómica tradicional está muy arraigada,
la comida se caracteriza por su bello color, su intenso
aroma y su profundo sabor, así como por su rica variedad
y sus variadas formas de preparación.
Para
los consumidores, acostumbrados a la comida tradicional,
la comida rápida ha dejado de ser atractiva. Es entonces,
cuando desaparece la curiosidad, cuando la comida extranjera
muestra su punto débil frente a la gran diversidad de restaurantes
de comida china. La única salida consiste, pues, en la combinación
de ambas culturas, es decir, la absorción de factores culturales
chinos en una alimentación tradicionalmente norteamericana.
Los administradores de dichos negocios
realizaron un estudio al respecto. A partir del verano de
2001, KFC empezó a introducir varios sabores chinos en sus
menús, como la sopa de tiras de carne con mostaza. El consumidor
aceptó muy bien este nuevo plato. Tras éste, aparecieron
otros platos tales como la sopa de tomate y huevo, el rollito
de pollo, etc.
Además de la introducción de estos sabores
típicamente chinos, KFC también prepara platos mezcla de
sabores. Así, en diversas ciudades y conforme a las costumbres
locales, KFC ofrece comida de estilo local para satisfacer
a los diferentes gustos de la gente.
McDonald’s tampoco quiere quedarse atrás. Además de los menús, sus responsables
prestan atención al diseño de los restaurantes. Durante
la Fiesta de la Primavera de 2004, la gente se asombró viendo
los adornos de papeles recortados en forma del carácter
chino de la “felicidad”, pájaro y peces que decoraban los
escaparates del McDonald´s de la calle comercial Wangfujing
de Beijing, de pronunciada connotación cultural china. Así
se estrechó rápidamente la distancia entre los comerciantes
y los clientes. No poca gente decidió cambiar la celebración
de la Nochebuena de su casa al restaurante de McDonald’s.
Modalidad administrativa transcultural
En su proceso administrativo, tanto KFC
como McDonald’s no sólo han podido, mediante
el respeto, la comprensión, la asimilación y la fusión de
diferentes culturas, conservar el contenido sustancial de
su propia comida y difundir el concepto de eficiencia, libertad,
democracia e igualdad según el modelo norteamericano, sino
que también han asimilado activamente las características
culturales locales y han formado una modalidad de administración
transcultural tomando la cultura comercial americana como
base y la cultura tradicional china como elemento racional,
lo cual constituye una referencia de éxito para las empresas
foráneas en el reajuste, el enriquecimiento y la restauración
de la cultura empresarial en un ambiente cambiante con el
fin de elevar la capacidad de adaptación al mercado local.
Merece la pena citar que el éxito de la
modalidad administrativa transcultural se atribuye a unas
condiciones subjetivas y objetivas. En cuanto a lo objetivo,
la fusión de dos culturas requiere de un ambiente de existencia
similar. La eficiencia de la comida rápida estadounidense,
representada por KFC y McDonald´s, corresponde al rápido
ritmo de la vida moderna, que es la consecuencia del desarrollo
de la economía mercantil. Mientras que la eficacia relativa
sólo tiene sentido en un país de economía de mercado, con
lo que el rápido desarrollo de la economía de mercado de
China ha preparado sin duda alguna el ambiente idóneo para
la cultura de comida rápida.
En segundo lugar, la decoración interior
y los servicios de carácter humano respetan plenamente la
libertad de los consumidores y corresponden a la conciencia
de apertura y al deseo de conocer el mundo exterior de los
actuales chinos, razón por la cual ha recibido una gran
acogida por parte de los consumidores.
En lo subjetivo, el
encuentro, la combinación y la fusión de dos culturas no
se adhiere o se adapta pasivamente, sino que se ajusta y
se absorbe activamente. A través de la estrategia de nacionalismo,
KFC y McDonald’s expresan nuevamente la cultura comercial
estadounidense con signos de la cultura tradicional china,
y se esfuerzan todo lo posible por satisfacer las costumbres
dietéticas locales. Sin un reajuste positivo es difícil
lograr este efecto.
Anexo 1. Encuesta: número de clientes que
acuden a los restaurantes extranjeros de comida rápida (realizada
sobre un total de 235 estudiantes del tercer año del primer
ciclo de la escuela secundaria)
Nombre
|
KFC
|
McDonald’s
|
Pizza Hut
|
Oringol
(pizza)
|
Yoshinoya
(japonés)
|
A&W (sin servicio)
|
Maxim’s
(francés)
|
Número de clientes
|
235
|
235
|
181
|
170
|
105
|
46
|
12
|
Porcentaje (%)
|
100
|
100
|
77
|
72
|
45
|
20
|
5
|
Anexo 2. Crecimiento del número de restaurantes KFC en
China.
Número total de establecimientos de KFC
Año de apertura
|